China ha comenzado a construir su superportaaviones nuclear rival de los de EEUU

Nuevas imágenes de satélite muestran el cuarto portaaviones de China por primera vez. A diferencia de los tres primeros portaaviones de Pekín, el Tipo 004 está diseñado para enfrentarse a la clase Gerald Ford de la Marina de los EEUU, con un tamaño parecido y las mismas características técnicas: será nuclear, tendrá catapultas magnéticas como las del Ford y el propio Fujian chino, y podrá llevar las variantes navales de la quinta generación de cazas como el J-35 y también los de sexta generación.

Las imágenes comerciales de satélite publicadas en redes sociales chinas muestran nuevas secciones del casco en el astillero de Dalian, en la provincia de Liaoning, al noroeste de China. Estas secciones son visibles en las imágenes de finales de septiembre pero no aparecían en las de agosto. El Ministerio de Defensa chino no ha confirmado oficialmente la existencia del proyecto. Los observadores militares llevan meses siguiendo de cerca las imágenes satelitales comerciales del astillero en busca de señales de avance.

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Los avances

Las primeras secciones del casco se vieron por primera vez en mayo de 2024, según imágenes compartidas en redes sociales en febrero de este año. Imágenes satelitales del astillero mostraron anteriormente maquetas de la versión naval del J-15 y del helicóptero Z-8 de la armada. La construcción utiliza una técnica modular, la misma que se empleó para el tercer portaaviones chino, el Fujian, que actualmente realiza sus pruebas finales en el Mar de China Meridional.

El Tipo 004 tendrá un desplazamiento a plena carga de 130.000 toneladas, según informes de medios estadounidenses y analistas de defensa, un aumento masivo comparado con las 80.000 toneladas estimadas del Fujian.

Este incremento permitiría transportar más de 50 cazas furtivos J-35 además de aviones de apoyo como los de alerta temprana KJ-600 y helicópteros antisubmarinos. La combinación de fuerzas aéreas ofrecería defensa aérea integral, además de capacidad de ataque y vigilancia a una distancia de combate estimada en 1.500 kilómetros.

Y la propulsión nuclear eliminaría la necesidad de reabastecimiento de combustible, una deficiencia de los portaaviones convencionales, permitiendo operar mucho más lejos de los puertos chinos.

Pistas anteriores

Una fotografía en marzo capturó lo que parece ser un elemento estructural que los expertos creen que podría ser algún fragmento de un sistema de pista de catapulta electromagnética. China ya implementa tecnología de catapulta electromagnética en su portaaviones Fujian que, comparado con los sistemas de rampa de salto del Liaoning y el Shandong, es un cambio radical para las operaciones complejas de un portaaviones moderno.

Lo que hemos visto en Dalian indica que el proyecto Tipo 004 no sólo continuará este proceso de cambio tecnológico, sino que lo acelerará, dicen los expertos. Los sistemas de catapulta electromagnética permiten mayor precisión en los parámetros de lanzamiento de aeronaves, tienen un mantenimiento más sencillo que las de gas y proporcionan frecuencias de lanzamiento necesarias para mantener operaciones de combate prolongadas.

Más atrás, en noviembre de 2024, publicamos informes de que China estaba construyendo un prototipo de reactor nuclear en tierra para un gran buque de superficie. Según Associated Press —que se basaba en un nuevo análisis de imágenes satelitales y documentos gubernamentales chinos— esto era una señal clara de que China estaba comenzando a producir su primer portaaviones de propulsión nuclear. El Instituto Middlebury de Estudios Internacionales en California afirmó en su día que el reactor se estaba desarrollando en un emplazamiento montañoso en las afueras de la ciudad de Leshan, en la provincia suroccidental de Sichuan. En 2017, el gobierno central de China supuestamente estaba listo para gastar 22.000 millones de yuanes (unos 3.060 millones de euros) en el desarrollo de dos reactores prototipo de sal fundida basados en torio para aplicaciones militares.

Problemas con los Ford

El desarrollo del Tipo 004 se produce mientras Estados Unidos todavía tiene dificultades continuas con su proyecto de portaaviones clase Ford. A los retrasos del primer portaaviones de la clase, al USS John F. Kennedy se le han añadido nuevos problemas técnicos con el equipo de detención electromagnética y los elevadores de munición. El calendario peligra mientras los chinos, que están todavía muy por detrás de la US Navy, avanzan aparentemente poco a poco y sin descanso.

La introducción de un superportaaviones Tipo 004 de 130.000 toneladas comenzaría un cambio en el equilibrio del poder marítimo en el Pacífico y posiblemente en el mundo. Con un navío así y otros parecidos —que China ya ha prometido que va a hacer— Pekín tendría la capacidad de proyectar su poder operando a lo largo de las segundas y terceras cadenas de islas sin depender de los impedimentos logísticos a los que están sometidos sus portaaviones convencionales.