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¿Qué son los extraños hoyos que han aparecido en las Caimán tras un terremoto?
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UN FENÓMENO LLAMADO LICUEFACCIÓN

¿Qué son los extraños hoyos que han aparecido en las Caimán tras un terremoto?

Después de que se produjera un seísmo en el Mar del Caribe, han aparecido una serie de extraños agujeros en las islas Caimán, como consecuencia de un extraño fenómeno físico

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Un terremoto de magnitud 7,7 en el Mar del Caribe, entre Jamaica y Cuba, ha provocado importantes daños en las Islas Caimán. En primer lugar, el seísmo se produjo a una profundidad de 110 kilómetros para, solo unas horas más tarde, tener una réplica de magnitud 6,1 a 53 kilómetros de este archipiélago. Pero los daños estructurales no se han producido solo por el temblor de tierra, sino que unos extraños agujeros han surgido en varias partes de las islas.

Evidentemente, cuando se produce un terremoto, el temblor de la tierra puede producir importantes destrozos en la zona. Y es que estos movimientos del suelo pueden generar que los edificios se vengan abajo y se produzcan situaciones catastróficas. En el caso del terremoto del Caribe, por fortuna los daños son mínimos y no hay que temer ninguna víctima humana, aunque un nuevo fenómeno tiene aterrorizada a la población: la licuefacción.

Y es que el movimiento telúrico, producido a varios centenares de metros de las costas, han deparado más de una decena de increíbles agujeros en mitad de la isla, verdaderas oquedades de gran tamaño y profundidad que pronto se han hecho virales en las redes sociales. Pero, ¿por qué se han creado numerosos hoyos inconexos entre sí a lo largo y ancho de las Caimán? Un extraño fenómeno físico es el que tiene la explicación definitiva.

Se trata de la licuefacción, que consiste en que el suelo deja de comportarse como un material sólido para actuar como si se encontrara en estado líquido o, en el mejor de los casos, como un líquido pesado. O, dicho de otro modo, después de que una fuerza exterior actúe contra el suelo, las arenas sueltas tienden a disminuir su volumen, aumentando la presión de agua en sus poros, disminuyendo la resistencia al corte de la arena y provocando un hundimiento de las zonas más débiles.

Por norma general, lo que suele ocurrir es que aumenta la presión del agua subterránea de la zona, lo que genera que se licúen los depósitos de arena y los sedimentos de la superficie. Con ello, lo que se provoca es que el suelo pierda la resistencia y arrastre hacia el interior zonas más duras, provocando que la superficie se incline o incluso termine por hundirse. Y no solo ocurre en lugares construidos, sino que en superficies naturales también se produce el mismo fenómeno.

Por fortuna, a pesar de los increíbles agujeros que se han producido, no hay que lamentar daños personales. Los expertos aseguran que la licuefacción suele producirse en suelos formados por depósitos jóvenes, especialmente en suelos granulados, saturados o moderadamente saturados con un drenaje pobre. Pero ahora, la preocupación está en otro lado: los científicos alertan del riesgo de tsunami, por lo que recomiendan buscar sitios elevados para evitar un desastre mayor.

Un terremoto de magnitud 7,7 en el Mar del Caribe, entre Jamaica y Cuba, ha provocado importantes daños en las Islas Caimán. En primer lugar, el seísmo se produjo a una profundidad de 110 kilómetros para, solo unas horas más tarde, tener una réplica de magnitud 6,1 a 53 kilómetros de este archipiélago. Pero los daños estructurales no se han producido solo por el temblor de tierra, sino que unos extraños agujeros han surgido en varias partes de las islas.

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