El extraño fenómeno artificial que ha aparecido este fin de semana en Alaska

No es difícil imaginar la sorpresa del fotógrafo profesional Todd Salat durante la noche del pasado sábado, cuando una misteriosa espiral azul comenzó a materializarse delante de sus ojos sobre la aurora boreal que dominaba los cielos de Alaska en ese momento. Si yo hubiera visto este portal interdimensional, habría salido corriendo después de tantas películas de invasiones alienígenas y el documental del fenómeno Miyake.

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Salat cuenta que vio una luz muy brillante en el horizonte norte mientras hacia fotos de la aurora. La luz aparentaba estar sobre la ciudad de Delta Junction en Alaska: "Pensé, ¿qué demonios es eso? Empecé a hacer fotos y, a medida que se acercaba, la forma de la espiral se hacía más y más grande". En unos minutos, la espiral se hizo gigantesca, directamente sobre él, mientras no paraba de disparar con su cámara.

Qué era la espiral

Pero el extraño fenómeno visual no era ni aliens ni un portal a otra galaxia, sino una perspectiva increíble generada por parte de un cohete. Unos minutos antes, sin que Salat lo supiera, SpaceX había lanzado un Falcon 9 a casi 5.000 kilómetros de distancia, desde la base aérea espacial de Vandenberg, en California.

El espectacular fenómeno fue también capturado por la cámara de investigación de la Universidad de Alaska en Poker Flat, como se puede ver bajo estas líneas:

Estos fenómenos ocurren cuando la segunda etapa de los cohetes Falcon 9 caen a la Tierra. La primera fase vuelve y aterriza en su base para ser reutilizada, pero la segunda etapa cae desde el espacio, después de dejar su carga útil en órbita (en este caso, 51 pequeños satélites). Al caer, esta etapa expele todo el combustible que le haya sobrado mientras rota lentamente en su caída a la superficie del océano Pacífico. Ese combustible, impulsado por el movimiento, crea ese fantástico espectáculo de luz alienígena.

Investigando después del evento, Salat descubrió que "el vapor de agua congelado de las emisiones de combustible se ilumina de un color blanco azulado por la luz solar a gran altitud". Pero, durante el resto del tiempo, vivió una especie de trance de ciencia ficción, preguntándose que podría estar detrás de este espectáculo.