Una empleada, a la gresca con Chicote por dejarla de "puerca" en 'Pesadilla en la cocina'

Una de las partes fundamentales del trabajo de Alberto Chicote en sus visitas en Pesadilla en la cocina es dar repaso a la situación en la que se encuentra la zona cero de un restaurante. Comprobar el estado de los alimentos, de los utensilios y por supuesto de la limpieza, es una tarea que ha parecido incomodar a la ayudante de cocina de El Palomo, por criticar su extrema suciedad.

Además de regañarles por la nefasta forma de descongelación para tratarse de un restaurante o de servir su plato estrella con grasa pasada, al chef de La Sexta lo que más le ha escamado es el mal estado de una de sus cámaras frigoríficas o la tremenda porquería que acumulaba la campana principal de la cocina.

"¡Cómo me va a poner a mí por puerca, ni mucho menos!"

"La limpieza de la campana es vuestra. No pasaría nada por darle un repasillo", comentó Chicote, mientras retiraba con sus dedos parte de la citada suciedad. "Lo tenéis solidificado. ¿Sabes cuánto tiempo tarda la grasa en solidificarse? ¡Semanas!", les reprochaba, al tiempo que les enseñaba en sus manos un dedo literal de grasa acumulada de muchos días.

"Eso no puede tener mucho tiempo, porque nosotros le damos muy a menudo", interrumpió Mary, una de las ayudantes de la cocina. "Mis manos las tengo achicharraditas de la lejía y de los productos", dijo detrás de las cámaras, en clara queja a las críticas que acababa de hacer el rostro de Atresmedia en su bar.

"Le puedo asegurar yo a usted que eso no lleva tanto tiempo, porque si algo tenemos es que limpiamos bastante", insistía la mujer, a pesar de lo evidente. "¡Huele a rancio!", cortó nuevamente Alberto, enseñándole más mugre. "No, porque nosotros limpiamos mucho, vamos", volvió a repetir Mary. "No te quiero decir si limpias mucho o limpias poco, pero aquí dentro, no", zanjó el chef.

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Un rapapolvo que surtió efecto inmediato, ya que antes de arrancar el servicio que Alberto Chicote iba a analizar junto al equipo de Pesadilla en la cocina, todos los empleados se esmeraron en dejar los fogones relucientes. "¡Vaya repaso le habéis pegado a la campana!", felicitó el chef aplaudiendo la limpieza. "¡Hombre! ¡No, espérate! ¡Mete ahora los dedos!", le contestó con retranca la aludida.

"Lo primero que he hecho antes de que llegara Chicote ha sido fregar la campana. ¡Cómo me va a poner a mí por puerca, ni mucho menos! ¡Estaría bueno! ¡A Mary la vas a poner por puerca!", dijo Mary ante los telespectadores, dejando constancia de la extrema pulcritud que dicen seguir en su cocina, a pesar de la mugre que retiró Chicote horas antes.