Su polémica cita no fue la primera: las otras calabazas al soltero más criticado de 'First Dates'

Durante los últimos días, un soltero de First Dates se encuentra en la picota en las redes sociales: desde que Med pisó el restaurante de Cuatro, su actitud llamó poderosamente la atención de los espectadores del dating show, tachándolo de sobrado y prepotente por la forma en la que se dirigía a su cita. Y es que el míster no dudaba en hacerle un tercer grado sobre nutrición a una estudiante de medicina, con un tono que rápidamente la granjeaba no solo la antipatía de la joven, sino de buena parte del público.

"Esto no va bien. Hay una gran diferencia entre tener la autoestima alta y ser engreído", afirmaba la soltera a cámara, algo que quedaba más que claro a medida que avanzaba su encuentro. Tanto es así que, como no podía ser de otro modo, terminaban dándose calabazas mutuas: Med trataba de mantener la cordialidad, asegurando que, aunque no le gustaría tener una segunda cita romántica, sí podían ser amigos. Ella, en cambio, era mucho más rotunda, espetándole un sentenciador "ni amigos ni nada", muy aplaudido por buena parte de la audiencia.

Lo que muchos de ellos no recuerdan es que esta no fue la primera vez de Ouahbi en el programa de citas, ya que hay que remontarse hasta el 15 de septiembre del pasado año para ver la primera irrupción del polémico joven en el espacio de Carlos Sobera. Por aquel entonces, el equipo le emparejaba con Adel, una despampanante soltera que le entraba por el ojo rápidamente.

Con ella el trato era bien diferente al visto en su segunda cita, ya que predominaban las sonrisas, la amabilidad y el buen trato, interesándose en todo momento por conocer a la vendedora de coches que tenía delante. Sin embargo, Med ya dejó algunas pinceladas de esa personalidad que le ha acabado poniendo en el disparadero, puesto que no dudaba en demostrar su confianza en sí mismo con frases como "cada día me miro al espejo y le digo ‘voy a ser mejor que tú" o en considerarse su propio médico, psicólogo, nutricionista y hasta consejero.

Pero, sin lugar a dudas, lo que hizo saltar las alarmas en Adel era la condescendencia con la que opinaba sobre sus relaciones pasadas y la forma en la que las gestionaba, lo que sin duda abrió una importante brecha entre ambos: "Siempre pienso que es más fácil ganar el Euromillón que encontrar a una persona que encaje al 100% contigo", sentenciaba a cámara.

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Con esto sobre la mesa, estaba claro cuál sería su decisión final, unas calabazas que él ni siquiera vio venir. Med le daba una segunda cita para continuar conociéndose, pero ella tenía claro que no había encontrado en él todo lo que venía buscando, por lo que optaba por rechazarle. El joven lo encajaba bien, al fin y al cabo no podía hacer otra cosa que resignarse, por lo que ambos se marchaban cada uno por su lado.