El Gobierno cambia Castor por cetáceos y protege todo el mar entre Alicante y Girona

Un área marina de más de 45.000 kilómetros cuadrados y que hasta ahora era la más prometedora para hallar yacimientos de hidrocarburos ha quedado declarada como Área Marina Protegida hoy en el Consejo de Ministros, según adelantan fuentes del Ministerio de Transición Ecológica. El área será propuesta también para su inclusión en la lista de Zonas Especialmente Protegidas de Importancia para el Mediterráneo.

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Antonio Villarreal

Este Corredor de Migración de Cetáceos del Mediterráneo, aprobado por Real Decreto, trascurre por un pasillo de 85 kilómetros de ancho, paralelo a la costa española y donde en el pasado se han autorizado diversos proyectos de búsqueda y explotación de hidrocarburos. El proyecto Castor, interrumpido en 2013 por las decenas de temblores sísmicos que se registraron, es el más conocido pero empresas como Repsol llevan años extrayendo petróleo desde la plataforma Casablanca, cuyo permiso aún sigue vigente.

Otras empresas como Cepsa, CNWL Oil, Capricorn Spain Limited o POG han solicitado permisos para exploración frente a Castellón y Tarragona. La escocesa Cairn Energy hizo lo propio más al norte, frente a las costas de Girona.

"Con esta declaración se pone fin a nuevas prospecciones y a cualquier tipo de actividad extractiva de hidrocarburos", ha declarado la ministra Teresa Ribera, "este ministerio revisará a partir de ahora las que ya están en vigor".

El objetivo de fondo es también cumplir con el Convenio sobre Diversidad Biológica de Naciones Unidas, rafiticado por España en 1992 y que establece que para 2020 un 10% de las zonas marinas y costeras deben estar protegidas. Hasta ahora España había procurado algún grado de protección ambiental al 8% de su superficie marina. La declaración de este nuevo pasillo acerca al 13% a nuestro país.

El nuevo espacio protegido comenzará al sur a la altura del alicantino Cabo de la Nao y se extenderá hasta el Cabo de Creus, en Girona. El corredor es, además de una zona de paso migratorio para el rorcual común, hábitat para un gran número de especies de delfines, calderones o cachalotes, todas ellas catalogadas como vulnerables en el Catálogo Español de Especies Amenazadas.