Cruza el mayor límite de 'La isla de las tentaciones' y se arrepiente con la chica todavía en su cama: "No tengo valores"

Los innumerables giros emocionales de los participantes de La isla de las tentaciones son dignos de estudio. En esta novena edición, Anita y Montoya son el claro ejemplo de ello con sus repetidas caídas en la seducción carnal y sus posteriores reacciones de arrepentimiento o de ira contra su pareja. No obstante, nada que ver con la abrumadora velocidad de Álvaro, que se ha arrepentido de mantener relaciones sexuales con Érika instantes después de haber finalizado su encuentro.

Después de haber cesado sus intentos con Eros, Érika ha ejercido con maestría su labor como tentadora con Álvaro. El joven, que entró junto a Alba más tarde que el resto de sus compañeros para sustituir a Gerard y la primera Alba, no ha sido capaz de mirar a otro lado y se ha dejado llevar completamente con la tentadora, con la que ha acabado pasando una noche de pasión en República Dominicana.

No cabe duda de que fue un tiempo de absoluto gozo, a juzgar por la reacción de sus compañeros, que se han arremolinado a las puertas de la habitación de Álvaro al escuchar la exaltación de los jóvenes durante su encuentro sexual (mientras Eros dormía al lado). Los espectadores han podido escuchar sus gemidos y ver los incesantes movimientos bajo la sábana, que ha dado a entender la satisfacción que la propia Érika ha compartido al finalizar: "Esto no es normal".

Álvaro analiza las consecuencias: "Toda su familia va a ser como la destrozo"

Pocos minutos después, el joven ha comenzado a sentirse culpable: "No tengo valores". No obstante, Érika ha tratado de desviar su atención cargando contra Alba a pesar de no conocerla y no saber como se estaba comportando en Villa Playa: "Bueno, tú no sabes lo que está haciendo ella, te estás machacando". "Da igual, no justifica que yo le haga daño. Yo no quería fallarle, lo sabes de sobra", se ha fustigado el muchacho.

No obstante, tras una noche de reflexión, Álvaro ha amanecido arrepentido y no se ha cortado ni un pelo ante ella a pesar de haber pasado la noche juntos. "Madre mía", se ha llevado las manos a la cabeza después de recibir un beso de buenos días. Érika ha tratado de consolarle con un "no le des más vueltas" que no ha llegado a cuajar.

"Como no le voy a dar vueltas, corazón. Lo va a ver toda su familia y el 'sin valores' soy yo, que soy el que lo ha hecho. Me va a ver toda su familia viendo como la destrozo", ha sollozado apretando su cara contra la almohada como si pudiese así refugiarse de todo lo que vendría a su salida de República Dominicana.

"Me dejé llevar y, aunque no puedo decir que me arrepiento porque a lo hecho, pecho, me siento muy decepcionado conmigo mismo", decía el joven tras valorar su comportamiento en los totales. Ante sus compañeros y el resto de tentadoras, también se ha mostrado pensativo: "Es normal rallarse". Al otro lado de la playa, en Villa Playa, Alba también se ha llevado a Sergio a su habitación tras besarse en el jacuzzi, pero no durmieron juntos y tampoco mantuvieron relaciones sexuales.