Este material de impresión 3D crea objetos indistinguibles de los reales

Si me enseñan una de estas botellas y me preguntan qué es no dudaría: "un tercio de cerveza fría". Tienen el tamaño de una botella de cerveza, el mismo color y está salpicada por unas gotitas de condensación que indican que acaba de salir de la nevera. Me hubiera equivocado. Estas botellas ni están frías ni hay manera de bebérselas. Están hechas con una impresora 3D.

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Omar Kardoudi

De vez en cuando escuchamos noticias sobre esta tecnología, como cuando los dueños de impresoras 3D se organizaron para imprimir materiales con los que ayudar a los sanitarios al principio de la pandemia. Y aunque parece que el interés por estas técnicas entre el público general ha decaído, la industria de la impresión 3D sigue innovando y sorprendiendo.

Un buen ejemplo de ello es este nuevo material, se llama VeroUltra y está pensado para imprimir prototipos en 3D que muestren de la manera más realista posible lo que tienen los diseñadores en la cabeza.

Con él se pueden reproducir materiales como el cristal, una pantalla LED o incluso la textura de la madera con una gran fidelidad. Los colores que utilizan están validados por Pantone, compañía que marca el estándar industrial, así lo que ven los diseñadores en la pantalla es lo mismo que lo que se obtiene en la impresora.

Stratasys, la compañía que fabrica VeroUltra, afirma que su variedad de colores permite simular distintas opacidades. Además los detalles de los productos como etiquetas y botones se reproducen con mucho realismo.

VeroUltra por ahora no está disponible en el mercado pero es un ejemplo de lo mucho que ha avanzado la tecnología de impresión 3D en los últimos años. A pesar de que desde un inicio se pensó que este tipo de impresoras iba a ser tan ubicuo como las de papel, cada vez está más claro que no va a ser así. Los costes y las complicaciones técnicas que hay ahora mismo hacen que no tenga sentido para un mercado doméstico.

En su lugar, tanto compañías pequeñas como grandes, están invirtiendo tiempo y dinero para avanzar en el desarrollo de estas tecnologías. Según algunos análisis, el mercado actual de la impresión 3D supera los 13.000 millones de euros y se espera que este número esté cerca de triplicarse en 2024.

Para Ric Fulop, director general y cofundador de Desktop Metal, el siguiente paso para esta tecnología será la producción en masa. Según Fulop, hemos pasado de un primer momento donde la impresión 3D solo servía fundamentalmente para la fase de validación de prototipos a una nueva fase. "En la próxima década, veremos una curva [con crecimiento] exponencial porque la tecnología es más asequible, hay más usuarios y más oferta de materias primas", argumenta Fulop.

La aplicación del diseño generativo, una herramienta de computación que busca construir objetos con la máxima eficiencia, será clave para el desarrollo de esta tecnología. "Cuando la gente recuerde la cuarta revolución industrial dentro de 50 años, hablará menos del Internet de las cosas y más de cómo hemos eliminado entre el 30 y el 50% del material que teníamos en los automóviles y de cómo todo se ha vuelto más eficiente", explica Fulop.