"No he estado a la altura": Miguel Lago, al borde del llanto en 'Espejo público' por lo sucedido con sus hijos

Miguel Lago ha sido este martes, 22 de octubre, uno de los invitados estrella de Espejo público. El popular cómico acudió al magacín matinal de Antena 3 para presentar su nuevo libro en una charla con Susanna Griso y Miguel Valls en la que terminó abriéndose en canal. El colaborador de Sonsoles Ónega se mostraba muy tocado desde el inicio de la entrevista, por lo que terminó sincerándose con los presentadores sobre la mañana difícil que estaba atravesando.

Tras poner de relieve lo mucho que la crítica y el público le está devolviendo tras leerse su libro, ya que "no era consciente de que estaba volcando tanto en el libro, sobre familia, sobre mis hijos, sobre relaciones", Lago no pudo evitar sincerarse con los rostros de Atresmedia: "Procuro ser un padre presente. Soy padre por vocación, no para pagar las pensiones de la gente. Tengo cuatro hijos porque me gusta mucho la paternidad, soy militante de la paternidad. Hoy estoy un poco bajonero porque ha sido una mañana difícil".

"Se ha enfadado la pequeña y yo no he estado a la altura. Y con toda la tensión de la mañana yo le he pegado una voz y llevo tocado toda la mañana", confesaba con la voz entrecortada, pero no era este el único incidente familiar que estaba pasándole factura durante esta intervención: "Además, mi hijo Diego, de 13 años, ha suspendido un examen y le ha mandado un WhatsApp a su madre superagobiado. Está fastidiado y me da rabia. Estoy muy emocionado hoy porque esta novela me ha removido muchas cosas, y que dos de mis cuatro hijos estén teniendo una mala mañana me jode".

Susanna no daba crédito al verle tan tocado por estas dos cuestiones que quizá para ella no tuvieran tanta importancia: "¿De verdad?". "Sí, me siento así, me afecta mucho lo que les ocurre. Yo vengo aquí y, como soy idiota, lo cuento todo y soy un maná para los periodistas, pero es lo que toca. Me afecta todo lo que les ocurre porque ellos son mi vida. Intento criarlos, junto con mi mujer, para que sean fuertes, pero se van enfrentando a cosas...".

"Los padres hemos venido a sufrir, a pasar miedo, a estar agobiados, y es lo que toca. No me gustan que lo pasen mal, si ellos lo pasan mal, lo paso mal yo. Y hoy me pillan un poco más sensiblón", sentenció a este respecto antes de que el programa optase por cambiar de asunto, poniendo el foco en los diferentes charcos políticos en los que Miguel no ha dudado en meterse durante los últimos meses.

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N. Costas

Este importante cambio de tercio permitía que Miguel Lago se recompusiese un poco, mostrando ya su faceta más irónica y combativa, esa que tanto la agradece una buena parte de sus seguidores, pero que también le ha dado más de un quebradero de cabeza: "Yo he podido hacer tertulias en El hormiguero diciendo lo que he querido, con total libertad. A mí la libertad no me la coarta nadie. Ahora, también soy consciente de que me van a dar por todas partes. Ahí es donde se acaba la libertad, porque son muchos los artistas de este país que han decidido no hablar para que no les digan cosas. Eso, lo mires por donde lo mires, es una manera de coaccionar. Pero yo digo lo que quiero, lo tengo clarísimo. En mi caso, es tantísimo el amor que recibido de este país que tendría que vivir 10 vidas para devolvérselo".