Es noticia
El análisis de 200 esqueletos podría resolver uno de los últimos misterios mayas
  1. Tecnología
  2. Ciencia
En Chichén Itzá

El análisis de 200 esqueletos podría resolver uno de los últimos misterios mayas

Los 200 esqueletos fueron encontrados en el Cenote Sagrado de Chichén Itzá. Sin duda, el más popular de todos los que se pueden encontrar en la península de Yucatán

Foto: Una calavera encontrada en el fondo del cenote (EFE)
Una calavera encontrada en el fondo del cenote (EFE)

Las profundidades del Cenote Sagrado de Chichén Itzá, en la península de Yucatán, guardan vestigios de una de las civilizaciones más enigmáticas de la historia. Este sumidero natural, en el cual se han encontrado más de 200 esqueletos y una impresionante colección de objetos rituales, era un misterio para la ciencia y la arqueología. Los mayas arrojaron a su interior miles de objetos elaborados con metales valiosos, jade y cerámica sin que estuviese clara su intención, pero parece que por fin tenemos una respuesta.

La formación de este cenote se debe al colapso de cavernas en la roca caliza, un fenómeno geológico común en la región. Según una investigación realizada por The Met Museum, estos cuerpos de agua tenían un significado sagrado y eran utilizados en ceremonias religiosas. Durante varios siglos, los sacerdotes y fieles arrojaron al agua objetos preciosos junto con restos humanos, convirtiendo este lugar en un punto clave de su cosmovisión.

Esto les ha permitido deducir que el Cenote Sagrado de Chichén Itzá era considerado realmente como una puerta de entrada al inframundo y un lugar en el que interactuar con lo divino. Prueba de su importancia en la cultura de la época es que las excavaciones realizadas sacaron a la luz piezas de oro y cobre, muchas de las cuales procedían de regiones tan lejanas como las actuales Costa Rica y Panamá.

Entre los hallazgos más impresionantes destacan finos discos de oro con escenas mitológicas grabadas y figuras de jade meticulosamente talladas. Unos descubrimientos que indican que el comercio y las influencias culturales de los mayas se extendían mucho más allá de su territorio.

Un depósito de riqueza cultural y ritual

A esto hay que añadir que el análisis de los restos óseos ha revelado que las personas sacrificadas en el cenote procedían de distintas zonas de Mesoamérica. Otros estudios científicos basados en isótopos de estroncio y oxígeno han demostrado que los individuos lanzados al agua no eran exclusivamente de Chichén Itzá, lo que confirma la relevancia del sitio como un centro de peregrinación.

Foto: Así fue el primer modelado 3D del 'Niño de Oro' (Frontiers in Medicine/Sahar N.Saleem et al.)

Una de las revelaciones más impactantes es la gran cantidad de niños encontrados entre los restos. Muchos de ellos presentan deformaciones craneales, una práctica común en la élite maya. Aunque en el pasado se creía que las víctimas eran mayoritariamente mujeres jóvenes, estudios recientes han demostrado que tanto hombres como mujeres fueron sacrificados en el cenote.

Las profundidades del Cenote Sagrado de Chichén Itzá, en la península de Yucatán, guardan vestigios de una de las civilizaciones más enigmáticas de la historia. Este sumidero natural, en el cual se han encontrado más de 200 esqueletos y una impresionante colección de objetos rituales, era un misterio para la ciencia y la arqueología. Los mayas arrojaron a su interior miles de objetos elaborados con metales valiosos, jade y cerámica sin que estuviese clara su intención, pero parece que por fin tenemos una respuesta.

Mayas Arqueología
El redactor recomienda