Risto Mejide: "Nadie sabe si 'Demos' funcionará. Sé que no soy favorito porque vamos contra 'Mask Singer"

Se podría decir que Mediaset lanzó al estrellato a Risto Mejide. Aunque comenzó como jurado de talent shows, el publicista catalán ha demostrado que es capaz de hacer mucho más. Tras capitanear exitosos formatos como Chester o Todo es mentira, Mejide da un paso más poniéndose al frente de Demos, un nuevo formato en el que casi 300 ciudadanos anónimos participan en un sondeo en directo y sin filtros.

Todos estos ciudadanos estarán divididos por grupos de edad en cinco gradas distintas (individuos de 20, 30, 40, 50 y más de 60 años) y todos ellos tendrán la oportunidad de opinar sobre aquellos asuntos sociales que más les preocupan. De esta forma, Telecinco apuesta para su prime time del miércoles por un formato en el que la gente corriente participará en un ferviente debate intergeneracional.

Demos será un programa en directo, que dependerá de la actualidad del mismo día. Un verdadero reto de producción en el que Risto Mejide se ha involucrado más que nunca. Y es que junto a Fremantle, el catalán produce este novedoso formato con su productora Vodevil. El Confi TV, junto a otros medios, ha tenido la oportunidad de entrevistar al presentador para conocer cómo afronta esta nueva aventura.

Desde un primer momento, Mejide reconoce que le asusta promocionar este proyecto por miedo a las expectativas previas que se pueda crear el público: "Sé que lo que tengo es bueno, pero no lo quiero sobrevender. Solo quiero que la gente nos descubra y vea que aquí hay una propuesta interesante", destaca el presentador de Demos, que es consciente del gran rival al que se enfrenta en Antena 3: "Esa noche no voy de favorito porque vamos contra Mask Singer", declara el catalán, señalando que "quiere ser segundo".

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Esta noche, a partir de las 22:50 horas, los telespectadores podrán disfrutar en Telecinco de este formato capitaneado y moderado por Risto Mejide. Un espectacular programa por el que el catalán ha tomado la decisión de dejar para siempre su faceta como juez de talent shows. Y es que, ahora, Mejide quiere hacer formatos con los que poder "escuchar".

PREGUNTA. En estas escuchas a gente de la calle, ¿has escuchado que reprochen que la televisión no trata los temas que les interesan?

RESPUESTA. Continuamente. Esta idea se empezó a gestar con el Chester, porque mucha gente me pedía que trajese a más personas anónimas. Sin embargo, no puedes dedicar dos horas de televisión a una persona que no conoce nadie. Esto tiene un punto utópico. Eso es lo que más me gusta. No solo les preguntaré por su opinión, sino que les haré votar y mojarse. Me parece muy sano saber qué es lo que piensan los ciudadanos sobre un tema. Tiene un punto de denuncia que permite elevar los temas de la calle a categoría de programa de televisión.

P. ¿Por qué piensas que la televisión se ha alejado de los temas de la calle?

R. No diría que se ha alejado, pero creo que hace mucho tiempo que no escuchamos a la calle. Ha habido muchos formatos en los que se escuchaba a la gente, pero hace mucho que no hay.

P. Habéis dicho que los invitados no serán el eje central del programa y que la escaleta no estará cerrada hasta el mismo día. ¿Tenéis a invitados apalabrados ya?

R. Tenemos a gente que les ha gustado estar en los pilotos. Por ejemplo, estuvo Pablo Echenique, pero también han pasado políticos e incluso psicólogos. De momento, no sabemos qué haremos. Trabajaremos como en Todo es mentira. El mismo miércoles por la mañana, nos despertaremos y montaremos el programa. Yo quiero que esto sea una plaza de pueblo, un lugar por el que pasa todo el mundo y cada uno dé su opinión y se reaccione a ella. Lo que más me ha gustado de los ensayos ha sido ver que la gente está muy activa. No es público, ellos intervienen.

"Puede que lo petamos y se den cuenta de que este tipo de programas también caben en Telecinco"

P. En Todo es mentira intentasteis invitar al ministro Óscar Puente. ¿Le habéis invitado a Demos?

R. Sí, de hecho, queríamos hacer el primer programa con él, pero por lo que fuera, no le fue bien y no nos dio bola [risas]. Creemos que es importante invitar a políticos cuando ya llevemos un tiempo para que nadie asocie. Hay veces que se puede juzgar al programa por el invitado, por lo que el protagonista siempre será la grada.

P. ¿Se te han roto prejuicios sobre los temas que interesan a ciertos sectores de edad?

R. Sí, tenemos mucho prejuicio sobre los jóvenes en muchas cosas. Pensamos que como no han vivido el comienzo de la monarquía o el episodio del 23F no saben nada, pero no. Aquí hay jóvenes que sí que saben. Un estudiante de ciencias políticas puede saber mucho más que un señor de 60 años. Esto es muy interesante para derribar prejuicios y también permite ver que hay personas que se sienten muy identificadas con lo que piensan en otras gradas. Aquí no hemos hecho una distinción ideológica, porque no sabemos lo que piensa cada uno. Lo que hacemos es una distinción por edades.

P. No estamos acostumbrados a ver un formato así en Telecinco. Cuando vendisteis la idea a Mediaset, ¿os pusieron líneas rojas u os dieron vía libre para hacer lo que quisieseis?

R. La venta de la idea ha sido tremendamente fácil, pero plasmar esa idea ha sido tremendamente difícil. Hay muchas cosas que hemos tenido que ir aprendiendo por el camino, pero son cosas más prácticas. El concepto del programa lo compraron desde el principio. Innovar a este nivel y no comprar un formato ya hecho es algo que solo puedo hacer en Mediaset. A mí me gusta arriesgarme porque creo que eso es mucho más excitante y estimulante.

P. Por norma general, hemos visto que en el prime time de Telecinco los formatos que funcionan son realities y programas de corazón ¿Cómo afrontas hacer un programa de corte social en esta franja horaria?

R. Supongo que es algo que le añade más riesgo a la propuesta. No me pone triunfar o no, eso ya lo decidirá la gente. Yo hago el mejor programa que puedo hacer y me tengo que centrar en eso, que lo que se haga en este plató sea la mejor versión de lo que hemos pensado. Después la gente dirá si les encaja que Telecinco haga un programa así, pero las percepciones están para cambiarlas. A lo mejor, lo petamos y el público se da cuenta de que este tipo de programas también caben en Telecinco.

"Me genera presión que 'Demos' sea en directo porque cualquiera te la puede liar"

P. ¿Te genera más presión que Demos se emita en prime time?

R. No, lo que me genera presión es que sea en directo porque cualquiera te la puede liar. Tienes que tener hasta seguridad en la puerta, pero eso me gusta. Eso sí que me pone. Entre los ciudadanos de las gradas, hay concejales, pero nos lo han informado de ello previamente. Aunque también habrá gente que no nos haya dicho cosas y que nos la pegue. Eso se irá descubriendo. Si alguien la lía, lo hará en directo.

P. Estás en Todo es mentira, Got Talent y, ahora, en Demos. Eso sin contar que Chester no ha regresado todavía. ¿Tienes miedo de que la gente te vea demasiado en televisión y se cansen de ti?

A ver si voy a tener que empezar a pedir perdón por trabajar... Estoy muy agradecido con que me den proyectos y obviamente no digo a todo que sí. Cojo aquellos proyectos en los que tiene sentido que yo esté. Me parece que en vez de criticar a los que trabajamos, la gente debería de preguntarse por qué no trabajan los que no trabajan.

P. ¿Nunca has pensado dejar Todo es mentira por otro tipo de formatos en prime time?

R. A mí Todo es mentira me está dando la vida. Cuando empezó era un suplicio, una tortura, pero ahora es mi dosis diaria de risoterapia. En estos cinco años y medio, nunca he dejado de ir a Todo es mentira porque estuviera jodido o deprimido por algo. Siempre sabía que Todo es mentira me iba a ayudar, es un programa al que yo le debo muchísimo. Para mí la televisión son ritmo e imprevisibilidad. Si tienes esas dos cosas, tienes un muy buen programa y creo que eso es parte del éxito de Todo es mentira.

"Cuando 'Todo es mentira' empezó, era una tortura. Ahora, es mi dosis diaria de risoterapia"

P. Vemos que Demos es un proyecto en el que crees y que te ilusiona, pero, ¿alguna vez has hecho un proyecto que no te ha convencido del todo porque tenías que trabajar?

R. Ha habido algún proyecto que en principio no veía para mí, como fue el caso de G20. En ese momento, pensé que, si los que sabían de televisión me proponían para ese formato, lo tenía que hacer. Pero yo no lo vi claro desde el primer momento. Eso era criticar a gente que salía en un vídeo y cualquiera es valiente cuando no tiene a la persona delante. A mí lo que me gusta es el cuerpo a cuerpo. Eso iba en contra de lo que soy yo, aunque en ese momento yo no sabía lo que soy yo.

Quitando eso, mi carrera dentro de Mediaset ha sido un lujo. Yo soy un privilegiado en Mediaset, no por la carga de trabajo que tengo, sino por el tipo de proyectos que he podido desarrollar. Demos es un salto al vacío, nadie sabe si va a funcionar, pero yo sé que esto es diferente. Será mejor o peor, pero es diferente.

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P. A ti, como ciudadano, ¿qué te preocupa? ¿Te preocupa lo mismo que al resto?

R. Yo tengo dos hijos, por lo que claro que me preocupa. Yo a mis hijos no les voy a dejar herencia, soy de los que piensan que la herencia atonta.

P. ¿Darás tu opinión en Demos?

R. ¿Cuándo no me he mojado yo? [risas] En Todo es mentira me mojo todos los días. No rehuimos ningún charco y nos metemos en todos. Así que no tengo miedo a eso.