Aitor Albizua ('Cifras y letras'): "No baso mi estado de ánimo en las audiencias"

A primeros de año, Cifras y letras regresaba a RTVE 28 años después. Uno de los concursos míticos de la televisión volvía renovado a La 2 de la mano de Aitor Albizua y, desde entonces, ha conseguido hacerse un hueco en el complejo access prime time.

Hace unos días estrenaba la segunda temporada con importantes novedades (el bote aumentará cada día en 2000 euros en vez de 1.500 como hasta ahora y llega la repesca de concursantes), siendo una de ellas su quinta noche de emisión. Y es que a partir del 30 de septiembre el espacio de números y palabras se emitirá de lunes a viernes.

Hace unos días, desde el FesTVal de Vitoria, tuvimos la ocasión de charlar con Aitor en exclusiva, que nos contaba con su habitual energía y buen rollo cómo está viviendo esta nueva etapa en la segunda cadena de Televisión Española.

Aitor, ya habéis estrenado la nueva temporada, ¿qué tiene Cifras y letras para que haya conseguido hacerse un hueco en La 2 en un horario tan complicado?

Nos hemos hecho un gran hueco y lo llevamos con mucha alegría. Es un programa muy bonito y que está recubierto de cierto cariño. El no tener muchas grandilocuencias, es decir, ir sin hacer mucho ruido, con humildad y mostrarnos normales, está haciendo que mucha gente nos reciba con los brazos abiertos, más allá del gran formato que es. Yo estoy flipando y muy agradecido.

¿Al estar en La 2 no tienes esa presión de la audiencia de una cadena principal?

Da igual estar en La 1 que en La 2, si hablamos de presión. Yo enfoco igual mi trabajo. Antes estaba en La 1, pero por la tarde. Ahora en La 2, en el access prime time, y yo estoy igualmente al 100%. A las ocho de la mañana, según me despierto, miro de la misma manera las audiencias. Aunque haya ahora menos variación y estemos más estables.

Si baja la audiencia, ¿cómo te lo tomas?

Pues mal [risas]. De siempre he sido un friki de las audiencias. Antes no lo miraba tan obsesivamente y ahora... bueno, tampoco obsesivamente, pero si la cosa no va como me esperaba... me estoy un rato más en el baño [risas] ¿Te imaginas? [risas]. El 'disgusto' me dura poco y no baso mi estado de ánimo en las audiencias. Ni de lejos. No es sano.

Llevamos un tiempo en la era de los concursos, pero ahora vivimos uno de sus puntos álgidos: ha vuelto ¡Boom! Lo sabe, no lo sabe, El rival más débil... ¿qué está pasando?

Siempre ha habido concursos y todos estos que han regresado son ya conocidos por el público. Igual hay épocas en las que se apuesta más y otras menos, pero siempre han estado ahí. Y bueno, ojalá vayan creándose nuevos formatos, se vayan incorporando novedades a los ya existentes y... qué bien formar parte de esa estirpe de los concursos en la actualidad.

Lo que sí está de moda es la continuidad de los concursantes para fidelizar al espectador, algo que en Cifras y letras se complica un poco...

Es verdad que hay concursos que fidelizan así, con participantes que están muchísimo tiempo, algo que a mí me encanta porque al final también terminas conociéndoles, pero genera contrariedad. Por un lado, tienes todo el rato caras nuevas y es gente nueva que va pasando, lo que permite que haya una renovación constante, pero si el concursante se queda mucho más tiempo también es mucho más meritorio. En Cifras y letras la persona que más tiempo ha estado con nosotros ha sido Álvaro. No sé si fueron 13 o 14 programas, y al final es como más heroico.

Yo que soy de coger cariño a la gente que está con nosotros grabando, a los concursantes y demás, por nuestra mecánica no puedo mucho. Entiendo que al espectador le pasa lo mismo y que algunas veces digan 'qué rápido ha sido, me gustaría saber más de esta persona'. Y de ahí viene una de nuestras novedades, la repesca. Va a volver gente que ya ha pasado por el concurso.

Ahora también tendréis programa los viernes, ¿te apetecía?

Sí, claro, es algo muy guay. Seguimos con el mismo plan de trabajo, pero ahora tendremos algunos días más de grabaciones. Yo siempre todo lo que sea para que el formato que estoy presentando crezca y vaya a más, ahí estaré. Mira Saber y ganar que va todos los días. Ojalá y seguir sus pasos. Y los de Jordi Hurtado y tener 25 años después ese cutis sin haber gastado un euro en dermatólogos [risas].

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N.C.

Al ser un formato más encorsetado por la mecánica y el tiempo que requiere el juego en sí, ¿cómo consigues darle tu toque?

Siendo muy rápido. Improvisando continuamente e intentando meter esa firma mía que creo que es el ser coloquial, alguien normal. Piensa que yo voy descubriendo las respuestas a la vez que el espectador y no puedo llevar nada pensado, voy reaccionando sobre la marcha. Ojalá la evolución del concurso permita que mi papel sea más protagonista, pero tampoco lo necesito. Cifras y letras es así. Pero bueno, me consta que RTVE confía en mí para otras cosas a lo largo del año...

Anda, ¿qué otros proyectos tienes sobre la mesa?

No, no, pero quiero decir, nos hemos visto en Benidorm Fest, ¿no? Pues ahí está. El año pasado estuve también en Telepasión… ojalá pudiera adelantarte algo… pero espero confirmarlo yo primero [risas]. Si sé que me encantaría seguir ligado al Benidorm y con cositas de Navidad.