Los verdaderos rostros revelación de '¿Quién quiere casarse con mi hijo?'

Un mes y medio de grabación, cinco tronistas y más de 20 aspirantes a encontrar el amor. ¿Quién quiere casarse con mi hijo? se ha convertido en toda una revolución de las redes sociales. Un programa destinado a encontrar pareja y que, sin embargo, para Mediaset es una verdadero casting de estrellas. Sus verdaderos talentos tienen nombre propio, tróspidos, aunque para ganarse el título hay que tener ciertas características especiales. Y es que sobre el resto este año han destacado tres singulares nombres:Leti, Svetlana y Andrea. Todas ellas coronadas por su reina, Luján Argüelles.

Todas ellas eran candidatas a abandonar el programa antes de que el becario de Luján hiciese sonar su soñada claqueta. Sin embargo, se ganaron el cariño del público, el reclamo de los espectadores y la aceptación de sus pretendidos. Este miércoles, Leti y Svetlana, candidatas de Leo y Alexis, respectivamente, se convierten en azafatas de la propia Luján Argüelles para presentar la segunda edición del Festival tróspido (22:30 horas en Cuatro), que otorga premios a todos los concursantes del programa.

Leti, eterna ibicenca, fue una de las participantes más originales de Leo, el argentino. Su pasado coqueteando con el porno y su presente enamoradizo con las discotecas la puso en la diana de los espectadores como clara favorita. “Yo creo que ha sido simplemente por ser yo misma y natural, y no importarme ni las cámaras ni lo que piense la gente. Por mostrarme tal y como soy”, cuenta la joven a Vanitatis. ¿Cuánto hay de verdad? “100% natural”, dice ella. Lo que sí pasa es que hay muchas cosas que quizáno hayan salido porque se graba muchísimo”.

Aunque nunca fue favorita en la lista de su pretendido, su complicidad con hijo y suegra la colocó en el ranking de las “amigas”. De pretendiente pasó a ser jurado y a opinar sin pelos en la lengua sobre las que hasta ese momento eran sus compañeras. “Mi hombre perfectoes feucho, delgaducho. Eso en cuanto a físico. Y con tatuajes, dilataciones y toda la parafernalia esa. Pero bueno, sobre todo que sea divertido, gracioso, salao. Que me siga un poco el ritmo”.

Leti ha pasado de coquetear con un hombre a coquetear con la televisión. Afirma que ahora “no” está dispuesta a enamorarse. “No tengo tiempo”, dice. Sin embargo, dice un sí bien alto cuando se le pregunta por si quiere seguir en este mundo. Parece que Leti ya ha encontrado a su hombre perfecto. “Fui principalmente a vivir una experiencia. Sé que suena un poco tópico pero es cierto. Nunca me imaginé que podía ser ni nada así”.

¿Personaje o personajillo? “Personajillo”, responde. “Pero eso lo he sido siempre”. “No sé si se reían de mí o conmigo pero el caso es que lo han hecho estupendo porque a la gente le ha encantado”. Sobre el porno prefiere mantenerse callada. “Por el poder de Space, que vivan los novios”, y es que para ser un grande de la televisión hay que tener una frase de cosecha propia.

Dos rubias sin cortes de producción

Svetlana comenzó cauta pero terminó subida a una barra de baile. Era la mayor del clan aunque siempre intentó ocultarlo. Eso la convirtió en una tróspida con letras mayúsculas. 33, decía ella. La propia Luján tuvo que hacer un desmentido. Sus acciones la colocaron como favorita para acompañar a la presentadora en el Festival. Y es que, aunque no encajó ni con su pretendido ni con sus compañeras, Svetlana se casó con el público.

Andrea era favorita para salir despavorida en la primera gala. Víctor titubeó a la hora de dar una oportunidad a la joven rubia que se presentó como una mezcla de pija y choni. Y, sin embargo, fue la elegida final para sorpresa de todos. Salió de la mano de Víctor con una madre convencida y, aunque no se puede hablar de final feliz en su historia de amor, pudo mirar al resto por encima del hombro.

Luján Argüelles, maestra de ceremonias

Si hay alguien que ha salido agraciado de ¿Quién quiere casarse con mi hijo?, esa es Luján Argüelles. La presentadora se ha convertido en la reina de un nuevo género televisivo. Es musa y rostro de Eyeworks Cuatro Cabezas. Desde que iniciase su carrera de rompecorazones con Granjero busca esposa, la asturiana no ha pasado de tener bajo su regazo a jóvenes promesas del medio.

¿Quién quiere casarse con mi hijo? es su niño mimado, pero por sus manos han pasado Un príncipe para Corina o Hijos de papá. Su próximo proyecto, ¿Quién quiere casarse con mi madre?, que comenzará la próxima semana, e Inteligencia artificial.

Luján se ha desabrochado el cinturón y ha dejado que el equipo juegue también con ella. Antes, encorsetada presentadora sobre una tarima, ahora se ha convertido en un personaje más de esta obra de teatro que este miércoles echa abajo el telón.