Ana Rosa Quintana, víctima de un intento de estafa en pleno directo en Telecinco

La televisión en directo tiene esa capacidad única de capturar momentos imprevistos, genuinos, que escapan a la escaleta del día. Este miércoles, El programa de AR vivió uno de esos instantes inesperados cuando su presentadora, Ana Rosa Quintana, fue víctima de un intento de estafa telefónica mientras conducía el programa en Telecinco.

“En este preciso momento, me quieren hacer una estafa”, anunció Ana Rosa ante la sorpresa de sus colaboradores y del público. La veterana periodista interrumpía el flujo habitual del magacín matinal para compartir con su audiencia un mensaje que acababa de recibir en su móvil personal: “Hola, mamá. Mi teléfono se ha roto. Este es mi nuevo número. Envíame un mensaje por WhatsApp en cuanto puedas”.

Lejos de dejarse llevar por la alarma, Ana Rosa reaccionó con temple y experiencia, sabiendo perfectamente que se encontraba ante una de las tretas más habituales que circulan hoy día por aplicaciones de mensajería. “Mis hijos no dicen ‘mi teléfono se ha roto’, mis hijos dicen ‘mándame un bizum’”, ironizó con sorna y seguridad. “Ni me preocupo. Lo estoy diciendo porque habrá muchas personas que en este momento estarán recibiendo este mensaje u otro de que tengo un problema... Yo estoy convencida de que mis hijos están bien”.

En apenas unos segundos, la presentadora transformó un incidente digital en una lección pública de prevención, recordando con naturalidad lo fácil que resulta caer en estos fraudes, especialmente si apelan a vínculos familiares y al sentido de urgencia. Su exposición espontánea sirvió también como espejo para quienes, en casa, podrían enfrentarse a ese mismo engaño sin saber cómo reaccionar.

Con esta escena, El programa de AR no solo informó, sino que demostró cómo los medios pueden actuar como primera línea de alerta frente a amenazas cotidianas. Y lo hizo a través de una de las voces más reconocibles y seguras de la televisión española. Ana Rosa no solo no cayó en la trampa: convirtió la anécdota en aviso. Una presentadora en alerta que, con una frase coloquial y afilada, desarmó la mentira con humor y sentido común.