El nuevo misil para el caza del futuro de los EEUU está basado en una idea de los años 50
El laboratorio de investigación avanzada de la fuerza aérea de los EEUU ha desarrollado un misil capaz de doblar su fuselaje para maniobrar de forma extrema e interceptar misiles hipersónicos
El laboratorio de investigación de la fuerza aérea norteamericana (AFRL) está desarrollando un nuevo tipo de misil para sus caza de combate de próxima generación. El misil está diseñado para interceptar amenazas de gran maniobrabilidad, como los misiles cruceros hipersónicos que China y Rusia están poniendo ya sobre el terreno. Su nombre es ‘mutante’ y es una de las armas más extrañas que hemos visto: su cabeza explosiva se dobla para poder alcanzar al objetivo antes de que éste pueda escapar.
Anunciado por el AFRL en el Air and Space Forces Association's Warfare Symposium celebrado la semana pasada en la ciudad de Aurora, Colorado, el misil MUTANT — siglas de de ‘Missile Utility Transformation via Articulated Nose Technology’ o transformación de utilidad de misiles a través de tecnología de nariz articulada — ha estado en desarrollo durante los últimos seis años.
Cómo funciona
Sin embargo, la idea de los misiles mutantes que pueden cambiar forma para poder interceptar a su objetivo data de investigaciones de los años 50, que buscaban crear un misil de alta maniobrabilidad y gran potencia. Según el AFRL, hay una ecuación básica para los misiles: si quieres misiles de largo alcance, necesitas sistemas de control muy sencillos — sólo las aletas — para que el misil sea ligero. Si quieres uno con alta maniobrabilidad, capaz de girar bruscamente y mantener su integridad, necesitas un sistema de control complejo con motores de empuje vectorial (que puedan girar en relación con el centro del fuselaje), alas móviles, timones frontales móviles e incluso jets laterales. Esto añade demasiado peso al misil y, por tanto, reduce su alcance dramáticamente.
El AFRL pensó que la cabeza articulada podría resolver este problema, corrigiendo el curso sin añadir demasiado peso al misil. Hace 70 años, afirman, no existía la tecnología mecánica y electrónica para conseguir este objetivo. Pero, como apunta The Warzone, el AFRL dice que ahora sí se puede: “históricamente, [el] tamaño, el peso y los [requisitos] de potencia de la tecnología de transformación han sido prohibitivos para obtener un beneficio a nivel de sistema de misiles pero MUTANT está a punto de conseguir inclinar la balanza en este sentido”.
Como muestra el vídeo sobre estas líneas, la tecnología de MUTANT es una versión de los servos que mueve el motor del F-35B de un eje horizontal a un eje totalmente vertical para el despegue y aterrizaje. El AFRL dice que el sistema que controla la orientación de la cabeza del misil en relación al fuselaje está “compuesto por motores electromagnéticos compactos, rodamientos, engranajes y estructuras”. Está diseñado, aseguran, para que los cables que van de la cabeza y los sensores al resto del misil corran sin problemas por el eje central del mecanismo.
Gracias a los nuevos materiales desarrollados por el AFRL, la estructura está diseñada para soportar temperaturas de más de 900 grados centígrados necesarias para soportar la velocidad del misil y las maniobras violentas.
Múltiples usos
Además de poder maniobrar bruscamente para anticiparse al misil enemigo, la cabeza móvil ofrece dos ventajas frente a los misiles tradicionales.
La primera es que, como cuando un piloto mueve la cabeza, los sensores y la computadora del MUTANT puede mantener la vista fija en el objetivo aunque el curso no haya corregido totalmente su curso. La segunda es que puede dirigir la dirección de la metralla de la explosión hacia el objetivo aunque éste maniobre para evitarlo.
Según la AFLR, la tecnología podría aplicarse en varios tipos de misiles. De hecho, el misil que están utilizando para probar los principios del MUTANT es un Hellfire modificado, un arma de ataque aire-tierra. La fuerza aérea norteamericana dice que éste no tiene por qué ser una de las aplicaciones finales del MUTANT pero obviamente podría beneficiar a todo tipo de misiles. El objetivo del laboratorio es finalizar las pruebas en 2024. Después habrá que ver si esto se traduce en un cambio radical en los misiles norteamericanos, sobre todo de cara a sus nuevos aviones de combate NGAD.
El laboratorio de investigación de la fuerza aérea norteamericana (AFRL) está desarrollando un nuevo tipo de misil para sus caza de combate de próxima generación. El misil está diseñado para interceptar amenazas de gran maniobrabilidad, como los misiles cruceros hipersónicos que China y Rusia están poniendo ya sobre el terreno. Su nombre es ‘mutante’ y es una de las armas más extrañas que hemos visto: su cabeza explosiva se dobla para poder alcanzar al objetivo antes de que éste pueda escapar.