El zasca a Pablo Motos de un mendigo al que acababa de ayudar con 200 euros: "Demoledor"

Pablo Motos arrancó este miércoles 'El hormiguero' con una reflexión sobre dos lecciones de vida que aprendió en un mismo día. De un día para otro vio su sueldo multiplicado por veinte; un inesperado golpe de suerte que le llegó cuando apenas lograba llegar a fin de mes.

"Yo trabajaba en Onda Cero Valencia y un día cuando entré a la emisora me encontré con un hombre gritando a la recepcionista. Quería que le hiciesen un descuento en la publicidad". Según Motos, se trataba de "un hombre muy importante" y nadie le hacía caso.

"Al mes siguiente cuando me llegó la nómina, con la comisión de publicidad, mi sueldo se había multiplicado por veinte"

"Me bajé a publicidad y no había nadie en el departamento. Entonces me metí en el despacho del director para explicarle lo que estaba pasando. Me echó porque estaba en medio de una reunión, pero me dijo que le rebajara un 5% para que se callara". Dicho y hecho. Pablo Motos subió a la recepción y tras comunicarle a aquel señor que le iban a aplicar un 5% de descuento le cambió la cara.

"¿Tú quién eres?", le preguntó a Motos. "Le respondí que un locutor de la emisora. En ese momento, me dijo que quería que le llevara yo la publicidad". Según desveló el conductor de 'El hormiguero', "efectivamente se trataba de un cliente importantísimo porque al mes siguiente cuando me llegó la nómina, con la comisión de publicidad, mi sueldo se había multiplicado por veinte. Yo entonces ganaba lo justo para llegar a fin de mes y algunos meses incluso me tenían que ayudar mis padres".

Tras comprobar que no había habido ningún error en el pago, lo primero que hizo Pablo Motos fue ir al banco, sacar un montón de dinero y salir a la calle a gastárselo. Fue entonces cuando el presentador se encontró con un sintecho o "mendigo", palabra que empleó Motos. "Le di el equivalente a unos 200 euros de ahora. No había tenido dinero en la vida y, de repente, tenía mucho".

Pero no sería aquella la única vez que se cruzaría con esa persona. "Cuando iba hacia la emisora, pasé por la puerta de una de las mejores marisquerías de Valencia y decidí entrar. Me encontré en la barra al mendigo con una bandeja gigante de gambas. Me acerqué y le dije que se cortara un poquito y que guardara el dinero". Fue entonces cuando Pablo Motos recibió un zasca "demoledor", como él mismo dijo en el programa: "Se dio la vuelta y me dijo: 'Si cuando no tengo dinero no puedo comer gambas y cuando tengo dinero no puedo comer gambas, ¿cuándo puedo yo comer gambas?".

Según Motos, "lo que aprendí ese día es que la vida te puede cambiar en un momento, también para bien. Lo único que existe es el presente y hay que disfrutarlo con la mejor actitud. Y lo digo por la gente que en este momento tiene problemas económicos, que es mucha. Que las cosas estén mal ahora no significa que no vayamos a salir de esta, y para eso es importante que cuides tu actitud en el presente. Ten la mejor actitud, así si pasa cerca un golpe de suerte seguro que lo coges".