'Viva la vida' toca la fibra a Terelu en su Navidad más amarga: "No puedo ver el vídeo"

No está siendo la mejor Navidad para Terelu Campos y 'Viva la vida' se ha encargado de recordárselo en su primera entrega de 2022. La situación sanitaria o las pérdidas de todos los seres queridos que no han podido sentarse a la mesa en esta ocasión son los principales asuntos que a la hija de María Teresa le han amargado una de las épocas, en teoría, más especiales del año.

Inevitablemente, tras un vídeo en el que se señalaba la tensa relación entre las hermanas Campos o la muerte de Mila Ximénez, la colaboradora se ha derrumbado: "No puedo verlo, perdón". "Es que son fechas complicadas y más cuando hay un ser querido que se ha ido recientemente. No sabemos qué decirte", ha apuntado Emma García, rompiendo el silencio incómodo. Sin embargo, para la madre de Alejandra Rubio no había consuelo: "Qué asco de año, de verdad".

Terelu Campos, destrozada: "Qué asco de año, de verdad"

"Lo bueno es que ya lo hemos terminado. Creo que todos teníamos ganas de dejarlo atrás", ha afirmado la presentadora de Telecinco, aunque para Campos eso no sea un motivo de alegría: "Por cambiar un número no se va lo malo. Ojalá fuera así, pero no por mí, sino por tantas personas que lo sufren y que lo pasan mal. El año pasado teníamos como menos miedo. Un año después, digo 'ostras, es que me ha invadido el miedo'".

A pesar de todo, Emma ha incidido en que ómicron, la nueva variante de coronavirus que está provocando unas cifras de contagios hasta ahora nunca vistas, es menos letal que anteriores mutaciones del virus: "Estamos en un momento en el que es más contagioso, pero es más leve, salvo en contadas ocasiones, en personas que tienen distintas patologías".

Al parecer, según ha comentado Terelu, "el tema del virus solo la tiene en vilo por su madre", que en este 2021 cumplió 80 años. Como siempre, ha sido Diego Arrabal el que ha buscado una justificación alternativa a las lágrimas de su compañera, ni más ni menos que los sinsabores que ha tenido con Carmen Borrego en los últimos meses: "Es que hay muchas cosas por ahí detrás". "No se me olvida ni un solo día que es mi hermana", se ha limitado a contestar ella.

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X.M.

No obstante, Enrique del Pozo ha querido ir más allá y preguntar si no hay forma de que llegue la ansiada reconciliación del clan. "Hablo con mi hermana todos los días por circunstancias personales y familiares. Lo hago con absoluta normalidad. No hemos hablado del tema, en eso no miento. No ha surgido, no ha habido momento. Igual, ni siquiera ganas, tampoco por mi parte. Lo que sí quiere hacer es zanjar ya esto. No voy a contribuir a esta cuestión ni un solo día más de mi vida. Primero, porque me hace daño, y, consecuentemente, porque hacemos daño a personas", ha asegurado, muy rotunda, la malagueña.

"¿Qué es lo que se ha perdido por el camino con lo de tu hermana? ¿La confianza, ese pacto no escrito de 'vamos a llevar bien esto...'?", ha seguido preguntando Arrabal. "Nunca ha habido pacto porque no había necesidad de pacto. No íbamos a un plató de televisión con una lección aprendida, solo con el conocimiento que teníamos y lo que significamos como familia", ha respondido Terelu.

A su juicio, el verdadero problema con Borrego ha sido la dimensión pública que han tenido todos sus conflictos a lo largo de los años: "Todo lo que se produce en un medio público tiene una repercusión que no tiene en casa. Entonces, es como un ovillo que se va engordando. Seamos honestos, a casi todo el mundo le ha venido bien engordar esto. A mí no, desde luego. No le estoy echando la culpa a nadie, estoy haciendo un ejercicio de honestidad que creo que todos deberíamos hacer. Cuando trabajamos en un medio público y hay un tema que interesa al espectador, aquí no damos la espalda a ninguno. Eso tiene sus consecuencias".