Científicos descubren cómo las células pueden detener la propagación del cáncer
Se trata de formar una barrera infranqueable con un receptor y una proteína que deben trabajar conjuntamente
Poder detener la metástasis es uno de los grandes sueños de los científicos de todo el mundo y llevan años intentando conseguirlo. Ahora, un grupo de investigadores suizos podría haber dado un paso definitivo: han encontrado la forma de detener la propagación del cáncer en ratones creando una barrera que está formada por una proteína llamada Activina B y un receptor, el ALK7.
La investigación, publicada en la revista médica Cell, ha mostrado que la Activina B y la ALK7 crean un proceso de apoptosis celular, es decir, provocan que las células cancerosas se destruyan a sí mismas, evitando tanto que formen nuevos tumores como la propagación de los ya existentes. Las pruebas se han llevado a cabo en ratones con muy buenos resultados y los científicos creen que pueden trasladarse a los humanos por las similitudes biológicas y químicas que compartimos.
Douglas Hanahan, investigador del EPFL de Lausana, explica a Science Alert que "este estudio refuerza la idea de que la apoptosis es una barrera importante de la tumorigénesis y que su evasión por parte de las células cancerosas es una característica clave de las células cancerosas durante la malignidad y la metástasis". Estamos hablando de que esta nueva barrera podría ser el objetivo en el futuro de los medicamentos que combaten el cáncer.
Objetivo parar la metástasis
Los investigadores descubrieron que las células cancerígenas pueden eliminar tanto el receptor ALK7 como la proteína Activina B para sobrevivir, por lo que ambos elementos deben trabajar conjuntamente para formar una barrera infranqueable.
Durante el estudio, los científicos se centraron tanto en tumores neuroendocrinos pancreáticos como en el cáncer de mama. Hicieron una comparativa en pacientes humanos que tenían varios tipos de cáncer y encontraron una respuesta sorprendente: había una asociación entre la presencia del receptor ALK7 y una menor probabilidad de recaída.
No sólo eso: la metástasis también parecía menos agresiva ante niveles más altos de ALK7, sobre todo en casos de cáncer de mama. Eso llevó a los científicos a la conclusión de que el receptor ALK7 y la proteína Activina B podrían ser útiles para prevenir la metástasis. Sin embargo, aún queda un largo proceso de investigación por delante antes de tener un tratamiento.
El receptor ALK7 provoca que la metástasis sea menos agresiva y que haya menor probabilidad de recaídas
Para Iacovos Michael, investigador del EPFL, "aclarar cómo las células cancerosas logran superar los diversos ‘puntos de seguridad’ de la naturaleza para prevenir la malignidad es un paso importante hacia la comprensión de la biología del tumor y la patogénesis de la enfermedad".
Poder detener la metástasis es uno de los grandes sueños de los científicos de todo el mundo y llevan años intentando conseguirlo. Ahora, un grupo de investigadores suizos podría haber dado un paso definitivo: han encontrado la forma de detener la propagación del cáncer en ratones creando una barrera que está formada por una proteína llamada Activina B y un receptor, el ALK7.