Por qué hay gente dando clases de matemáticas en páginas porno (y gana miles de euros)

Una joven escribe en la pizarra las derivadas de varias de funciones matemáticas. “Con las integrales podemos calcular la longitud de arco de una curva, el volumen de sólidos tridimensionales o el trabajo realizado por una fuerza para mover un objeto”, explica. El vídeo de Zara Dar “Qué son las integrales” acumula 500.000 reproducciones y cientos de ‘Me gusta’. En su canal, tiene un gran repertorio de clases online similares como “¿Qué es una red neuronal?” o “Enfoque intuitivo para comprender la probabilidad”. Sin embargo, hay algo llamativo en su canal. Su contenido choca de lleno con el resto de contenido presente en la plataforma que lo aloja. En realidad, el vídeo está subido en PornHub, una de las páginas de pornografía más famosas del mundo.

"Muy educativo"; "Increíble, he seguido la clase de principio a fin"; "No lo habría explicado mejor"; "Tengo que decir que, como estudiante de ingeniería aeroespacial, enseñas la utilidad de las integrales mejor que mi profe de la universidad"... Todos sus vídeos reciben cientos de comentarios positivos cada día, mientras que un pequeño puñado de usuarios le espetan improperios como "quítate la ropa" o "cuándo empieza el gangbang".

Dar, que estudió ingeniería aeronáutica y ha comenzado un doctorado, decidió recientemente convertirse en creadora de contenido. En un vídeo, explica parte de su motivación para dar ese paso: “Las mismas personas cuyo estilo de vida yo creía envidiar están atadas a otra visión y a otro ritmo. Se pasan la vida trabajando para una empresa y haciendo cosas que no necesariamente disfrutan. Hacen rico a alguien mientras ellas se comen las sobras. Están constantemente preocupadas de ser despedidas o por organizar su vida con salarios bajos mientras pagan facturas exorbitantes. Mi camino es libre y no está atado a las expectativas de las instituciones académicas o a las restricciones de la oficina corporativa”.

Preguntada por qué cree que sus vídeos están triunfando en una web para adultos, señala: “No estoy segura del todo, pero supongo que tendrá que ver con que mis vídeos se destacan del resto del contenido porque no son sexuales. Eso los hace más intrigantes para los espectadores, pero es solo una especulación”.

En la misma línea se posiciona Alberto Álamo, psicólogo y sexólogo, que explica a El Confidencial que hay un factor psicológico en todo esto. “En un ambiente con contenido tan homogéneo, algo que se sale de la línea o cualquier cosa que nos descuadra, despierta en nosotros cierta curiosidad, incluso morbo. En este caso, Pornhub es como una piscina llena de contenido erótico, por lo tanto, algo que no sea sexual va a llamar más la atención, nos desvía del foco”. El experto señala que “tendemos a clasificarlo y a simplificarlo todo” y recuerda el caso de la actriz Sofía Nieto, que hacía el papel de Natalia, la hija de Juan Cuesta en Aquí no hay quien viva. “En la serie hacía de joven cautivadora, pero en la vida real era docente universitaria de matemáticas. En los 90 despertó la curiosidad de muchos hombres que no se esperaban ese contraste”.

Esta ingeniera publica los mismos vídeos educativos que sube a YouTube enseñando raíces cuadradas a webs porno. Y también tiene OnlyFans, donde ahí sí publica contenido con cierto carácter erótico y donde dice haber ganado más de un millón de dólares. En una publicación de LinkedIn, señala que los mismos videos generan tres veces más dinero por millón de visitas en Pornhub (1.000 dólares) que en YouTube (340 dólares). “La oferta de vídeos de temática educativa en YouTube es inmensa, mientras que la oferta en sitios para adultos es mínima, por no decir nula. Su contenido cotiza mucho mejor en un sitio que en otro, tanto en visibilidad como en monetización”, añade Álamo.

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La nueva faceta profesional de Dar se produce en medio de una tormenta judicial en EEUU sobre si las plataformas de vídeos pornográficos son o no perjudiciales para los menores. Hace unos días, el Tribunal Supremo escuchó los argumentos sobre una ley de Texas que exige que estos sitios web verifiquen las edades de los usuarios. En la vista oral, la pregunta de un juez pasará a la historia como uno de los momentos más cómicos que se ha vivido en la Corte: “Una de las partes aquí es el propietario de Pornhub, ¿verdad? ¿Es como la vieja revista Playboy? ¿Tienen allí ensayos del equivalente moderno de Gore Vidal y William F. Buckley, Jr.?”, preguntó Samuel Alito.

El magistrado en realidad se estaba preguntando si el sitio solo ofrece pornografía o también contenido que no tiene carácter sexual. Y no, Pornhub no publica ensayos de intelectuales distinguidos, aunque sí aloje clases de álgebra. "¡No puedo creer que quieran prohibir esta web en Texas! Están tratando de obstaculizar nuestra educación", publicaba un usuario en referencia a los vídeos de Dar.

Esta ingeniera aeroespacial no está sola. Un hombre con gafas y una sudadera gris fue hace unos años otro de los raros éxitos en Pornhub. Garabateando ecuaciones en una pizarra y explicándolas con una seriedad inaudita, un hombre taiwanés de 34 años, Shun-Wei Chang, se ganaba la vida siendo la antítesis del erotismo. Y no, tampoco se trataba del típico roleplay de profesor con el que algunas personas fantasean, sino que su canal cuenta con cientos de publicaciones explicando cálculo, con millones de reproducciones. En los títulos incluía palabras relacionadas con el porno como “trío” o “sexo oral”, aunque no era otra cosa que una trampa para engañar al algoritmo y asegurarse de aparecer en tantas búsquedas como fuera posible.

“Mucha gente ve mi estrategia de marketing y piensa que es ridícula, pero resulta que lo que la gente cree que son payasadas absurdas es pura desesperación”, decía en una entrevista. Chang estuvo luchando con una crisis personal y financiera cuando el centro de tutorías que dirigía en Hsinchu, una ciudad en el norte de Taiwán, se fue a la bancarrota. "En ese momento contemplé el suicidio", dijo Chang. Meses después decidió pasarse a la enseñanza online y, en el intento de llegar a estudiantes jóvenes, se le ocurrió que el lugar perfecto sería una web porno. No solo logró pagar sus deudas, sino que empezó a ganar mucho dinero. “Nada como una buena prueba de Delta-Epsilon para mi claridad post-orgasmo”, comentaba un usuario en una de sus publicaciones.

Álamo hace hincapié en que el tema de la apariencia es importante en estos casos: “Ambos perfiles son muy distintos y se puede apreciar dos maneras muy diferentes de introducirse en este mundo. La primera, en mi opinión, ha hecho un poco por adaptarse al formato (por el escote y el outfit). Es una forma de extrapolar y de pasarse a este ámbito de manera inteligente que se ve en la propia miniatura del vídeo, y eso confunde al usuario. Le funciona”. El experto explica que el caso de Chang es totalmente el opuesto: “Lo voy a llamar la opción meme. La gente que entra es más por lo humorístico que por lo erótico. De hecho, he visto que en foros se bromea con el tema. Se pasa un enlace diciendo ‘mira qué vídeo tan hot’ y luego lo abres y te encuentras al profesor escribiendo ecuaciones. Se ha hecho viral por el contraste tan absoluto”.

La enseñanza no es la única temática que desentona en estas plataformas. En diferentes webs para adultos se pueden encontrar clases de cocina, directos de gente jugando al videojuego Call of Duty o Zelda e incluso películas y series pirata que han sido vetadas en otras plataformas, pero que sorprendentemente perviven en estos lares. Un caso sonado fue el del vídeo del crítico gastronómico Ken Domik comiéndose una hamburguesa del McDonald’s. El video original también estaba en su canal de YouTube, pero en Pornhub se titula "SUPER HOT DILF REVIEWS JUICY MCDONALDS BURGER".

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Los casos de profesores pasándose a la industria erótica digital no son nuevos. En 2020, durante la pandemia, Associated Press publicó un reportaje sobre cómo cada vez más profesores, en medio de una crisis en el sector durante la pandemia y dificultades económicas, recurrieron a OnlyFans. Esta plataforma permite a los creadores y creadoras de contenido interactuar con millones de fans mientras monetizan sus publicaciones. Y hablaba también de cómo muchos de estos docentes perdieron sus trabajos cuando las escuelas descubrieron estos segundos empleos.

En OnlyFans se vive otro fenómeno cada vez más extendido. La plataforma, que es sinónimo de pornografía y que nació para alojar contenido puramente sexual, se ha convertido en un rincón cada vez menos erótico. Cada vez más celebridades (cantantes, actrices o modelos) se abren cuentas en la red social para captar más atención de la que consiguen en Instagram o TikTok. "No, no voy a enseñar mis tetas", decía Cardi B, cuando se unió hace unos años y fue noticia en decenas de medios.

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Las celebridades usan el sitio porque saben que, independientemente de su carrera, el atractivo de OnlyFans es la promesa de ver lo que normalmente no se ve. De hecho, en muchas de sus biografías, advierten a los suscriptores de que la cuenta adjunta no es explícita, pero salpican pistas provocativas que indican lo contrario. "Esto es lo que no te mostramos", decía una publicación de Rebecca Minkoff, una diseñadora de moda conocida por sus bolsos. El pie de foto va acompañado del emoji de ojos abiertos y mejillas rojas. Cada afirmación de que el canal no va de porno va acompañado de una avalancha de guiños que indican lo contrario, como el emoji de un diablillo o un melocotón.

“Los tiempos han cambiado. Ahora, un ciudadano de a pie puede llegar a sentirse muy cercano a una persona famosa. O, al menos, a tener la creencia y sensación subjetiva de estar conectado a esa persona, incluso de que mantiene cierta intimidad con ella", explica Álamo. Y añade: "OnlyFans ha acentuado todo eso, al ser todo mucho más personalizado: un sorteo, un directo, preguntas a los suscriptores. Hay mucho movimiento que al final a la persona que está pagando un dinero al mes le hace sentir que realmente está unida a la creadora. Un mensaje de “¿qué bikini me pongo?” y una foto de la ropa tirada en el sofá es suficiente para hacerte partícipe, despertarte y engancharte. La gente se está enterando ahora de que no hace falta enseñar nada para ganar dinero en internet”.