El día que Xavier Sardá se rebeló en el colegio y agredió a su profesor

Xavier Sardá impactó en 'Fuera del mapa' al confesar cómo acabó pegando a uno de sus profesores. El periodista reaccionó así a los continuos castigos físicos por parte de su tutor de matemáticas. Era otra época. "Yo era buen chaval, pero en el colegio había unos profesores que metían unas hostias…", desveló el catalán, provocando el asombro de Alberto Chicote. "Pero... ¿fuiste a un colegio?", le preguntó con ironía. "A mí me castigaban, pero no me pegaban".

Sardá no se cortó al afirmar que sus profesores le pegaban, especialmente su tutor de matemáticas. Sin embargo, el catalán acabó respondiendo a esta violencia con la misma moneda: "Hubo un día que no recuerdo especialmente por qué pero acabé arreándole yo a él, dándole patadas. Y la gente no conseguía que me quitase de encima", confesó el periodista.

Sardá, sobre aquel profesor: "No nos volvió a arrear nunca más"

El presentador de 'Fuera del mapa' quiso conocer cómo acabó aquel sorprendente y lamentable incidente. "El director vino para ver qué estaba pasando y yo le pregunté: '¿Aquí se puede pegar o no se puede pegar?". El máximo responsable del colegio fue muy claro: "No, no se puede pegar, señor Sardá, pero usted es muy especial". Segun Sardá, aquel episodio dio valentía a muchos otros compañeros que como él sufrían un trato vejatorio a rebelarse: "Entonces, como en un anuncio de condones, varios levantaron la mano y dijeron: 'A mí también me pega". El profesor de matemáticas nos miró con cara de odio y nos ignoró a partir de ese momento. No nos volvió a arrear nunca más", sentenció el que fuera presentador de 'Crónicas marcianas'.

Afortunadamente, los castigos físicos en los colegios están prohibidos por ley en España desde 1987. El catalán defendió cómo ese tipo de prácticas pueden volverse en contra de quienes la utilizan: "No puedes seguir pegando, porque la gente va creciendo y algún día te mandan a la mierda", bromeó Sardá, que consideró que utilizar la violencia para enseñar es una lección de vida espantosa.

A pesar de este hecho aislado, el periodista confesó que, aunque en el colegio tuvo alguna pelea, era un niño al que no le gustaban los conflictos. También contó lo que supuso perder a su madre siendo tan pequeño, ya que a partir de eso, sus hermanos y él pasaron a ser criados entre su padre y sus abuelos: "De hijo fui un bicho raro, pero es que mi casa es muy atípica. Sin embargo, espabilé rápido", afirmó Sardá.