El enésimo abuso de 'Sálvame' con Anabel Pantoja: de comer bollos en directo a tener que besar a Kiko Hernández

'Sálvame' y su equipo lo han vuelto a hacer. Anabel Pantoja ha sido nuevamente víctima de otra encerrona en Telecinco, y otra vez, con Kiko Hernández entre los protagonistas. El espacio que presenta Carlota Corredera ha retado a la colaboradora con comer bollos de chocolate y besar a su compañero para desvelar la identidad de un invitado del programa.

Tras la monumental bronca entre Hernández y Pantoja en el mismo sitio y a la misma hora, el programa de La Fábrica de la Tele ha vuelto a jugar con Anabel otra tarde más. Bajo el paraguas de la broma y el 'show' televisivo, el equipo capitaneado por David Valldeperas ha puesto a la sobrinísima de Isabel Pantoja a comer bollería industrial a cambio de información exclusiva.

Al parecer, un misterioso invitado ha acudido al espacio de Telecinco para tener una importante conversación con la pariente de la tonadillera pero 'Sálvame' no le ha puesto nada fácil desvelar el nombre de la estrella que la ha tenido nerviosa desde primera hora de la tarde. Belén Esteban, María Patiño o Lydia Lozano han disfrutado mientras con la meditada escena.

La presentadora ha llevado a Anabel ante una bandeja con una variedad de bollos industriales que escondían en su interior retos que debía llevar a cabo, literalmente comiéndoselos uno a uno, si pretendía saber antes de tiempo quién había ido a televisión para hablar con ella. Pero lejos de mofarse de su admitida pasión por el chocolate y la comida en general, el espacio de Mediaset España ha llevado a la reciente enemiga de Kiko Hernández a tener que plantarle un beso, con una mampara casera de protección ante el coronavirus, para ver, en primera instancia, la misteriosa silueta que por supuesto no ha atinado a acertar.

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Á. Roldán

Durante toda la tarde, y aprovechando la ya común entrega de la colaboradora a las jugadas del programa, Panoja ha tenido que ir comiéndose en directo los bollos azucarados y desenmascarando más chantajes o retos que la llevarían a descubrir la persona que la espera al final del programa para decirle cuatro cosas.