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Tengo decenas de 'gadgets' de limpieza en casa, pero al final siempre acabo usando el mismo
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HEMOS PROBADO ESTA DYSON MUY A FONDO

Tengo decenas de 'gadgets' de limpieza en casa, pero al final siempre acabo usando el mismo

Xiaomi, Roomba, Roborock... son muchos los reclamos. Pero el aparato por excelencia en casa es la Dyson, que ahora viene con nuevos trucos: una serie de accesorios que marcan la diferencia

Foto: Foto: EC.
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Las claves
placeholder He probado la tele 'low cost' del Amazon español: es una bofetada a las marcas chinas

NO HAY QUE HIPOTECARSE PARA UNA TELE GRANDE

He probado la tele 'low cost' del Amazon español: es una bofetada a las marcas chinas
Michael Mcloughlin

Muchas veces caemos en el error de pensar que lo mejor, si nos vamos a gastar los cuartos en algo bueno de tecnología, es que la principal inversión sea un móvil de muchos quilates. Habrá gente que esté muy a gusto con esta respetable decisión: al final cada uno se deja la nómina en lo que le viene en gana. Pero cuando alguno me suele pedir una opinión sincera, prefiero decir que, en caso de tener una única bala, la compra tecnológica en la que uno se rasque el bolsillo sea bien unos buenos auriculares o un buen gadget de limpieza. Son cosas que van a notar y que van a mejorar su día a día de forma evidente.

Cada vez es más fácil encontrar cascos que nos aislen notablemente de lo que nos rodea y con buen sonido por un precio asequible, así que vamos a centrarnos en la segunda sugerencia. Entre los muchísimos aparatos que pruebo cada año, hay muchos para el hogar. Desde Roombas hasta freidoras de aire o batidoras de vaso inteligentes.

Si hablamos de mantener la casa a punto, han pasado por mis manos robots aspiradores de todo tipo y presupuesto. Desde esas máquinas que vienen con la etiqueta de chollo hasta completísimos equipos que vacían el depósito de suciedad, friegan mejor que nunca, limpian la mopa y cambian el agua sin que hagas nada e incluso te permiten hacer hasta videollamadas. Eso sí, a cambio de hipotecar un riñón y una nómina. También he probado aparatos de mano que aspiran y friegan al mismo tiempo, un auténtico inventazo para los haters de la limpieza que prefieren hacer todo deprisa y corriendo. Por supuesto, he tenido que analizar aspiradoras de mano de muchas clases y marcas. Empezando por las Dyson, que se han convertido en las reinas indiscutibles de esta categoría, pero también rivales de empresas como Samsung, Roborock o Proscenic, que van subiendo el nivel de las alternativas de la marca británica.

Por qué una Dyson y no una Roomba

De todo este largo etcétera de gadgets caseros, por mucho que me impresionen todos por sus capacidades, siempre acabo utilizando el mismo: una Dyson. En concreto, la V15 Absolute Detect. Y probablemente el que la balanza se haya inclinado hacia este lado ha sido por la vuelta de tuerca que han dado con los accesorios que han ido creando en los últimos meses. La máquina ya era buena en aspectos como la potencia, la durabilidad de las piezas o la posibilidad de acceder a recambios. Pero lo realmente diferencial son esos complementos que analizaremos a lo largo de esta pieza para entender qué ofrece y si se ajusta a lo que estás buscando o eliges mejor una Roomba o lo que sea.

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Foto: M. McLoughlin.

¿Por qué acabo utilizando siempre la Dyson en lugar de otros aparatos? Probablemente, por comodidad. Mi piso es pequeño, está por debajo de los 60 metros cuadrados. Tiene un dormitorio, un baño, un recibidor y un salón con la cocina empotrada. Es un apartamento un tanto barroco, ya que en el salón, el lugar donde hago más vida, tengo un buen puñado de muebles. Una mesa circular de considerable tamaño y cuatro sillas, tres estanterías, un escritorio con su silla de gaming para cuando teletrabajo, un sofa de tres plazas, un butacón, una mesa de cristal, así como el mueble de la tele. Casi nada. El resto de estancias son más ligeras, pero en el caso del dormitorio también tengo una suerte de asiento que me resta espacio. A esto hay que sumar varias regletas colocadas como boyas, que no siempre son fáciles de esquivar.

La Roomba no me libra de tener que coger el aspirador de mano regularmente

Con este panorama, los robots aspiradores pueden sufrir bastante. Es decir, van a servir para quitarme un porcentaje bastante alto de faena, pero se dejan importantes zonas a las que no terminan de acceder o cuando lo hacen, lo hacen de manera regulera. Es cierto que los robots más caros (esos que cuestan 1.000 euros o más) han mejorado tremendamente tanto su potencia de succión como su navegación, pero no consiguen que me libre de tener que coger la escoba o el aspirador en este caso y de un repaso un par de veces por semana. Luego está el hecho de que cada vez que cocino acabo manchando con migas y otros restos los azulejos de la parte de la estancia donde está el fogón. ¿Voy a mandar al robot aspirador a repasar eso dos veces al día? Me es más cómodo tirar del aspirador de mano y a correr, que en un minuto lo tengo listo.

Este es mi caso particular. Otros creerán que es más cómodo el robot aspirador y barrer una vez por semana. También hay que señalar que no es excluyente. Si tienes una casa muy grande, igual te interesa tener una máquina de cada tipo. Todo depende de tus preferencias y de tu cartera, que no olvidemos es el órgano humano más sensible.

El cepillo de las vergüenzas

Hay varios modelos de la Dyson V15. En este caso, hablamos de la Dyson V15 Absolute Detect, que tras unos meses en el mercado se puede encontrar algo más barata, en torno a los 649 euros. Su precio de salida era de 100 euros más. A pesar de lo alto de la cifra, no es la más cara de la casa, eso le corresponde a un modelo cuya principal diferencia es tener un depósito más grande y cabezales más anchos. Creo que la V15 Absolute Detect ofrece lo que necesita el 99,9% de la gente y no merece la pena irse a un modelo superior. En lo que se refiere a la forma, es bastante similar a sus predecesoras y otras opciones del catálogo. Pesa 3,08 kilos. Particularmente, no me parece pesada y puedo hacer la limpieza general sin cansarme, pero es un dato a tener en cuenta porque cada persona es un mundo.

Nuevamente, tenemos tres modos de limpieza. El económico, el estándar y el turbo. Este último es el que más rápido agota la batería, ya que en unos 11 o 12 minutos se la funde. Ahí tienes dos opciones, o comprar una batería secundaria (suele estar incluida en algunos packs que ofrece la marca) o cargarla y esperar las cuatro horas que tarda en llenarse el tanque de combustible. También hay que señalar que este modo lo utilizo cuando se me ha derramado algo, para limpiar debajo de los almohadones del sofá o para hacer el repaso después de cocinar. Es decir, cuando hay más suciedad de lo normal. Y con ese tiempo, me da más que de sobra. Para hacernos una idea de la potencia de succión, tiré un buen puñado de sustrato de las plantas en el parque, harina y granos de arroz. En los tres casos, lo devoró completamente con dos pasadas.

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Foto: M. McLoughlin.

Para la limpieza general de la casa, me basta con el modo estándar, activando el modo turbo cuando paso la alfombra del salón. No hay mucho misterio y la autonomía se estira hasta rondar los 25-30 minutos. En el modo eco, se puede prolongar hasta los 50 minutos, pero ese programa solo me sirve para dar un repaso superficial al suelo de la habitación, la estancia que menos se ensucia.

El gobierno de esta Dyson es como el del resto. Hay que apretar el gatillo para activarla. Tenemos una pantalla LCD que nos dejará ver cuánta batería hemos gastado y el tipo de suciedad que estamos recogiendo. Los cabezales se intercambian y ajustan fácilmente y tenemos un único filtro lavable.

La mayor innovación, al menos la que más me llama la atención, es lo que ven sobre estas líneas. Ese que emite el haz de luz verde. Se trata de un cepillo suave motorizado que gira sobre sí mismo y utiliza un láser para ver cuánta porquería queda por recoger. Yo lo he bautizado como el rodillo de las vergüenzas. A simple vista, parece todo limpio, pero cuando se enciende, empiezas a ver que no es así. Es como cuando aparece mi madre de visita en casa y saca su ojo clínico para detectar algo que podría "estar mejor", a pesar de que pensaba que todo estaba limpio antes de abrir la puerta. Vamos, un clásico.

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Foto: M. McLoughlin.

Al clásico rodillo motorizado de la marca, pensado para evitar enredos de pelos o hilos en zonas delicadas como alfombras, tapicerías o camas, se une ahora un modelo compacto, puesto a la venta recientemente (a 60 euros). La pieza central, como se puede ver en la imagen, tiene forma cónica para evitar que esos restos se queden atascados. Y funciona muy bien. Hice la prueba con hilos y cordones finos y fue capaz de devorarlos y mandarlos al tanque interior. Un acierto total. Por cierto, hablando del vaciado, es tan fácil como siempre: quitar el accesorio y dar a la pestaña para abrirlo.

Más ases en la manga de Dyson

Además del rodillo con visión láser (incluído en el pack de venta) y el rodillo motorizado pequeño (se vende por separado), la compañía tiene nuevos ases en la manga, para dar una nueva vida y sacar más provecho a una de sus aspiradoras, que son lo suficientemente caros como para utilizarlos simplemente para dar buena cuenta del suelo, la moqueta y los bajos fondos del sofá. Hablamos de una serie de accesorios como un cepillo antiarañazos o uno para mascotas, entre otros. Eso sí, se venden por separado. Es probable que en un futuro acaben incluidos en la caja, pero de momento hay que pagar por ello.

Lo bueno, que no están limitados al V15. Son compatibles con la Dyson Outsize, V15, V12, V11, Cyclone V1, V8 y Dyson V7. Pueden ser un buen regalo de Reyes para alguien que tenga uno de estos modelos, ya que sus precios oscilan entre los 30 y los 70 euros.

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Foto: M. McLoughlin.

Del que más provecho he sacado es el que se ve en la imagen del teclado. Es el cepillo antiarañazos. Se trata de uno pensado para limpiar superficies delicadas, pero también de más complicado acceso, como el teclado. Cuenta con 8.100 filamentos muy suaves (sorprende al tocarlos, más suave que algunas gamuzas) que al girar la anilla de goma se despliegan.

El tubo central sigue aprovechando la succión del aspirador, así que se podría decir que es una suerte de plumero supervitaminado con el que pasar el polvo. Lo adhieres al cuerpo central y tienes un dispositivo de mano para limpiar entre las estanterías, la superficie de la tele y demás cosas, sin tener que andar quitando y colocando todo cada vez que se quiere limpiar.

El otro aparato es el kit para mascotas. Se trata de un cepillo que cuenta con más de 360 cerdas metálicas que se sacan y se guardan manteniendo un botón o soltándolo. Tiene una inclinación de unos 33 grados para facilitar pasárselo por el lomo a tu compañero animal. El planteamiento es muy sencillo, tú pasas el cepillo y recoges el pelo y luego activas el aspirador para que se lo trague.

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Foto: Michael McLoughlin.

Viene con un tubo extensible y flexible para facilitar el trabajo. Es esencialmente un accesorio para perros, por eso de que se asustan con el ruido. Yo no tengo mascotas en casa, pero la fuente de referencia para este punto ha sido mi amiga Érika, que convive con cuatro gatos y dos perros. Su resumen: ideal para quitarte trabajo con canes de pelo largo o medio que sueltan mucho pelo. El precio, eso sí, es el más alto de los tres: 70 euros.

El último accesorio es una nueva rinconera flexible, que se dobla para ayudarte con la limpieza. Está pensado para el coche o para esos rincones de difícil acceso, bien porque la boquilla no entra o bien porque hay que hacer contorsionismo para lograrlo. En mi caso, me ha servico para quitarme el TOC que me producen un par de huecos que tengo en la cocina y limpiarlos de vez en cuando, como se puede ver en la foto. Estos accesorios se venden también en diferentes kits.

La tentación (lógica) de las marcas blancas

Las Dyson son aparatos caros. Yo no es que sea de la hermandad del puño cerrado, pero tampoco tengo un agujero en la mano. Soy de esos que durante mucho tiempo eran auténticos creyentes de la tecnología low cost. Pero no siempre lo barato es la mejor compra. En este caso, creo que las aspiradoras de Dyson son una de esas inversiones que se acaban rentabilizando con el tiempo, por la calidad de sus piezas y la facilidad para cambiarlas.

Algunos amigos míos han acabado heredando la de sus padres cuando estos deciden saltar a un nuevo modelo. Y están contentísimos de haber mandado al trastero su aspirador de trineo, aunque sea gracias a un modelo de algunos años.

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Foto: M. McLoughlin.

La Dyson puede presentar un gran problema para el común de los mortales: el peso y el precio. Para lo primero, existe una opción dentro de la propia casa, que es la Dyson V12 Slim Absolute Detect, que se puede encontrar ya por debajo de los 500 euros y pesa casi un kilo menos e incluye el cepillo láser. Sin embargo, si cosas como la pantalla LCD a color o el rodillo que detecta la suciedad que no detecta el ojo te dan exactamente igual, la marca tiene un buen puñado de modelos bastante más asequibles como la V8, que por 399 euros lleva prestaciones más modestas pero que pueden ser ayuda suficiente. Es normal, cuando vemos estos precios, que nos sintamos tentados por los cantos de sirena de las marcas low cost, que prometen experiencias similares por precios más bajos.

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Foto: M. McLoughlin.

Entre las diferentes aspiradores que he ido probando, destacaría tres modelos. La primera de ellas, la ProScenic P11 Smart, una aspiradora que por un tercio del precio del V15 te puede dar un resultado decente, sin igualar sus prestaciones en potencia, accesorios o batería. Por otra parte, la Roborock H7, que aunque no tiene tanta potencia como la Dyson, ofrece un buen puñado de accesorios y una autonomía interesante, así como otras funciones como el bloqueo del gatillo para que no estés apretando el control todo el rato durante la limpieza. Y en esta línea, si eres fan de Xiaomi, tienes la Mi Vacuum Cleaner G11, que puede hacer un papel digno en casa.

Si quieres comprar algunos de los modelos mencionados, puedes hacerlo aquí:

V15 Absolute Detect (649€) V12 Absolute Detect (499€) V8 Absolute (399€)

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ProScenic P11 (299€) Roborock H7 (338 euros)

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El Confidencial ha seleccionado los productos para esta review siguiendo un criterio estrictamente editorial. El texto incluye una selección de botones/enlaces para comprar el producto al menor precio posible. El Confidencial puede generar ingresos por las ventas de estos productos, pero la inclusión de los enlaces cumple una mera función de servicio al lector dentro de un contenido periodístico.

Muchas veces caemos en el error de pensar que lo mejor, si nos vamos a gastar los cuartos en algo bueno de tecnología, es que la principal inversión sea un móvil de muchos quilates. Habrá gente que esté muy a gusto con esta respetable decisión: al final cada uno se deja la nómina en lo que le viene en gana. Pero cuando alguno me suele pedir una opinión sincera, prefiero decir que, en caso de tener una única bala, la compra tecnológica en la que uno se rasque el bolsillo sea bien unos buenos auriculares o un buen gadget de limpieza. Son cosas que van a notar y que van a mejorar su día a día de forma evidente.

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