Giro de 180 grados en la IA: así es la tecnología que resuelve 10 años de investigación en tan solo dos días

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Uno de los temas más predominantes de la actualidad es, sin duda, la Inteligencia Artificial. Cada día que pasa, sigue evolucionando a pasos agigantados, mostrando nuevas funciones y siendo aplicada a diversos sectores de la sociedad. En este sentido, uno de los campos que más se está beneficiando de la misma es la ciencia.

Han sido los propios investigadores del Imperial College de Londres, junto a la multinacional Google, los que han llevado a cabo la creación de una nueva herramienta con IA, al que han dado el nombre de ‘co-scientist’. Se trata de un sistema que hace uso del aprendizaje automático con el que ayudar a la comunidad científica a llevar a cabo sus análisis y estudios.

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Dicho método ha sido desarrollado con el propósito de servir de complemento y colaborar con los expertos. Si bien puede facilitar las labores de investigación a los científicos, su propósito no es sustituirlos, sino aligerar y facilitar el trabajo a sus responsables. De esta manera, las labores de búsqueda y síntesis de fuentes de información se abordarán de una forma sencilla, sirviendo de prueba algunos de los experimentos en los que se ha probado.

Herramienta de investigación eficiente

Una de las investigaciones más importantes que se están llevando a cabo en los últimos años se centra en la resistencia de los antibióticos. En este sentido, muchas enfermedades que a día de hoy disponen de un sencillo remedio, pueden recuperar su carácter mortal en el futuro debido a la fortaleza que están desarrollando las bacterias contra estos.

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Los mismos investigadores del Imperial College de Londres han dedicado toda una década al estudio de este problema de salud pública. Se trata de una investigación en la que se han destinado numerosos recursos y fondos para encontrar una solución que se pueda implementar cuanto antes. Por otro lado, se ha sometido a ‘co-scientist’ a la misma situación, ofreciendo unos resultados fascinantes.

Sin tener acceso a los resultados de la investigación humana, la herramienta basada en Inteligencia Artificial consiguió llegar a conclusiones semejantes en tan solo dos días. Estos datos muestran el prometedor valor del que dispone esta tecnología en campos como la ciencia, acelerando los procesos y otorgando información de manera prácticamente inmediata a contratiempos que pueden ser paradigmáticos en la historia de nuestra especie.