Ultrasonidos enfocados, una técnica para acabar con el tumor cerebral que más mata
Ha demostrado un potencial sustancial para el tratamiento de tumores cerebrales malignos, cáncer de pulmón, cáncer de mama y melanoma
El uso focalizado de ultrasonidos para combatir el glioblastoma, el tumor cerebral más mortal, está ofreciendo resultados prometedores y abre la puerta a su utilización contra otros tipos de cáncer difíciles de tratar, según pruebas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia, en Estados Unidos.
La técnica es la siguiente: primero se utiliza un fármaco que golpea a las células cancerosas y las sensibiliza ante las ondas sonoras y, posteriormente, a través del uso de ultrasonidos enfocados, se crean pequeñas burbujas dentro de las células cancerosas, causando su muerte. Aunque la investigación está en una fase preliminar, con los investigadores probando la técnica en muestras de células en platos de laboratorio, los resultados sugieren que tiene "un potencial sustancial para el tratamiento de tumores cerebrales malignos y otras indicaciones oncológicas difíciles", como el cáncer de pulmón, el cáncer de mama y el melanoma, según informan los investigadores en un estudio científico publicado en la revista científica 'Journal of Neuro-Oncology'.
Los investigadores sostienen que la técnica será particularmente útil para tratar cánceres en partes sensibles del cuerpo de difícil acceso. "La terapia sonodinámica con ultrasonido focalizado ofrece un nuevo enfoque terapéutico para tratar a los pacientes con tumores cerebrales malignos", explica el neurocirujano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia Jason Sheehan, en declaraciones recogidas por Neuroscience News. "Este enfoque combina dos opciones aprobadas, el fármaco 5-ALA y el ultrasonido enfocado, para producir un poderoso efecto tumoricida en varios tipos diferentes de glioblastomas".
Un fármaco lo prepara, el ultrasonido lo mata
Para evaluar el potencial de su nueva técnica de ultrasonido enfocado, los científicos observaron sus efectos en muestras de célulashumanas y de ratas. Examinaron los beneficios del medicamento "sonosensibilizante", 5-ALA, y el ultrasonido enfocado individualmente y en combinación, y encontraron que el emparejamiento era mucho más efectivo que cualquiera de los dos por separado. El fármaco redujo el número de células cancerosas viables en un 5%, mientras que el ultrasonido enfocado lo redujo en un 16%: juntos, la reducción alcanzó el 47%. "El ultrasonido focalizado tiene el potencial de mejorar los resultados de los pacientes con tumores cerebrales complejos y otras patologías neuroquirúrgicas", añade Sheehan. "Podemos estar en la punta del iceberg en términos de indicaciones intracraneales para el ultrasonido enfocado".
"La terapia sonodinámica con ultrasonido focalizado ofrece un nuevo enfoque terapéutico para tratar a los pacientes con tumores cerebrales malignos"
Muchas aplicaciones del ultrasonido enfocado dependen de la capacidad de la tecnología para crear diminutos puntos de calor dentro del cuerpo para quemar las células dañinas, o para dañar las células lo suficiente como para provocar una respuesta inmunológica. Este enfoque toma otro camino, ya que destruye las células cancerosas sin generar calor. Mientras que la investigación de sonosensibilización se encuentra en sus primeras fases, Sheehan está lanzando un ensayo clínico separado sobre el glioblastoma en personas que utilizan un enfoque de ultrasonido enfocado diferente. Ese estudio evaluará el potencial de la tecnología para abrir brevemente la barrera protectora del cerebro para que los médicos puedan administrar tratamientos al tumor que normalmente no pueden.
Los glioblastomas son los tumores cerebrales malignos más comunes en los adultos. Son inevitablemente fatales en los primeros 12 a 18 meses del diagnóstico. La escasez de tratamientos efectivos para este agresivo cáncer implica que se necesitan desesperadamente nuevos enfoques.
El uso focalizado de ultrasonidos para combatir el glioblastoma, el tumor cerebral más mortal, está ofreciendo resultados prometedores y abre la puerta a su utilización contra otros tipos de cáncer difíciles de tratar, según pruebas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia, en Estados Unidos.