Los guionistas reclaman su papel como figuras claves en la televisión

Hace ya más de cinco años, la huelga de guionistas en Hollywood llevó a la paralización de grandes series de televisión como 24, Perdidos, The Office, Mujeres desesperadas o Anatomía de Grey. La disputa laboral se centraba en los pagos derivados de la venta de series en DVD y descargas a través de internet. Finalmente, un acuerdo in extremis devolvió la normalidad a la industria.

No con este propósito, pero sí con el objetivo de reclamar su papel como figuras clave de la narración televisiva, el sindicato de guionistas españoles ALMA organizó este martes un encuentro con los medios de comunicación para hacer visible su situación actual.

"La propia industria debe asumir la necesidad de que los guionistas reciban la retribución -moral y económica- adecuada a la importancia de la labor que desempeñan. Las condiciones laborales de los equipos de guión en las series están empeorando drásticamente en los últimos tiempos. Se rebajan salarios, se aumentan horarios de trabajo, se adelgazan los equipos, se falsean derechos de autor y créditos…", defiende el sindicato.

En la memoria colectiva está el bochornoso caso de Stamos Okupa2. Entonces, el guionista Toni Beltrán acusó a TVE de plagiar una idea suya. Está calcada la sinopsis de la serie palabra por palabra. Y no hablo de una serie sobre el día a día de un colegio o una serie sobre el mundo de una comisaría y las cosas que les pasan ahí o unos colegas comparten piso y les ocurren cosas divertidas. Hablo de algo muy muy concreto. Y es que está tal cual", escribía.

De hecho, el foro donde se contó este plagio (Bloguionistas) se convirtió durante aquellos días en una recopilación de casos de supuestos plagios. Uno de ellos era el de Javi Jáuregui, quien afirmaba que el departamento de ficción de Telecinco se apropió de una idea suya. "Flipo en colocres porque era una cosa muy concreta, una comedia de ambientación laboral en un sector de trabajo muy detallado", escribía. Y así hasta una decena.