Anabel Pantoja, a punto de dejar 'Sálvame' para siempre: "Quiero que no se me humille"

Anabel Pantoja amenazó por enésima vez con abandonar 'Sálvame' tras las constantes mofas que realizaron sus compañeros a cuenta de su próxima boda. En lugar de alegrarse por ella, son varios los compañeros que no han dejado de criticarla en los últimos días.

Este miércoles, harta de los ataques, la colaboradora no dudó en quitarse el micrófono y levantarse para abandonar el plató. "Me hicisteis el documental hace una semana y media, y ahora os estáis riendo y mofando de mi boda para chafarla", recriminó al programa.

Anabel Pantoja, a Carlota Corredera: "Yo vengo aquí con miedo, con pánico"

"Yo quiero que no se me humille, que no se mofen de mí. ¿Queréis que celebre mi boda en una lonja? ¡Estamos locos!", denunció Anabel, con los ojos vidriosos, ante la atenta mirada de Carlota Corredera. La presentadora, en cambio, más preocupada por el qué dirán le pidió que no usara ese verbo: "Yo te voy a pedir una cosa... Creo que la palabra 'humillación' es una palabra muy grande y utilizan eso contra nosotros continuamente. Dejemos de decir humillación".

Según Corredera, "evidentemente eso no es para humillarte, pero estamos buscando alternativas porque se supone que según el señor ecologista de las Islas Canarias tú no te puedes casar en la playa". Sus palabras, sin embargo, no calmaron a la colaboradora: "Estoy agotada, Carlota".

Anabel Pantoja reconoció sentirse confundida por la actitud que el programa tiene con ella. Da igual que vaya "de buen rollo" y que les cuente "todo" sobre su boda porque, al final, solo recibe críticas. "¿Por qué me hacéis esto, en mi programa? ¿Por qué me lo hacéis?".

¿Acaso una persona no puede sentirse humillada? ¿Acaso no puede sentirse ofendida en su orgullo? "Yo siento y padezco porque es mi boda y la de 'El Negro' y llevo 3 años queriéndome casar", les recordó Anabel. Antes de marcharse la colaboradora realizó una llamativa reflexión: "Lo triste es que muchas amigas mías van a sus puestos de trabajo, locas de contentas, por contarles una buena noticia a sus compañeros. Yo, en cambio, vengo aquí y vengo con miedo, ¿vale? Vengo con pánico... porque no sé qué es lo que me van a sacar y no es bonito ir a tu puesto de trabajo sin saber lo que va a pasar".