"No me tiene que pedir disculpas": María Llapart, obligada a cerrar una conexión en 'Al rojo vivo' (La Sexta)

María Llapart es la persona que se está haciendo cargo de 'Al rojo vivo' mientras Antonio García Ferreras se encuentra de vacaciones. Y este pasado miércoles 22 de julio, la presentadora se vio obligada a cerrar una conexión en el programa de La Sexta por fuerza mayor.

Clara Prats, investigadora de Biología Computacional de la Universidad Politècnica de Catalunya (UPC), era la invitada del espacio informativo de la segunda cadena de Atresmedia Televisión para tratar asuntos relacionados con el coronavirus y los rebrotes que siguen apareciendo en España. En un momento determinado, se observa cómo la mujer se da la vuelta para atender a su hijo o hija, pidiendo perdón.

Llapart se muestra en ese momento totalmente comprensible: "No tenemos ningún problema. Es más, valoramos muchísimo lo que está haciendo, que nos pueda hablar, leer la pantalla, acordar de los datos y encima atendiendo a su criatura. Lo que viene siendo el teletrabajo que hemos padecido durante muchos meses. Es usted una crack, se lo tengo que decir. Gracias por atendernos en esa situación que es muy complicada. Ha habido muchas situaciones como la suya a lo largo del confinamiento".

"No se preocupe. Y si tiene que parar, lo dejamos ahí, que lo primero es atender a los niños. No me gusta a mí que les abandonemos por las situaciones laborales", añadía, dando algo de tiempo a su invitada y lanzando finalmente otra pregunta.

Clara intentaba de nuevo responder, pero le resultaba imposible, algo de lo que María era consciente y por lo que decidía terminar con la entrevista: "Señora Prats, no quiero que se preocupe. Quiero que atienda a su bebé, que le dé la atención que merece, que no se preocupe porque todo lo demás es secundario. Vamos a tener el Skype abierto y si usted después puede, porque querer ya sé que quiere, nos atiende. Y si no, encontraremos otro momento, porque vamos a estar aquí todo el verano y ese bebé necesita a su mamá".

"Perfecto, yo creo que en cinco minutos resolvemos. Apagamos el fuego y vuelvo a conectar enseguida. Disculpa", eran las palabras de la bióloga, mientras que la comunicadora quitaba hierro al asunto. "No se preocupe, el tiempo que necesite, se lo digo de corazón. Y no me tiene que pedir disculpas, se lo prometo". Pasados un par de minutos retomaban la conexión y se realizaba con normalidad.