"Se tuvo que ir del barrio": la persona que se interpuso entre Marron ('El hormiguero') y el Gordo de Navidad

El hormiguero arrancó la semana, como suele ser habitual, con su tradicional tertulia de cómicos. Luis Piedrahita, El Monaguillo y Marron fueron este lunes, 5 de junio, los encargados de entretener al público con sus llamativas anécdotas, entre las cuales destacó una contada por este último sobre la mala suerte que tuvo su familia: perdió el Gordo de la Lotería de Navidad por culpa de una desafortunada decisión del dueño de su bar de confianza.

"En mi familia estuvimos a punto de ser millonarios, de que nos tocara el Gordo de la Navidad, pero al final no", comenzó compartiendo el veterano colaborador, despertando las risas de sus compañeros sin siquiera haber entrado en detalle alguno.

Tras las carcajadas, Marron se remontaba a su juventud para relatar esta llamativa historia: "Mi padre tenía una chatarrería en un barrio de Lavapiés y todas las mañanas desayunaba en la misma cafetería del barrio, donde compraba siempre un par de décimos de la Lotería de Navidad. Un año, esa cafetería adquirió el número que unos meses después se convertiría en el premiado por el Gordo".

"¿Qué pasó? Pues que durante ese tiempo, un día llegó un vecino que solía desayunar allí y, al ver el número, le dijo que era demasiado feo, que no compraría ese número como, a buen seguro, haría también el resto de gente. El dueño del bar le hizo caso y cambió el número con el que jugar", expuso el cómico, con sus compañeros llevándose las manos a la cabeza.

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D. R.

"Toda la gente que había ido antes sí que compraron el número premiado, pero toda la gente que fue después, como mi padre, no. Toda esa gente se quedó sin ser millonaria por culpa de ese hombre y de ese dueño de ese bar... que se tuvo que ir del barrio", sentenció Marron.

Por último, el colaborador optaba por cerrar su relato con humor, pese a que a buen seguro les hubiera cambiado por completo la vida: "La gente les mataban a indirectas. Pasaba la gente por delante del bar gritándole cosas como que tenían que ir a trabajar por su pu*** culpa", apostillaba, despertando nuevamente carcajadas en todos los presentes en el plató.