Jesús Calleja recuerda el momento más trágico de su vida: "Llegué a pensar que jamas volvería a ver la luz del sol"

La vida no será la misma tras la crisis del coronavirus. La pandemia traerá consigo una de las mayores crisis económica, financiera y social que se recuerden, pero "de lo más difícil siempre se sale airoso", asegura el aventurero Jesús Calleja.

El presentador de 'Planeta Calleja' ha aprovechado su cuenta de Instagram para recordar el momento más delicado de su vida. El aventurero pensó que nunca más volvería a ver la luz del sol, sin embargo, tras permanecer 10 días atrapados bajo tierra lograron salir sanos y salvos de aquella durísima experiencia.

"Estoy seguro de que cuando pase esta crisis del coronavirus, seremos mejor personas", asegura confiado Calleja. "Nos quitaremos muchas mierdas a las que damos demasiada importancia y, sobre todo y por encima de todo, seremos más felices".

El 1 de septiembre de 2013 'Desafío extremo' (Cuatro) dio inicio a su mayor y más peligroso reto con una expedición que pasó a la historia: internarse en las entrañas de la tierra en la sima Krúbera-Voronya, en Abjasia, la más profunda del planeta (a 2.080 metros) y convertirse en el primer programa de televisión que grabase a esa profundidad. Lo que nadie imaginó fue que el peligro no estaba en el laberinto subterráneo, sino en el exterior.

"Una vez superado el peor momento de mi vida vi y sigo viendo la vida desde otra perspectiva"

El objetivo era descender por la cueva más profunda de la Tierra, sin embargo, los planes cambiaron tres días después. La prioridad no era otra que la de salir sanos y salvos de una trampa provocada por una gota fría que descargó 50 litros por metro cuadrado, multiplicando por cuatro el caudal de agua filtrado al interior de la cueva.

"Pagué un peaje muy alto", reconoció Calleja. "Quedamos 10 días atrapados en la sima porque cambió el tiempo. Hubo unas nevadas y unas lluvias brutales y por donde entramos al principio ya no podíamos subir. Lo que teníamos que haber bajado y subido en tres días no tiramos 10 días para hacerlo, sin comida y pasándolas canutas".

Según Calleja, "aquello fue terrible porque tienes la sensación de estar enterrado vivo y de que te vas a morir [...]. Y pasarán igual dos meses hasta que la palmes. Fue el momento, quizá, el más delicado de mi vida, pero como sabíamos que dependíamos de nosotros mismos, nada más que tuvimos una miniventana, lo intentamos y conseguimos salir". A pesar de las dificultades, el equipo del programa de Cuatro consiguió grabar por primera vez en la historia de la televisión imágenes a -1.600 metros de profundidad.

Aquella terrible experiencia le dio una gran lección de vida que hoy vuelve a recordar: "Me he prometido a mí mismo que voy a cambiar cosas de mi vida para disfrutar más de los pequeños detalles porque nos comemos la cabeza con chorradas y simplemente vivir es lo más grande que podemos tener". Calleja tiene muy claro que "ganaremos al virus" y no solo eso, que también "ganaremos como humanidad".