Carlos Lozano pierde los papeles en 'GH VIP 6' contra Mónica Hoyos

La casa de 'GH VIP 6' continúa recibiendo visitas. Tras el paso de Paula Echevaría, Maribel Verdú, Juana Acosta o Anita Matamoros, este lunes, 1 de octubre, le ha tocado el turno a Carlos Lozano. El que fuera segundo finalista de la cuarta edición del reality show ha regresado a Guadalix de la Sierra para reencontrarse con sus dos exparejas y concursantes de la presente temporada: Mónica Hoyos y Miriam Saavedra.

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La relación de Carlos con las dos mujeres que han marcado su vida sentimental es complicada, pero su actitud ha sido muy diferente con cada una de ellas: con Miriam trató de arreglar las cosas, pero con Mónica perdió completamente los papeles por lo que el considera "meter mierda" en su relación.

Carlos Lozano: "Llevas 14 años jodiéndome la vida. Estoy harto. Estoy cansado. Haz tu puto concurso. "

"Estoy bastante mal. Llevo aquí una costra dentro que tengo que soltar. Vengo a decirte que basta ya de meterte en mi vida, en la de mi pareja, en la de antes y en la de ahora", arrancó diciendo el presentador, elevando cada vez más el tono de voz.

"No vengas así. Tengo muchas cosas en la cabeza como para que me vengas en ese plan", respondía Mónica para tratar de calmar un poco la situación, sin éxito. "Eres muy mentirosa. Estás poniendo cosas feas en mi boca que yo no he dicho. Que yo contigo no hablo, olvídate de mí. Llevas 14 años jodiéndome la vida. Estoy harto. Estoy cansado. Haz tu puto concurso. Hay que ser falsa y mentirosa. Me has jodido la vida al meter mierda", repetía una y otra vez Lozano, fuera de sí.

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Hoyos no podía hacer otra cosa que contenerse, ya que ponerse a su nivel hubiera sido todavía peor: "Baja la voz. A mí me respetas porque soy la madre de tu hija". "Esa es tu defensa, que no haga nada en toda mi vida porque te debo algo por mi hija. Y no es así, yo me debo a mi hija, a ella. Solo a ella. No a ti", insistió muy enfadado Carlos.

Miriam entra en escena

En ese punto de la conversación entraba en escena Miriam, con quien Lozano ya había tenido un pequeño encuentro en el que trató de hacerle ver que era Hoyos quien se inventaba todo sobre él.

Al verla entrar, Mónica fue calentándose cada vez más: "No me voy a sentar con vosotros, con unos sinvergüenzas. Qué ridículos, qué sinvergüenzas. Sois tal para cual", afirmaba en repetidas ocasiones ante la disputa que ahora estaban manteniendo Carlos y Saavedra acerca de terceras personas en su relación.

Miriam intentaba dejar claro que nunca le había sido infiel, pero la presencia de Mónica metiendo pullas de por medio no ayudaba para solucionar sus problemas. Finalmente no llegaban a ningún entendimiento, con los tres enrocados en sus posturas iniciales. Un auténtico espectáculo, y no necesariamente bueno, que dejó a Mónica muy tocada en su regreso a la convivencia, siendo arropada, entre lágrimas, por sus compañeros.