Lara Álvarez explica la imagen de la polémica en 'Supervivientes' y desmonta las "trampas"

La primera parte de la final de 'Supervivientes 2021' emitida el miércoles, 21 de julio, ha estado marcada por la polémica. Como lleva sucediendo durante toda la edición, esta gala también sufrió múltiples acusaciones de "tongo" y "trampas" por parte de un sector de la audiencia en las redes sociales.

Olga Moreno fue una vez más la que más suspicacias levantó, en esta ocasión por dar las gracias al equipo de 'Supervivientes' durante su nominación, unas palabras que se volvieron rápidamente en su contra. Pero esta no fue la única controversia suscitada en la velada, ya que varias imágenes y vídeos de Gianmarco desataron todo tipo de críticas al programa.

El joven italiano logró no salir nominado en la velada más decisiva de la edición, pero su imagen se vio empañada por un gesto repetido en varias ocasiones que dio lugar a muchas dudas: el finalista se llevaba la mano a la oreja, un movimiento que muchos espectadores interpretaron como que estaba hablando por un teléfono móvil, algo totalmente prohibido dentro del 'reality show'.

Sin embargo, nada más lejos de la realidad, siendo la propia Lara Álvarez la que disipaba cualquier tipo de especulación al explicar mediante un comentario en Instagram lo que verdaderamente sucedía en la imagen de la discordia. "Se ve a Gian hablando con un móvil", aseguraba una usuaria, con la presentadora del espacio tirando por tierra su afirmación: "Está colocándose la diadema del micrófono".

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N.C.

Cabe recordar que durante todo el concurso los participantes han llevado siempre consigo un micrófono de collar colgando siempre sobre su cuello, algo que, por las necesidades del directo en las instalaciones de Telecinco, ha cambiado en la celebración de la primera parte de la final, donde lucían un micrófono de diadema en la cara. Así, no es de extrañar que este nuevo sistema les resultase algo incómodo a los finalistas, acostumbrados a otro sistema de microfonado. Así, no resulta raro que las cámaras captasen en más de una ocasión a los concursantes recolocándose el micrófono, que para esta ocasión rodea la cabeza y se sujeta en las orejas para acabar cerca de la boca, como si de cantantes se tratasen.