Su tío abuelo Juan viajó en el Titanic: así ha contado en 'Y ahora Sonsoles' el dramático destino de este español

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Hace más de un siglo del hundimiento del Titanic, uno de los naufragios que más ha dado que hablar en la historia, y que ha generado multitud de mitos y leyendas. Lo que muchos no saben es que a bordo del malogrado barco transatlántico viajaban diez españoles, de los cuales tres no lograron sobrevivir y tuvieron un desenlace fatal aquella noche de abril de 1912.

Uno de esos españoles era Juan Monros, un joven de 19 años que vivía en Londres, y que se embarcó para trabajar en el propio barco como ayudante de camarero. De entre aquellos diez españoles, era el único que formaba parte de la tripulación del Titanic, trabajando en el servicio del restaurante a la carta del barco, para pasajeros de primera clase. Aunque no tenía experiencia en hostelería, consiguió el puesto gracias a que hablaba cuatro idiomas.

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A.N.

Su sobrina nieta, María José, ha estado este miércoles en el plató del programa Y ahora Sonsoles de Antena 3, donde ha contado algunas anécdotas sobre aquel tío abuelo que no llegó a conocer en vida, y ha mostrado unos valiosos documentos que conserva su familia: la correspondencia mantenida entre la madre de Juan y la compañía, y una carta que el propio Juan escribió a su madre justo antes de embarcarse en el Titanic con destino a Nueva York.

Por desgracia, Juan fue uno de los tres españoles que murieron en el naufragio del Titanic. Y, aunque pudo saltar al mar antes de morir y su cuerpo fue recuperado al no quedar atrapado en el barco, su familia no pudo recuperar el cuerpo, pues desde la compañía argumentaron que se encontraba en un estado de descomposición que no permitía su traslado, y lo devolvieron al mar. También recuperaron sus enseres personales: la papeleta de empeño del reloj, unas monedas y unos guantes, pero la familia ya no conserva esos objetos.

La carta que envió a su madre

"Me marcho mañana miércoles a las doce", escribió en una carta a su madre el 9 de abril. "Contéstame a Nueva York y yo también os daré noticias mías desde allí. Muchos abrazos para ti y todos los de casa". Además, relataba que "este vapor es el más grande del mundo que va a salir por primera vez, se llama Titanic".

Inicialmente, pagaron a la familia el sueldo por los cinco días que trabajó en la travesía: un finiquito de 85 libras. Finalmente, y por mediación del cónsul español en Londres, también abonaron a la familia una indemnización de unas 200 libras o algo menos.