"La masacre de San Valentín": Microsoft casi pierde 15.000 millones por culpa de Bill Gates
Según quienes vivieron la reunión, la tozudez del fundador de Microsoft casi evita que la compañía hiciese un negocio multimillonario. Por suerte, acabó entrando en razón
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F88c%2Fac6%2Fccd%2F88cac6ccd1c7d95500cc513a5d36c58d.jpg)
- Una 'startup' financiada por Bill Gates descubre una enorme mina de cobre en Zambia
- Estas son las cinco 'startups' de robótica que más entusiasman a Bill Gates
El 8 de noviembre de 2001 fue un día histórico para Microsoft. ¿La razón? Ese día, la compañía consumó su salto al sector de las videoconsolas con el lanzamiento en Estados Unidos de la primera generación de la Xbox. Su éxito fue superior al esperado, ya que cosechó 24 millones de unidades vendidas en todo el mundo hasta que, en 2005, salió al mercado la Xbox 360, la cual multiplicó casi por cuatro esa cifra.
Sin embargo, lo que muchos no saben es que todo esto que acabamos de decir estuvo a punto de no suceder debido a un episodio acontecido el 14 de febrero del año 2000, el cual se conoce en la actualidad con el curioso nombre de “la masacre de San Valentín”. Fue narrado por primera vez en el documental Power On: The Story of Xbox y tiene como protagonista al mismísimo Bill Gates, por aquel entonces CEO de Microsoft.
Ese mismo año, el fundador de la empresa cedió su puesto como director de operaciones a Steve Ballmer, para poco después centrarse en exclusiva en la filantropía. Lo que no se sabe muy bien es si este suceso estuvo directamente relacionado con su decisión o si la tenía prevista de antemano. En cualquier caso, no hacer caso a su consejo permitió a Microsoft crear un negocio valorado en más de 15.000 millones de dólares que no tenía hasta entonces.
¿Qué pasó el 14 de febrero del 2000 en Microsoft?
El documental al que antes hemos hecho referencia parte de una premisa: ¿cómo una empresa especializada en el desarrollo de soluciones ofimáticas y sistemas operativos puede crear una consola de videojuegos sin tener ni el personal ni los medios suficientes para ello? Además, en un mercado que, en aquel momento, estaba clarísimamente dominado por Sony gracias al éxito de la PlayStation 2, que carecía casi por completo de rivales y gozaba del favor del gran público.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fb10%2F4d8%2F170%2Fb104d81704b6149318d45b4cced2e86f.jpg)
Sin embargo, durante la presentación de la citada PlayStation 2, Sony afirmó que su nueva videoconsola era “tan potente que podría sustituir a los ordenadores domésticos”. Algo a lo que, obviamente, ni Microsoft ni Bill Gates estaban dispuestos. Así que el magnate convocó una reunión con Ed Fries, a la postre director del proyecto Xbox (por aquel entonces se llamaba “Midway”), y otros directivos de la compañía para decidir qué iban a hacer. La fecha elegida fue el 14 de febrero, es decir, el día de San Valentín.
Ed Fries se presentó a la reunión con una propuesta de videoconsola que no incluía el sistema operativo Windows y cuyo desarrollo iba a suponer un desembolso superior a los 1.000 millones de dólares. Todo, además, sin la más mínima garantía de éxito. “Teníamos que contarle a Bill Gates que lo que él quería no podía ser”, se oye decir a uno de los responsables del proyecto durante el documental.
"Esto es insulto a todo lo que he logrado. ¿Por qué quieres matar a Windows?"
La reunión empezó con Ed Fries, que era director de la división Microsoft Game Studios en aquella época, argumentando en favor de un modelo de consola sin Windows, ya que era mucho más barato y factible. De repente, Bill Gates se levantó y tiró los papeles que había sobre la mesa al grito de “esto es un insulto a todo lo que logrado” y “me habéis mentido. Me habéis tomado por idiota”. Así lo aseguran varios de los allí presentes.
“¿Por qué quieres matar a Windows?”, indica Robbie Bach que le espetó. Otro directivo dice que Bill Gates le gritó a pocos centímetros de su cara y que “si hubiese llevado gafas habría necesitado un limpiaparabrisas, porque escupía muchísimo”. La reunión se prolongó durante horas y horas. Tantas que los allí presentes tuvieron que cancelar sus citas de San Valentín con sus respectivas parejas.
Sony convenció a Bill Gates
Llegó el momento en el que la pesadumbre por no poder convencer al fundador y CEO de Microsoft fue tal que alguien dijo: “ok, no lo hagamos. Da igual, no lo hemos anunciado aún”. Sin embargo, otro sujeto pronunció las palabras mágicas que Bill Gates necesitaba escuchar: “¿y qué hacemos con Sony?”.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F572%2Fc1e%2F5fc%2F572c1e5fc9a48ce27a63483e8885e487.jpg)
Tras unos instantes de silencio, en los que probablemente pensó en un mundo en el que Sony se había adueñado por completo de los hogares, Bill Gates por fin dijo: “de acuerdo. Os daremos lo que pidáis. Queremos que triunfe. Tenéis todo mi apoyo”. A continuación, Steve Ballmer, que hasta ese momento había defendido la postura del máximo responsable de Microsoft, secundó la idea con un “sí, creo que deberíamos hacerlo”.
El resto es historia. Hasta la fecha, Microsoft ha lanzado cuatro generaciones de la Xbox, entre las cuales suma más de 200 millones de unidades vendidas. Conviene recordar que el curioso nombre con el que se conoce este episodio hace referencia a la “la masacre del día San Valentín” supuestamente ordenada por Al Capone contra cinco miembros de la banda North Side Gang allá por el año 1929 en Chicago.
- Una 'startup' financiada por Bill Gates descubre una enorme mina de cobre en Zambia
- Estas son las cinco 'startups' de robótica que más entusiasman a Bill Gates
El 8 de noviembre de 2001 fue un día histórico para Microsoft. ¿La razón? Ese día, la compañía consumó su salto al sector de las videoconsolas con el lanzamiento en Estados Unidos de la primera generación de la Xbox. Su éxito fue superior al esperado, ya que cosechó 24 millones de unidades vendidas en todo el mundo hasta que, en 2005, salió al mercado la Xbox 360, la cual multiplicó casi por cuatro esa cifra.