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Los conejos están destruyendo la agricultura de Madrid: la culpa es de las infraestructuras
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¿QUIÉN ES EL RESPONSABLE?

Los conejos están destruyendo la agricultura de Madrid: la culpa es de las infraestructuras

Las autovías y vías de tren facilitan la construcción de madrigueras a los conejos, que se multiplican en los nudos de comunicaciones y arrasan los cultivos cercanos

Foto: Un conejo común. (EFE/Kai Försterling)
Un conejo común. (EFE/Kai Försterling)

Varias autovías rodean por completo el municipio de Moraleja de Enmedio, en el sur de Madrid. Entre ellas, intentan prosperar los cultivos de cereal, pero no lo tienen fácil. Desde hace tiempo, les ha salido un enemigo inesperado: “Es una barbaridad, el volumen de conejos es tan grande que hay que tomar medidas”, reclama en declaraciones a El Confidencial Enrique Ollero, agricultor de este pueblo, harto de que estos animales arrasen con las cosechas, año tras año, sin que nadie haga nada para evitarlo.

El problema afecta, como mínimo, a todo el sur de la Comunidad y tiene un origen muy curioso: según un reciente informe científico, la abundancia de conejos está directamente relacionada con la presencia de infraestructuras. Las carreteras y las vías de tren han alterado el terreno de tal forma que se dan las condiciones ideales para que esta especie construya madrigueras con facilidad. En ningún sitio hay tanta concentración de kilómetros de AVE y autovías como en Madrid, con casi siete millones de habitantes y su ubicación como núcleo de la red radial de comunicaciones del país.

Foto: Conejo en una viña. (EFE/Abel Alonso)

Los profesionales del campo han visto cómo el problema se ha ido multiplicando en los últimos años a medida que se han construido más vías y carreteras, y ya han constituido una asociación de agricultores damnificados por los daños de los conejos provenientes de las infraestructuras que integra a más de una decena de municipios, incluyendo Fuenlabrada, Casarrubuelos, Griñón o Parla. Ahora, reclaman que las administraciones titulares se hagan cargo de la situación, pero ninguna les está haciendo caso, así que no descartan acudir a los tribunales. “Expropian unas tierras para hacer una infraestructura y le ponen una alambrada, así que nosotros consideramos que es su terreno y sus conejos”, afirma Ollero.

Los datos apuntan a las infraestructuras

Investigaciones anteriores ya han señalado a las infraestructuras como un refugio para los conejos. Ahora, los agricultores afectados cuentan con evidencias científicas de su caso concreto. La empresa Sabiotec, una spin-off de la Universidad de Castilla-La Mancha, ha realizado un estudio exhaustivo sobre la presencia del conejo en la zona y la conclusión es clara. “Existe una relación evidente entre la presencia de infraestructuras humanas (carreteras, autovías y vías de tren) y la densidad de conejo en parcelas agrícolas en sur de la Comunidad de Madrid”, resume el informe final.

placeholder Autovía a las afueras de Madrid. (Europa Press)
Autovía a las afueras de Madrid. (Europa Press)

Los investigadores escogieron varias áreas de muestreo, más y menos cercanas a las vías y carreteras, para comparar diferentes zonas. “Cerca de las infraestructuras hay mucho más conejo”, comenta Christian Gortázar, investigador del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC, centro del CSIC, la Universidad de Castilla-La Mancha y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha), uno de los autores del trabajo. Las razones son múltiples. Una de las más curiosas es que “la construcción de autovías o vías del AVE, relativamente nuevas, conlleva remover mucha tierra, sobre todo para crear pasos elevados o salvar algún desnivel; y el suelo suelto es buenísimo para los conejos, porque pueden hacer madrigueras más profundas”, explica. Esto les deja a salvo de depredadores como los zorros.

En general, cuanto más grande y nueva sea la obra, mejor hábitat crea para los conejos. Además, en las proximidades de las infraestructuras la caza está muy limitada, no se puede utilizar escopeta por razones de seguridad y solo se permite intervenir por medio de hurones y redes. Según los agricultores, esa actividad cinegética restringida le sirve de coartada a los responsables de las infraestructuras para alegar que ya se están tomando medidas, pero en la práctica no sirve para nada: “Cuando hay caza con hurones, acuden unos cuantos jubilados a pasar el rato”, afirma Olleros.

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Conejos. (EFE)

La reclamación de los afectados

Los afectados tienen claro de dónde viene el exceso de animales. “Hasta que no construyeron las infraestructuras, no teníamos este problema, ahora cada año hay más”, comenta Raúl Godino, presidente de la asociación. Cuando los agricultores reclaman ante las administraciones y a empresas como Adif o SEITT (Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre), que gestiona varias autovías, como la R-4 o la R-5, se sienten desamparados. “Nos dicen que los cojamos nosotros, pero eso es absurdo, yo tengo que dedicarme a cultivar mis tierras. Al final, cada vez quedamos menos agricultores”, señala el responsable de la plataforma.

Según el abogado de la asociación, Santiago Ballesteros, tan solo la Dirección General de Agricultura de la Comunidad de Madrid se ha mostrado sensible al problema, “pero la administración va muy lenta”, así que su estrategia pasa ahora por demandar y conseguir alguna sentencia ejemplarizante para que los responsables de las infraestructuras actúen. Con la evidencia científica señalando la causa del problema, creen que estarían obligados a tomar medidas. “Tendrían que intensificar la caza, porque conceden pocos permisos y no son eficaces”, asegura, “y si las medidas ordinarias no son efectivas, habría que adoptar medidas extraordinarias de eliminación y de prevención, con vallados especiales”.

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Campos de cereal. (EFE)

Las recientes lluvias hacen concebir esperanzas de que este año no sea tan malo, pero cuando hay sequía el escenario es desastroso. Fue lo que ocurrió en 2023: la falta de precipitaciones impidió el crecimiento de otro tipo de vegetación y los conejos acabaron con la cosecha de cereales, porque era lo único que podían comer. Los agricultores son conscientes de que los años secos tienden a incrementarse, así que temen que el futuro sea peor. Para colmo, “ya no hace frío en invierno y crían todo el año”, asegura Olleros.

El comportamiento del conejo en España

En realidad, los conejos pueden recorrer grandes distancias, pero “si no hay necesidad, intentan alimentarse lo más cerca posible de la madriguera para evitar el peligro de los depredadores, así que la franja más afectada son los metros más próximos”, señala el investigador del IREC. La despoblación de las zonas rurales ha hecho crecer el matorral y los bosques, pero estas zonas son muy poco adecuadas para las necesidades de esta especie. Su verdadero paraíso son las estepas y, en su defecto, las llanuras agrícolas.

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Conejo. (EFE)

En España hay dos subespecies de conejo. La población de Oryctolagus cuniculus algirus se mantiene estable o incluso con un ligero declive. Por el contrario, Oryctolagus cuniculus cuniculus, que ocupa dos tercios de la península, desde el centro al noreste, presenta “una tendencia al crecimiento poblacional, sobre todo en lugares donde la caza, la depredación y las enfermedades no son suficientes para contrarrestarlo”, comenta el experto. Por eso, está generando problemas en amplias zonas, sobre todo, terrenos agrícolas cerealistas de secano.

“Si a esta situación añadimos una infraestructura que ofrece mejores sitios para criar y reproducirse, miel sobre hojuelas”, añade el científico. Es lo que está sucediendo en Madrid, pero también en otras áreas muy pobladas que concentran vías de comunicación, como el corredor del Ebro, desde La Rioja hasta Lleida. En Castilla y León, también se ven afectados los cultivos próximos a la autovía A-6; y en Castilla-La Mancha, los cercanos a la A-4.

Foto: Varios hombres cazan durante el arranque de la temporada de caza en Galicia, a 15 de octubre de 2023, en Vilalba, Lugo, Galicia. (Europa Press/Carlos Castro))

Soluciones complejas

Encontrar una solución no es fácil. “El conejo no se regula por una sola cosa, el equilibrio pasa por la combinación de varios factores: una actividad cinegética razonable, depredadores como el zorro y las aves rapaces, y enfermedades como la mixomatosis”, señala Gortázar. El problema es que, de todas esas alternativas, "la única herramienta que podemos manejar es la caza, ya que no vamos a jugar con las enfermedades y manipular a los depredadores es muy difícil".

No obstante, también se podrían tomar algunas medidas preventivas, como instalar malla conejera en torno a las plantaciones más sensibles. Otra opción es sembrar “cultivos menos apetecibles para el conejo cerca de las infraestructuras”, según el investigador del IREC. Por ejemplo, el trigo y la cebada le resultan especialmente apetecibles, pero el triticale (un híbrido entre trigo y centeno) no está entre sus alimentos favoritos. Si en la franja más cercana se dedica a este cereal, los daños serán menores, tal y como ya se ha comprobado en algunas zonas.

Varias autovías rodean por completo el municipio de Moraleja de Enmedio, en el sur de Madrid. Entre ellas, intentan prosperar los cultivos de cereal, pero no lo tienen fácil. Desde hace tiempo, les ha salido un enemigo inesperado: “Es una barbaridad, el volumen de conejos es tan grande que hay que tomar medidas”, reclama en declaraciones a El Confidencial Enrique Ollero, agricultor de este pueblo, harto de que estos animales arrasen con las cosechas, año tras año, sin que nadie haga nada para evitarlo.

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