Samantha Vallejo escupe uno de los platos en el "festival del asco" de 'MasterChef 5'

Cuatro opciones: tradición, presente, futuro e inconexo. Esta era la premisa sobre la que han tenido que trabajar los aspirantes de 'MasterChef 5' en la primera prueba de la gala, emitida el domingo 11 de junio. ¿El resultado? No bueno en todos los casos.

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Odkhuu ha sido el encargado de entregar a cada uno de los participantes las cajas que contenían los ingredientes para preparar una de las cuatro categorías antes citadas. Él se ha quedado con la tradicional, que ha compartido con Edurne, y ha entregado el presente a Elena y José María, el futuro a Nathan y Jorge, y el inconexo a Silene y Miri.

El primer error ha llegado en la categoría de presente. José María se ha decantado por crear unos nigiris de quinoa que no han convencido al jurado. El principal error, tal y como se ha comentado, ha sido sustituir el tradicional arroz por quinoa. "Aquí haces una quinoa que no la aliñas y pones unos trozos encima que no aportan nada", le ha dicho Pepe Rodríguez.

Samantha Vallejo ha aprovechado el discurso de su compañero juez para catar la creación del banderillero, pero no ha necesitado palabras para calificar el plato: ha acabado escupiendo el trozo que probaba. "Un repescado en 'MasterChef' no puede entrar con ese ánimo de pacotilla", le ha reprendido Jordi Cruz.

Silene rellena unas aceitunas con chocolate

En el reparto de las cajas, Silene y Miri han sido, aparentemente, las que peor suerte han llevado. Y es que Odkhuu ha reservado para ellas la categoría de inconexo: una serie de ingredientes que, a primera vista, no casaban, pero que tenían el sabor amargo como núcleo común.

La brasileña ha decidido experimentar en su creación, rellenando unas aceitunas, previamente marinadas con vermut, de chocolate. "Cuando haces eso, mi cerebro me dice que voy a morir", le ha dicho Cruz. "Más amargo, más malo, no puede estar", ha sentenciado.

"El conjunto de sabores es una locura. Es una especie de festival del asco", ha valorado Vallejo, aprovechando para preguntar a la concursante si le apetecería tomar el plato que ha preparado. Un escueto "no" como contestación ha sentenciado la crítica del jurado.