Silvia Jato, presentadora del congreso del Partido Popular Europeo

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El Congreso del Partido Popular Europeo ha reunido esta semana en Valencia a los principales líderes de la derecha tradicional del continente, en una cita clave para definir su hoja de ruta en un contexto marcado por la incertidumbre global, y con el nombramiento de la eurodiputada española Dolors Montserrat como nueva secretaria general del PPE. Celebrado entre el martes 29 y el miércoles 30 de abril en Feria Valencia, el evento ha estado blindado por un fuerte dispositivo de seguridad y acompañado de manifestaciones ciudadanas, en especial por la gestión de la DANA en la Comunidad Valenciana. En ese contexto, parte del protagonismo ha recaído en la figura inesperada de Silvia Jato.

La que fuera primera presentadora de Pasapalabra hace ya bastantes años ha reaparecido ante los focos, ahora con un rol muy distinto al televisivo. Jato ha sido la encargada de conducir el congreso europeo del PP como maestra de ceremonias, con una introducción de bienvenida y presentando a los distintos intervinientes y actuando como hilo conductor del evento político. La elección no ha pasado desapercibida, ni por su perfil mediático ni por su vínculo personal con el PP: está casada con Alberto Fabra, diputado nacional y expresident de la Generalitat Valenciana.

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Ana Belén Ramos

La trayectoria de Jato es bien conocida por la audiencia española. Comenzó su carrera en los años noventa en la TVG y más tarde en Antena 3, donde destacó al frente de programas como Noche de Impacto o Pelopicopata. Entre 2000 y 2006 presentó Pasapalabra, con el que alcanzó su máxima notoriedad como presentadora. A lo largo de los años ha trabajado en distintas cadenas, incluidas Telecinco, Cuatro, TVE y Telemadrid como parte de una gran variedad de programas, y ha participado en campañas institucionales vinculadas a causas sociales.

Una elección con carga simbólica

El nombramiento de Silvia Jato como presentadora del congreso ha generado comentarios tanto dentro como fuera del ámbito político. Su figura representa un perfil comunicativo solvente, pero también un rostro que conecta con generaciones de espectadores. La decisión del PP ha sido interpretada como un intento de reforzar su imagen institucional de forma amable, a través de una comunicadora con experiencia y reconocible por la ciudadanía española.

La relación entre Jato y Fabra comenzó en 2015, cuando se conocieron en una fiesta del diario La Razón, y culminó en matrimonio en 2021. Tal como explicó la propia presentadora en declaraciones recogidas hace unos años por Semana, "yo no estoy con el político, estoy con la persona", y "es una persona íntegra, que defiende la integridad por encima de todo". Alberto Fabra es el único expresident valenciano del PP que no ha sido nunca procesado judicialmente por corrupción, a diferencia de Zaplana, Olivas y Camps.

Aunque Jato ha mantenido un perfil público más bajo en los últimos años, su regreso a escena como conductora del congreso europeo ha vuelto a poner los focos sobre ella, esta vez desde un punto de vista diferente.