Estallido de indignación de Jesús Calleja ante el testimonio de un investigador del CSIC

Desde el inicio de la pandemia, Jesús Calleja ha tratado de mantenerse conectado con sus seguidores a través de diferentes entrevistas en su cuenta personal de Instragam, un espacio por el que ha pasado Juan García Arriaza, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. El testimonio de este doctor ha llenado de rabia al rostro de Cuatro, mostrando una cara desconocida del aventurero.

Juan forma parte de uno de los equipos de investigadores que tratan de dar con una vacuna frente al covid-19, una importante labor que se encuentra dentro de un contrato temporal, como puso de relieve: "Yo soy investigador. Dentro del laboratorio estoy contratado a proyecto, que es algo que se estila mucho dentro de la comunidad científica. Es muy complicado tener una situación estable, entonces uno va enlazando contratos de proyecto en proyecto".

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"Espera, espera, ¿me estás diciendo que no tienes un contrato fijo en el CSIC?", preguntaba un extrañado Calleja, algo que García Arriaza negaba: "No, qué va, qué va. Para que se haga una idea la gente, yo acabé la carrera hace 23 años y desde hace 17 años estoy doctorado. Desde todo ese tiempo he ido enlazando becas o contratos de forma inestable. Es una realidad que se está dando en todos los laboratorios de este país. Es una situación bastante curiosa".

Esta explicación era la que hacía estallar al presentador de 'Planeta Calleja': "De verdad, ojalá esta charla llegue a otros lugares y se te escuche. Como persona que he viajado mucho a diferentes países, creo que no hay ningún lugar en el mundo tan bonito para vivir como en España; cuando escucho un testimonio como el tuyo, de alguien que no sabe cómo va a ser su vida laboral más allá de enero, que sois seis en el laboratorio y seguramente tienes a gente en tu equipo que no llega a los 1000 euros, donde tenemos problemas para fabricar una vacuna, asuntos burocráticos... ¡Me entra una mala hostia de pensarlo, de verdad!".

La indignación de Jesús Calleja era cada vez mayor, lo que le llevaba a perder las formas: "¿Cómo puede ser, de verdad, que pase esto en este país? Es que no quiero ni hablar, porque ahora mismo estoy muy cabreado con todo lo que me has contado. Mira que es difícil verme así porque yo soy un tío muy echado para adelante, pero hoy estoy de mala hostia con lo que me has contado...", reconocía el aventurero tratando de morderse la lengua antes de despedir a su invitado.