Sandra Barneda, atónita con las volteretas de Bayán para cargar contra Eros en 'La isla de las tentaciones'

Las relaciones de las parejas de La isla de las tentaciones están tocadas y mucho. El dolor y el rencor ya se han asentado en Villa Playa y Villa Montaña y hacen cada vez más difícil que sus protagonistas hallen alguna solución a sus desavenencias. A pesar de los esfuerzos de Sandra Barneda por lograr un acercamiento, todo apunta a que lo de Eros y Bayán es absolutamente irrecuperable.

Ni Eros ni Bayán han logrado superar la experiencia en República Dominincana sin caer en la tentación. La protésica dental es una de las más polémicas por su vehemencia en las hogueras y sus reproches a su pareja, lo que no le ha impedido dejarse llevar con Torres, el tentador que ha conseguido entrar a su dormitorio para disfrutar de la nocturnidad del caribe. De igual modo, al joven se la ha complicado la fidelidad al toparse con Érika.

Lo cierto es que los comportamientos de Eros fueron lo que motivó la aceleración de Bayán, que en las primeras semanas había estado mucho más comedida de lo que lo es ahora. No obstante, el paso del tiempo le ha hecho arrepentirse, de modo que en los últimos días se le ha podido ver notablemente afectado, llorando por todas las esquinas de Villa Montaña, a pesar del apoyo de sus compañeros y de la joven que conquistó temporalmente su corazón.

Bayán crucifica a Eros: "Es un papel de perrito abandonado"

Eso mismo han mostrado las imágenes para Bayán en una nueva hoguera. No obstante, sus lágrimas no han causado el efecto habitual, de pena y compasión, sino todo lo contrario. "No me da pena, tío. Cuatro años he estado yo así en mi cama. Sandra, lo veo así y me sabe fatal ser mala, pero no me duele porque yo he estado así cuatro años en mi casa. Con él no puedo tener empatía", ha expresado.

Además, ha expresado que su llanto llega tarde para lo que ella habría necesitado: "Tendría empatía si desde el primer momento en la primera hoguera me hubiera demostrado eso. Ahora, estas lágrimas cuando yo he hecho lo que sentía no me sirven". El asombro de Sandra Barneda ha hecho acto de presencia y ha tratado de calmar su enfado aludiendo a un posible arrepentimiento por parte de Eros.

"Es tarde y sabía que era su última oportunidad", ha sentenciado la joven. La presentadora le ha indicado que había más imágenes para ella y, como era de esperar, le han mostrado de nuevo al joven hecho pedazos. No obstante, lejos de compadecerse de él, ha intensificado su enfado: "Si estuviera destrozado, no me habría puesto los cuernos con Érika. Se ha liado con ella, parece que se le olvida".

Apoyada por la complicidad de su compañera Sthefany, se han mofado del sufrimiento de Eros generando cierto rechazo en Barneda. Lo ha definido como "un papel de perrito abandonado", a lo que la presentadora le ha preguntado si no consideraba que se pudiese haber arrepentido. Lo ha negado categóricamente: "Si le doliera, no me habría atacado".

Entonces, la conductora del formato de Telecinco le ha recordado que ella se habría estado comportando del mismo modo: "A ti te ha dolido verle con Érika y también lo atacabas". No obstante, ha aportado un dato externo para tratar de hacerse comprender: "Yo lo he visto con Érika y con ocho más fuera". A pesar de la insistencia de Barneda en el sufrimiento de Eros, ha incidido en que es una sólida interpretación: "Esas lágrimas me demuestran capricho, le han quitado lo que era suyo. No veo amor".