¿Te asusta la alerta de la OMS por el coronavirus de China? No es para tanto...

La alerta sanitaria decretada por la OMS ante el avance del coronavirus tiene más de cortafuegos que de motivos para la intranquilidad. La Organización Mundial de la Salud lanzó el aviso internacional este jueves después de que el 2019-nCoV atravesara la frontera china y se detectaran contagios entre humanos fuera del país donde se originó.

[Última hora del coronavirus de China]

"Hacerlo antes no hubiera tenido sentido", expone Ignacio López Goñi, catedrático de Microbiología de la Universidad de Navarra. "Hasta entonces no se conocían casos de propagación de la enfermedad entre humanos más allá de China" ¿Y qué supone esta declaración? "Se toma por precaución", explica María Isabel Sola Gurpegui, co-directora del laboratorio de Coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología, quien también matiza que los efectos del aviso de la OMS serán distintos en función de las condiciones de cada país.

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"Todos no cuentan con los mismos métodos de prevención y de detección epidemiológica, por lo que su propagación no sería igual en las naciones europeas que en aquellas que tienen servicios sanitarios precarios", añade. Estos peligros, además, dependen de los datos de población de dichos países. En zonas más pobladas, como La India, que comparte frontera con el 'gigante asiático', las posibles consecuencias serían más acusadas que, por ejemplo, en Alemania.

E impedir que el virus alcance las zonas más deprimidas es uno de los objetivos del protocolo activado por la Organización Mundial de la Salud. "Todo aquello que funciona rutinariamente en territorios desarrollados no siempre está disponible en las naciones en desarrollo", matiza la experta en Biología Celular.

"Sin vigilancia el coronavirus se extendería", añade. Y su expansión precisaría de más recursos y de un intervención aún más radical que hasta ahora. Y, claro está, se traduciría en un riesgo mayor. "Por eso, lo que supone esta alerta es reforzar la cooperación entre Estados, apoyar económicamente a aquellos que lo requieran y continuar con la investigación". Por el momento, más allá de las fronteras chinas no ha habido muertes por culpa de la infección. Y todos los casos sospechosos en España han sido descartados.

Además, no es la primera vez en esta década que la OMS lanza este aviso. Lo hizo en 2009, a nivel global, por la gripe A. Tras la extensión del ébola, en 2014, se decretó en África Occidental. En 2016, en América por culpa del 'zika' y el pasado julio en la República Democrática del Congo, debido de nuevo al ébola.

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"Por supuesto, no podemos ignorar que el virus existe", añade. Pero la bióloga coincide con su colega en que es preciso contextualizar este caso: "El 98% de los casos de infección se han dado en China y en zonas muy localizadas; principalmente en la provincia de Hubei, donde se ubica la zona cero", expone el experto. "Y sí, se trata de una neumonía de una alta tasa de transmisión, pero conviene recordar dos cosas: que su mortalidad —más de 200 fallecimientos— es baja en comparación con otras epidemias y que en la temporada 2018-2019, en España, murieron más de 6.000 personas por la gripe y por complicaciones derivadas de esta última".

Fuera de China, los riesgos disminuyen. Por ello, ambos científicos llaman a la calma. "No tiene sentido que la gente vaya a las farmacias y compre mascarillas hasta agotar las existencias", indica López.