Ana Rosa gana la batalla a Jorge Javier (operación de alto riesgo en Telecinco)

Visto su estatus televisivo doblemente acorazado —presentadora estrella y dueña de su productora— es difícil imaginar a Ana Rosa Quintana tomando decisiones al tuntún.

Otelum SL, la sociedad de Ana Rosa, registró hace unos años los siguientes nombres de programas en marcas y patentes: La mañana de Ana Rosa, La tarde de Ana Rosa y La noche de Ana Rosa.

Pues bien: el momento de ver clonada a Ana Rosa Quintana ha llegado.

Mediaset ha decidido cargarse Sálvame y nombrar nueva reina de las tardes a Ana Rosa, como adelantó El Mundo.

"Ana Rosa ha salido al rescate de Telecinco"

El volantazo tiene tantas implicaciones industriales y ramificaciones culturales como usted quiera.

La más evidente es que estamos ante el fin de una era televisiva, como ya anunció la sustitución de Paolo Vasile como consejero delegado de Mediaset el año pasado.

Vasile encadenó dos décadas de éxitos en Telecinco (líder de audiencia, pero también de negocio: Mediaset tuvo 1.461 millones de euros de beneficios la pasada década). Todo ello con una programación entre escatológica y psicodélica, de realities, corazón visceral y patio desaforado de vecinos, lo que para algunos era telebasura y para otro entretenimiento psicotrópico.

Hasta que Antena 3, cansada de imitar el macarreo de Telecinco, pero quedándose siempre a medias, decidió dar un giro estratégico hacia una tele familiar y para todos los públicos. Antena 3 pasó su travesía del desierto, pero cuando los resultados de audiencia llegaron, el circo de Vasile se vino abajo.

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Superada holgadamente en audiencia desde hace muchos meses, Telecinco estaba obligada a hacer algo de cara al curso que viene.

Que el Sálvame de Jorge Javier Vázquez estaba rentabilizado se daba por hecho en la industria hace tiempo. El dilema era ¿qué hacer?

Lo que ha hecho Mediaset es mirar hacia dentro y sustituir al antiguo rey de las tardes por la actual reina de las mañanas. ¿Qué significa a nivel formal y temático? "Un producto menos bestia y un poco más refinado, pero también pasar de la agitación progresista de Jorge Javier al discurso más duro con el gobierno de Ana Rosa; a ver cómo responde a esto la audiencia histórica de Sálvame", aseguran fuentes de la competencia.

Este detalle ideológico puede ser malicioso, pero no es baladí. Desde hace unos meses, y como confirman fuentes internas, Mediaset "estudia diversas vías" para reflotar sus informativos, maltratados durante años por Vasile, que se cargó los telediarios de Cuatro y dejó a Pedro Piqueras atrapado en el mismo plató de Telecinco durante años (y a expensas —en las conexiones— de las excentricidades de Sálvame).

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Mediaset quiere estar en la batalla informativa del día a día, y Ana Rosa puede empezar a rellenar ese hueco a la espera del relanzamiento de los telediarios de la casa.

Pero hay más.

Los últimos meses hubo bastante tensión entre la productora de Sálvame (La Fábrica de la Tele) y la de Ana Rosa (Unicorn), ambas participadas por Mediaset, lo que no les impidió lanzarse pullas en directo; por todo ello, es difícil resistirse al titular de que Ana Rosa le ha ganado la batalla de los presentadores estrellas a Jorge Javier.

Unicorn pasa a ser la productora alfa de Mediaset, al controlar las mañanas y las tardes a partir de septiembre.

Todo lo contado hasta ahora, por tanto, son muy buenas noticias para Ana Rosa Quintana.

Pero siempre hay un pero...

El gran marrón

Como veterana del negocio televisivo, Ana Rosa tiene memoria a corto plazo (no importa la audiencia que hayas hecho ayer si el programa de hoy no funciona), pero también a largo plazo: si usted es joven, quizá solo la conozca como la reina de las mañanas en Telecinco, pero una vez fue la reina de las tardes en Antena 3, donde fue descabalgada cuando dejó de serlo.

Ana Rosa, en definitiva, conoce el paño vespertino (y lo engorroso que puede llegar a ser). "Quién controla las tardes, domina la audiencia mensual", afirman en la industria.

La empresaria y presentadora sabe que las tardes se han convertido en el gran problema de audiencia de Telecinco, ante el funcionamiento marcial de productos de Antena 3 como el imbatible Pasapalabra.

"Ser la reina de las mañanas no es fácil, pero ser la reina de las tardes es mucho más complicado. Las mañanas no mueven los suficientes espectadores para ser decisivas en el share mensual, influyen más sobre la imagen de la cadena que sobre la audiencia", afirma un analista de audiencia.

Ana Rosa, en definitiva, ha sido premiada, pero también se va a comer un gran marrón.

"Ser la reina de las mañanas no es fácil, pero ser la reina de las tardes es mucho más complicado"

"Mediaset estaba en problemas y Ana Rosa ha salido al rescate de Telecinco. Desde su condición de productora de referencia de Mediaset, no podía decir que no, pero es una operación de alto riesgo. Primero, porque la competencia entre programas vespertinos parecidos va a ser feroz (Sálvame estaba en caída libre, de acuerdo, pero competía contra sí mismo). Segundo, porque no solo se la juega la productora de Ana Rosa, sino ella misma, que, al fin y al cabo, es la estrella de su propia empresa", aseguran fuentes conocedoras de los entresijos de la decisión.

Como decíamos al principio, Ana Rosa tiene registrado La mañana de Ana Rosa, La tarde de Ana Rosa y La noche de Ana Rosa. Al margen del nombre que pueda tener su nuevo magazine vespertino, una cosa está clara: Telecinco ha puesto su futuro en manos de Ana Rosa, multiplicada en breve en diversas franjas horarias (se dice, aunque aún no está claro, que seguirá presentando la mesa política mañanera de su programa).

La soldado (y generala) Ana Rosa ha venido a apagar la madre de todos los fuegos en Telecinco. Puerta grande o enfermería.