La cúpula de 'Sálvame' da su veredicto: Terelu y Lydia siguen en el programa

Han pasado una de las peores semanas de su vida, pero la agonía de Terelu Campos y Lydia Lozano ya ha llegado a su fin. Por primera vez en la historia de 'Sálvame', la cúpula de la Fábrica de la Tele ha emitido un comunicado para explicar en la tarde del viernes 3 de noviembre, en pleno directo, la decisión sobre el futuro de sus colaboradoras: se quedan.

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Los responsables del formato nunca habían intervenido en el contenido, pero debido al revuelo y la polémica que ha generado la filtración de que el programa se estaba planteando prescindir de los servicios de algunos de sus tertulianos, dieron la cara. Lozano, Campos, Rafa Mora o Jesús Manuel formaban parte de una lista que crecía cada día y en la que hasta los propios compañeros votaron.

Queremos a esa Lydia que se entrega en 'Sálvame', no a la que se encontraba apagada durante los últimos tiempos

Sin embargo, todo se quedó en un mero tirón de orejas. La cúpula del programa alabó el buen hacer de todos y cada uno de los miembros del programa durante su trayectoria, pero dio un toque de atención, especialmente a Lydia, por considerar que se estaba acomodando: "Necesitamos la Lydia Lozano entregada de siempre. La que ríe, la que llora, la que baila, la que canta, la que se entrega. Queremos a esa Lydia en 'Sálvame', no a la que se encontraba apagada durante los últimos tiempos".

De Terelu destacaron su profesionalidad, su capadidad de convertirse en Terelu, dejando a un lado la muletilla de "hija de María Teresa". "Hemos visto cómo en la última semana has sacado la garra. Pasaste del enfado a pelear por tu puesto, a participar más, a ser más irónica. Esa es la Terelu que nos gusta y conocemos. Tanto dentro como fuera de plató, imposible contarlo con palabras".

En cualquier caso, los responsables del programa pidieron disculpas "por no haber reaccionado a tiempo cuando se filtró la noticia a la prensa", pero haciendo hincapié en que "el nombre de Terelu no estaba sobre la mesa". Para finalizar, el comunicado emplazó a cada colaborador a una reunión, poniendo en valor el sentido del programa: "entretener a la gente en unos tiempos tan problemáticos. Ser ejemplo de comunicación, aunque sea a gritos, porque el diálogo es la base de todo. No podemos cambiar el mundo, pero sí hacer mejor la vida de quien puede cambiarlo".

Tarde de gran tensión

Terelu y Lydia se han enfrentado, junto a algunos de sus compañeros, a una decisión que podía haber cambiado su futuro profesional. Con un cronómetro en cuenta atrás marcando el tiempo hasta las seis de la tarde, momento en el que se comunicaba la decisión de la cúpula, ambas hacían reflexión sobre lo que podían encontrarse.

Ximénez y Jorge Javier aprovecharon para dejar claro que "a pesar de que algunas personas puedan pensar que es todo un paripé, solo había que verles la cara para confirmar que era cierto".

"Lo importante que es hacer entretenimiento en estos tiempos tan duros, donde manda la actualidad". Jorge Javier

El presentador quiso poner de manifiesto "lo importante que es hacer entretenimiento en estos tiempos tan duros, donde manda la actualidad. Pero hay que seguir y aguantar el chaparrón. No es fácil, pero no siempre se tienen buenas audiencias. Estamos todos viviendo una situación muy complicada y muy difícil, pero nuestro deber es seguir aquí".

Los días más duros de las colaboradoras

Fue en la tarde del 25 de octubre cuando, en la mitad del programa y mientras Terelu y Lydia trabajaban, como cada día, descubrieron que sus jefes estaban valorando prescindir de sus servicios. Lydia lloraba, defraudada, Terelu se enfadó y pedía que alguien diera la cara y explicara por qué no se lo habían comunicado durante la reunión. Nadie les negó la trágica decisión que no las dejaba demasiado bien paradas profesionalmente y sus compañeros comenzaron a poner en duda y valorar si se estaban relajando o si necesitaban descansar.

Las dos dejaron claro en todo momento que querían seguir en el programa, y contra viento y marea siguieron acudiendo cada tarde a trabajar, poniendo la mejor cara que podían poner y pidiendo explicaciones a lo sucedido. Hoy ya todo está más calmado, pero seguro que ninguna se le olvida el momento tan "desagradable, bochornoso y humillante" que, como la propia Lozano describió, vivieron delante de toda España.

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