¿Afecta la contaminación a nuestra habilidad cognitiva?

Las personas que viven en zonas urbanas con mayores niveles de contaminación pueden puntuar más bajo en pruebas de pensamiento y memoria y también pueden perder habilidades cognitivas más rápido con el tiempo, según un reciente estudio de la Academia Americana de Neurología.

A través de dos grandes estudios epidemiológicos, los investigadores examinaron la asociación de los niveles de contaminación atmosférica y el deterioro cognitivo. En uno de ellos, encontraron una asociación entre ambos, aunque en el otro, no. "La contaminación del aire puede afectar a grandes poblaciones de personas porque tienen riesgos cardiovasculares conocidos. Investigaciones previas han encontrado que también puede contribuir al deterioro cognitivo. Sin embargo, los resultados de nuestra investigación fueron mixtos", señala Erin R Kulick, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Brown (Estados Unidos), y autor principal de los estudios.

En los dos estudios, uno realizado a habitantes del área del norte de Manhattan y otro que tomó datos de vecinos de un barrio de Washington, se analizó las exposiciones a tres contaminantes atmosféricos: dióxido de nitrógeno y dos grupos de partículas, partículas de líquidos o sólidos en suspensión en el aire de menos de 2,5 micras de diámetro, llamadas partículas finas, y partículas de menos de 10 micras de diámetro, denominadas partículas respirables. Los niveles medios de contaminantes atmosféricos fueron similares para ambos grupos de participantes. En cada grupo, los participantes se dividieron en cuatro grupos en función de su exposición a la contaminación atmosférica.

Mayores tasas de declive

Los investigadores encontraron que en el grupo de Washington, con una edad media de 70 años, las personas con exposición a niveles más altos de contaminación del aire tenían puntuaciones más bajas en las pruebas al comienzo del estudio y tasas más rápidas de declive. La exposición al dióxido de nitrógeno se vinculó a una tasa acelerada de deterioro cognitivo comparable a un año de envejecimiento. Los resultados fueron similares para las partículas finas y respirables.

"Se necesita más investigación para comprender mejor los resultados mixtos de nuestro estudio"

En el grupo del norte de Manhattan, con una edad media de 75 años, los investigadores no encontraron una asociación entre la función cognitiva y la contaminación del aire. Kulick sostiene que la diferencia en los resultados puede ser porque el segundo grupo era mucho más pequeño (más de 5.000 personas frente a algo más de 1.000) y sólo se les hizo una ronda de seguimiento frente a las seis rondas que se realizaron para el grupo de Washington.

"Una fortaleza de nuestro estudio fue que pudimos analizar las tasas de deterioro cognitivo a lo largo del tiempo, por lo que añade hallazgos importantes al creciente cuerpo de evidencia científica sobre la contaminación del aire y sus efectos en la salud cerebral de los adultos mayores", afirma Kulick en declaraciones recogidas por Neuroscience News. Se necesita más investigación para comprender mejor los resultados mixtos de nuestro estudio. La buena noticia para la salud pública es que la contaminación del aire puede reducirse, aunque todavía hay millones de personas que necesitan mejoras importantes en la calidad del aire".