"Sálvame' me da arcadas": Anabel Pantoja escupe, de nuevo, contra su propio programa

Anabel Pantoja sigue siendo una de las estrellas de 'Sálvame'. Sus conflictos familiares y su propia vida personal son algunas de las tramas más explotadas del show que produce La Fábrica de la Tele para Telecinco. En esta ocasión, la sobrina de Isabel Pantoja ha lapidado a los directores del show por darle alas a una supuesta entrevista secreta de su padre hablando mal de ella.

Cuando Jorge Javier Vázquez le pedía que escuchara esa conversación antes de emitirla en directo, se descontrolaba, quitaba el micrófono y ponía su abrigo para marcharse: "Yo me voy. No vengo aquí a que se diga si él es buen padre o yo soy mala hija. Los padres de todos hay que respetarlos y mi padre no está bien. Si no quieren respetarme, seguir hablando de ello, pero yo me voy".

"No me siento valorada por ninguno"

"Mírame. Mis límites son mis límites y los marqué con mi separación. Por ser un personaje público decís que tengo que aguantarlo todo, pero no, tengo mis límites y no me los trago, ni los como, ni los cago. Me marcho para siempre porque no se valora en este programa nada. Ni la entrega, ni el esfuerzo, nada. Y ahora, que hay un problema delicado con mi padre, no me tratáis con respeto y hacéis un show. No me siento valorada por ninguno", añadía en presencia del presentador, director y sus compañeros.

La que fuera concursante de 'Supervivientes' ha seguido hablando sin temor: "No quiero estar en este programa. Ahora mismo siento rechazo, me da fatiga, arcadas. Un día es esto, otro otra cosa y llega un momento en el que como no quiero tragar con todo me voy a mi casa. Tengo mis límites. Yo entiendo todo, pero no estoy aquí para pasar fatiga ¿No me entendéis, coño? Que es mi padre...", decía mientras se ponía a llorar.

Gema López, Lydia Lozano, Kiko Matamoros y Kiko Hernández, le daban la razón, debatiendo sobre los vetos que cada uno de ellos pone en 'Sálvame' y que se les suelen respetar. Finalmente, Anabel ha recibido el apoyo de todos, incluido el de Vázquez, calmando los ánimos y argumentando que son una familia. Ella ha decidido quedarse con la esperanza de obtener el respeto que cree que se merece, pero todo apuntaba a que no iba a ser del todo así.