Es noticia
Por qué España nunca ganará Eurovisión
  1. Televisión
TELEVISIÓN

Por qué España nunca ganará Eurovisión

Siempre ocurre lo mismo la mañana siguiente a la celebración de la final del Festival de Eurovisión. Los españoles defraudados por el resultado, criticando a los

Siempre ocurre lo mismo la mañana siguiente a la celebración de la final del Festival de Eurovisión. Los españoles defraudados por el resultado, criticando a los demás países por votarse por afinidades culturales y políticas, y una gran parte de la prensa ensañándose con nuestros representantes con duros titulares. Críticas, en ocasiones, demasiado injustas y que no tienen en cuenta los obstáculos con los que se suelen encontrar nuestros cantantes dentro de la propia TVE y que se olvidan de su jefe de delegación, Federico Llano.

La mayoría de los espectadores ha coincidido en que la actuación que llevó a cabo este sábado El Sueño de Morfeo en la final del certamen tuvo "una puesta en escena discreta con fondos neutros y una iluminación sencilla" que hacía que una canción, ya de por sí simple, destacara poco y llevara a los espectadores europeos a olvidarse de ellos a la hora de votar. Pero, ¿puede culparse de todo al grupo?

Todos los años, la UER pide a los países participantes un dossier con indicaciones de la realización y la iluminación. Así ha ocurrido con países como Noruega o Dinarmarca, que tuvieron la misma puesta en escena que en sus finales nacionales, o con Suecia el año pasado, algo que fue imprescindible para su victoria final.

Sin embargo, en España, los directores de escenografía elegidos siempre se encuentran con el mismo problema: el subdirector de Festivales de TVE, Federico Llano. El jefe de la delegación española siempre pone impedimentos y quiere que toda decisión pase por su dominante mando. Un problema que incluso ha llevado a artistas como Soraya Arnelas o Pastora Soler a amenazar con volverse a España de no aceptarse los cambios que planteaban.

Unas críticas que en el caso de Arnelas tuvieron represalias. Desde entonces, la extremeña está vetada en los programas de TVE. “Me he sentido censurada. En los programas sobre Eurovisión de TVE nunca meten imágenes de mi participación. Es como si mi paso por Eurovisión no hubiera existido”, confesaba hace unas semanas en el programa Perdonda? de Canal Catalá.

"No has venido de vacaciones" 

Tampoco su actitud con la prensa y otras delegaciones es la adecuada en un evento de estas condiciones. Al contrario de lo que ocurre con otros países, en los que sus responsables también actúan como relaciones internacionales, en el caso español, el jefe de la delegación no se moviliza para que nuestro representante se promocione en fiestas de otros países y necesarias para dar a conocer a nuestros artistas entre la prensa extranjera.

Peor es el trato dado a la prensa española a la que en más de una ocasión deja a su suerte. Así sucedió en el evento que preparó la SVT el pasado miércoles en el centro de Malmö para el Big Five, olvidándose por completo de buscar un espacio para que los fotógrafos cubrieran el show y en el que de no ser por la jefa de prensa de TVE, el evento hubiera pasado desapercibido. 

Los eurofans tampoco tienen una buena imagen de él. De hecho son muchos los que le culpan de los malos resultados que obtiene España. "O cambia algo en TVE, o España nunca estará entre las favoritas.  Sólo quedaremos bien el año que verdaderamente TVE quiera ganar y se apueste por ello, desde la elección del cantante, a todo el proceso posterior de promoción, ensayos, creatividad de fondos, iluminación, etc...", comentan de forma anónima. El miedo a perder su acreditación para años venideros les lleva a ello. 

Elegido jefe de la delegación de TVE en 2002, los que alguna vez han tenido trato con él lo tildan como alguien con actitudes bastante déspotas. De hecho, en la memoria colectiva de la prensa española y los eurofans aún resuena la reprimenda que le echó a una de las coristas de Pastora Soler que estaba haciéndose una foto con un fan en Bakú (Azerbaiyán). "No hemos venido de vacaciones", le espetó con mala actitud.

La desértica promoción

Este año, además, tanto Warner como TVE no han promocionado justamente a El Sueño de Morfeo, quienes han realizado contadas entrevistas tanto a medios internacionales como nacionales, y no han tenido tour europeo alguno, al contrario que la mayoría de sus contrincantes.

La banda tampoco ha asistido al Eurovision in concert de Amsterdam, como sí lo hizo Pastora Soler el pasado año, y la tradicional promoción con un fragmento del videoclip en los bloques 'publicitarios' de TVE ha sido prácticamente inexistente.

"También ha influido mucho el trabajo de los eurofans. He visto vídeos de apoyo, cómo han facilitado a otros países traduciendo al inglés la canción. Creo que eso es importante a parte de la promoción de TVE y Warner. Me han sorprendido mucho los eurofans", contestaba con evasivas Raquel del Rosario al ser preguntada por esta cuestión en la rueda de prensa previa a su viaje a Malmö.

Siempre ocurre lo mismo la mañana siguiente a la celebración de la final del Festival de Eurovisión. Los españoles defraudados por el resultado, criticando a los demás países por votarse por afinidades culturales y políticas, y una gran parte de la prensa ensañándose con nuestros representantes con duros titulares. Críticas, en ocasiones, demasiado injustas y que no tienen en cuenta los obstáculos con los que se suelen encontrar nuestros cantantes dentro de la propia TVE y que se olvidan de su jefe de delegación, Federico Llano.

La mayoría de los espectadores ha coincidido en que la actuación que llevó a cabo este sábado El Sueño de Morfeo en la final del certamen tuvo "una puesta en escena discreta con fondos neutros y una iluminación sencilla" que hacía que una canción, ya de por sí simple, destacara poco y llevara a los espectadores europeos a olvidarse de ellos a la hora de votar. Pero, ¿puede culparse de todo al grupo?

Todos los años, la UER pide a los países participantes un dossier con indicaciones de la realización y la iluminación. Así ha ocurrido con países como Noruega o Dinarmarca, que tuvieron la misma puesta en escena que en sus finales nacionales, o con Suecia el año pasado, algo que fue imprescindible para su victoria final.

Sin embargo, en España, los directores de escenografía elegidos siempre se encuentran con el mismo problema: el subdirector de Festivales de TVE, Federico Llano. El jefe de la delegación española siempre pone impedimentos y quiere que toda decisión pase por su dominante mando. Un problema que incluso ha llevado a artistas como Soraya Arnelas o Pastora Soler a amenazar con volverse a España de no aceptarse los cambios que planteaban.

Banco de España