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Mitxelena (BeDisruptive): "Hay que aprender a vivir en la incertidumbre"

por EC Brands

En el primer capítulo de Battles & Bottles, un videopódcast de BeDisruptive sobre ciberseguridad, amenazas y ciberataques; Xabier Mitxelena destaca la importancia de que las empresas protejan su ciberseguridad

Si hay algo constante en la vida, es la incertidumbre. Se trata de una máxima aplicable a cualquier aspecto, pero muy especialmente a dos que nos atañen hoy: la ciberseguridad y el sector vinícola. Por un lado, en un mundo en el que los negocios de todo tipo pueden ver en peligro su seguridad informática, es necesario reflexionar sobre ella y hallar la forma de protegerla. Por otro, los productores de vino se enfrentan a sus particulares riesgos de producto y negocio: que la uva se trate adecuadamente, que las condiciones de preservación sean las correctas, que la demanda de los consumidores se mantenga, etc. Nos encontramos, por tanto, con dos sectores en principio muy diferentes, pero que guardan una convivencia similar con la incertidumbre.

Con ese espíritu nace Battles & Bottles: Ciberseguridad entre viñedos, un videopódcast de BeDisruptive en el que la compañía, junto a Pablo Teijeira, charla de ciberseguridad (o ‘ciberINseguridad’), amenazas y ciberataques, a la vez que conoce y prueba los mejores vinos de la geografía española. Todo ello lo hace junto a importantes personalidades del mundo de la seguridad informática.

Capítulo 1

Xabier Mitxelena General director de BeDisruptive

En el primer capítulo, Xabier Mitxelena, general director de BeDisruptive, se traslada hasta Bodegas Pujanza, en la localidad alavesa de Laguardia. Con tres de los mejores vinos de la bodega, Mitxelena aporta a la conversación una serie de datos en los que conviene detenerse: "La ciberdelincuencia tiene un impacto importante en el día a día. Se estima que, en 2021, los ciberdelincuentes alcanzaron unas ganancias de 6 trillones de dólares americanos. Para 2025, se espera que sean 10,5 trillones".

Pujanza

Esto quiere decir dos cosas. En primer lugar, que la ciberseguridad "es una industria en crecimiento", así que "tenemos que luchar por la excelencia, que es un trabajo de todos los días", para "seguir adelante, resilientes, mantener nuestros negocios, nuestra información, nuestros tesoros". Mitxelena reconoce que, cuando empezó a trabajar en ciberseguridad hace 25 años, "las grandes organizaciones, que son las primeras que empezaron a sufrir ciberataques, los querían ocultar, era algo que no se hacía público". Sin embargo, ahora han cambiado la forma de pensar y de actuar.

En segundo lugar, que la incertidumbre va a ser un lugar común para todas las organizaciones. "Tenemos que entender que la incertidumbre y la transformación digital de las empresas está encima de la mesa", asegura. "Esto ya no es una opción, es el único lugar en el que vamos a poder competir, así que necesitamos generar confianza. Necesitamos ser el socio de confianza de nuestros clientes para que ellos hagan su negocio y nosotros hagamos que se pueda ejecutar de forma segura".

Lo cierto es que la ciberseguridad y el mundo del vino tienen en común mucho más de lo que parece. Y aquí surge un elemento clave: la prevención. Como cuenta Carlos San Pedro, próxima generación de Bodegas Pujanza, "aquí hacemos mucha prevención: desde tratar la viña para prevenir enfermedades hasta el aclarado de racimos, que consiste en ir quitando racimos para hacer que los que se queden sean de mayor calidad".

En ciberseguridad, como en el mundo del vino, la excelencia es una palabra clave que se gana día a día y que se basa en tres pilares: escuchar, aprender y aportar. "La ciberINseguridad ha venido para quedarse", añade Mitxelena, "y para combatir la incertidumbre es necesario contar con la mejor inteligencia, el mejor equipo de análisis y los mejores procedimientos de toma de decisiones. Solo así conseguiremos esa excelencia para impulsar el negocio, ya que invertir en ciberseguridad realmente es invertir en ser más competitivo", concluye.

Objetivo: luchar contra las amenazas

Esa es precisamente la intención de BeDisruptive, la boutique tecnológica especialista en ciberseguridad que acompaña a sus clientes en el diseño de soluciones y el mantenimiento de un entorno seguro. Sus servicios pretenden optimizar los recursos, aprovechando tecnología avanzada predictiva, como la inteligencia artificial y el machine learning, para una respuesta más rápida ante incidentes, con el objetivo de mejorar la detección de amenazas y simplificar las operaciones de seguridad. Todo ello para impulsar la competitividad a través de la seguridad.

En este sentido, la compañía apuesta por transformar el mercado de la ciberseguridad de una forma más eficiente y transparente de impulsar la competitividad de las empresas, reduciendo sus riesgos y aumentando su resiliencia.