Miguel Rellán, sin pelos en la lengua: "Maltratar a un animal para que yo me divierta no es cultura"

Miguel Rellán fue este lunes, 10 de agosto, uno de los invitados de 'Espejo público' para abordar toda la actualidad informativa a propósito de la presentación de su nuevo proyecto profesional, 'Contarlo para no olvidar'. El actor, que pasó 21 días hospitalizado por coronavirus, ha vivido de primera mano el infierno de la pandemia, por lo que no ha dudado a la hora de enviar un contundente mensaje para la clase política y los insensatos que no utilizan mascarilla.

Rellán arrancó su intervención reconociendo que se encuentra "fantástico", y que el virus le "ha mejorado", lo cual no quita que lo haya pasado muy mal durante la enfermedad: "Sentía una falta de fuerza absoluta, como si mi cuerpo no fuera el mío".

Rellán: "Me gustan los toros, pero maltratar a un animal para que yo me divierta no es cultura"

"Sentía como si me hubiera pasado una apisonadora por encima. Perdí 15 kilos en esos días", prosiguió explicando justo antes de lanzar un mensaje a todos los "cuñados expertos" en el virus: "Quien no ha pasado por esto no tiene ni idea de lo que significa la enfermedad. Está todo lleno de cuñadismo... A mí me faltan datos y no quiero caer en los tópicos, pero todo el mundo opina como si fueran expertos. Creo que hay una porción, espero que mínima, de gente que no se quiere tomar esto en serio, y el virus no se ha ido, cuidado", alertó.

Tras esta crítica al exceso de opiniones, Miguel puso el foco en los políticos: "Tengo la impresión, repito, es una impresión y no una certeza, de que nuestros ilustres políticos no se están poniendo las pilas como debieran. Está cantado que en octubre llegará el rebrote definitivo, mezclado con la gripe, que vendrá como todos los años con una sintomatología muy parecida al coronavirus. Los sanitarios ya están avisando de que nos va a volver a pillar en bragas. Falta gente, se nos van a colapsar las UCIs. Esta es mi impresión, pero, como dice un amigo mío, 'no me gusta nada como está cazando la perrilla".

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Pese a todo, el actor quiso poner también en valor alguna de las cosas positivas que está dejando la pandemia: "Igual que desconfío de la generalidad, también hay individualidades maravillosísimas. Los médicos dicen que no son héroes, pero yo conozco a gente agotada, física y psicológicamente, que no tira la toalla. Hay gente que no quiere usar la mascarilla ni nada, esos se merecían que les dijeran que les va a curar su puñetero padre".

Por último, preguntado por la polémica suscitada por las imágenes de plazas de toros donde no se respetaban las medidas de seguridad, en contraposición con las restricciones en cines y teatros, el actor se mojó sobre la tauromaquia: "Viví en Sevilla durante nueve años y me aficioné muchísimo al flamenco y a los toros. Entiendo bastante de toros y me gustan muchísimo, pero renuncio a ese placer. ¿Queda claro? No creo que sea cultura. Maltratar a un animal para que yo me divierta no es cultura", sentenció con contundencia.