Tras millones en guantes, mascarillas y EPI, el contagio entre sanitarios sigue creciendo

El primer dato salió el 21 de marzo, sábado, hace justo un mes. "España es el país que peor protege a sus sanitarios: ya son el 12% de los contagios", tituló este periódico.

El 23 de marzo, el Gobierno realizó a la OTAN un pedido urgente de batas, mascarillas, guantes y gafas. Fernando Simón admite que tras el alto número de contagios, está la falta de material. En los siguientes días, hubo declaraciones entrecruzadas entre Sanidad, las comunidades autónomas y varios empresarios de la distribución —algunos con credenciales sospechosas— con el tema de fondo de los materiales requeridos para proteger al personal sanitario. Madrid, Cataluña o Andalucía acusaron al Gobierno de impedirles adquirir protección para sus sanitarios. El sindicato de enfermería Satse gritó que la falta de recursos era "sistemática".

El 25 de marzo, Salvador Illa anunció que el Gobierno había cerrado con China una compra de mascarillas, respiradores, guantes y test rápidos de covid-19 por valor de 432 millones de euros. El sábado 28 de marzo, una semana más tarde del primer dato, el Ejército del Aire enviaba a Shanghái su avión A400M para traer de urgencia parte de la mercancía adquirida al país asiático. El domingo 29 de marzo, llegó un avión militar procedente de la República Checa con los 10.000 equipos de protección individual aportados por la OTAN. El lunes 30, aterrizó en Torrejón de Ardoz el A400M con 14 toneladas de EPI.

Ese día, el número de sanitarios infectados era de 12.298. Esos días, España estaba confirmando más de 8.000 nuevos casos diarios de covid-19. En total, el 30 de marzo, fueron 85.195 personas de las que 12.298 (un 14,4%) era personal sanitario.

Comienzan a aterrizar más aviones. Esa semana, llegan a Mallorca 17 toneladas de material sanitario procedentes de China: 10.000 test para coronavirus, medio millón de máscaras quirúrgicas, 100.000 mascarillas de protección y millones de guantes. Llegan a Barcelona 2,3 millones de mascarillas quirúrgicas, 110.000 trajes de protección para sanitarios, 200.000 guantes y 500 test rápidos para ser entregados a la Generalitat. Llegan a Navarra 51.000 unidades de protección sanitaria individual —mascarillas médicas, quirúrgicas y ropa de protección— donadas por la región china de Gansú. Llegan a Cantabria 100.000 mascarillas. Llegan a Madrid un millón de mascarillas, 20.000 gafas de protección integral, 20.000 trajes de protección individual y 100.000 pares de guantes donados por el fundador de Huawei. El 2 de abril, también llega el anhelado avión con las 58 toneladas de material comprado por la Comunidad de Madrid para sus centros, mientras a 250 kilómetros de allí los trabajadores del Hospital General Universitario de Albacete presentaban una denuncia en Inspección de Trabajo por falta de EPI.

El 3 de abril, el sindicato CSIF denuncia que el personal sanitario "sigue sin test ni equipos de protección suficientes" después de 20 días de estado de alarma. El 4 de abril, el Hospital Sant Pau de Barcelona recibe las primeras máscaras de buceo adaptadas a las necesidades de los profesionales sanitarios expuestos al virus. En el País Vasco, muere una segunda enfermera con covid-19 tras Encarni, la mujer de 52 años que fue la primera sanitaria en fallecer en España, el 20 de marzo en Galdakao, Vizcaya. Dos días más tarde, nuevo reporte de casos: 19.400 sanitarios infectados, de nuevo un 14,4% del total. El 8 de abril, llega a España un avión con 150 respiradores que habían sido retenidos por Turquía.

El presidente del Gobierno apareció el sábado 11 en rueda de prensa y dijo que la provisión de materiales al personal sanitario en primera línea de combate contra la enfermedad "siempre es el primer punto del orden del día". Ese mismo día, la Organización Mundial de la Salud cifraba en 22.073 el número de sanitarios infectados por covid-19 en todo el mundo. Un día antes, el 10 de abril, el número de sanitarios que habían dado positivo por covid-19 era de 24.101, un 15,3% de las 157.022 personas contagiadas en toda España. La OMS asumía que sus cifras podían infrarrepresentar el número real de médicos, enfermeras, asistentes o técnicos infectados.

El 14 de abril, los almacenes de algunos hospitales dejan de servir unas mascarillas N95 de la marca Garry Galaxy al conocer que Sanidad estaba investigando su carácter defectuoso. El 16 de abril, el ministerio ordena la retirada de un lote de 900.000 unidades, aunque añadió que no todas se llegaron a repartir. El 18 de abril, sábado, fallece a los 64 años por covid-19 Joaquín Díaz, jefe de servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Universitario La Paz. Contrajo la enfermedad en el ejercicio de sus funciones.

El 20 de abril, llega a Valencia el decimocuarto avión con material: 50,8 toneladas. Sin embargo, tras la importación de millones de guantes, mascarillas y EPI, el 21 de abril el porcentaje de sanitarios contagiados ha tocado de nuevo techo. Un 15,6% de todas las personas infectadas por el coronavirus en España son sanitarios. Ningún otro país del mundo nos alcanza en la desprotección de los trabajadores de la sanidad. Italia nos vigila desde un 9,9% de sanitarios infectados, Francia tiene un 6,6% y Estados Unidos, el primer país del mundo en casos, registra un 1,9% de contagiados en este sector, si bien las autoridades estadounidenses admitieron que esta cifra está infrarrepresentada.

En un mes, el número de personas contagiadas en nuestro país por el coronavirus se ha multiplicado por siete, pero, entre los sanitarios, los contagios se han multiplicado por nueve. Más de 30 han fallecido hasta el momento en el ejercicio de sus funciones.