Es noticia
He probado el nuevo Chromecast y Google por fin consigue que vuelva a verle utilidad
  1. Tecnología
CON MANDO Y A LO LOCO

He probado el nuevo Chromecast y Google por fin consigue que vuelva a verle utilidad

La compañía, empujada por el avance de competidores como los Fire TV Stick de Amazon, redefine su 'gadget' más exitoso y conocido. Si no lo hubiese hecho, quedaría en mal lugar

Foto: El nuevo Chromecast ahora viene con control remoto. (Foto: M. Mcloughlin)
El nuevo Chromecast ahora viene con control remoto. (Foto: M. Mcloughlin)

Necesita poca o ninguna presentación. El Chromecast es uno de los grandes triunfos de la carrera como fabricante de Google, muy por encima de sus altavoces inteligentes o de sus teléfonos. Hasta ahora, este 'gadget' era un simple apéndice que servía para lanzar contenido desde el punto A (móvil, tableta o portátil) al punto B (televisión, proyecto o cualquier cosa con un puerto HDMI a mano).

Foto: El Pixel 4a de Google. (M. Mcloughlin)

Era un mero repetidor que no aportaba ningún tipo de inteligencia ni función extra. Aun así, resultó tremendamente útil (y barato) en una época en la que las 'Smart TV' eran una excepción más que otra cosa. Sin embargo, el paso del tiempo le sentó tremendamente mal a este popular accesorio, que empezó a perder personalidad y utilidad por varias razones. Las teles inteligentes empezaron a aumentar su presencia en los hogares españoles, muchas integraban la función de forma nativa y las plataformas de 'streaming' empezaron a crear aplicaciones exclusivas para cada marca.

Necesitaba una vuelta de tuerca

Por si fuera poco, Amazon, con sus Fire TV Stick, o Xiaomi y Nvidia, con sus TV Box con Android, lo adelantaron con propuestas que por unos euros más —o incluso ni eso— daban muchas más funciones, una mayor oferta de 'apps' y no te hacían depender del móvil. Llegó un momento en que al Chromecast le pasó algo similar a lo que le ocurrió a la GoPro. Quedó como sinónimo de cualquier aparato que permitiese ver series en 'streaming' en una tele vieja, independientemente de que fuese o no ese aparato en cuestión. Todo esto llevó a dejarlo en una posición nada sencilla y dar unos síntomas de agotamiento evidente, que dejaban su futuro en el aire.

placeholder El 'dongle' ha cambiado ligeramente también su aspecto exterior. (Foto: M. Mcloughlin)
El 'dongle' ha cambiado ligeramente también su aspecto exterior. (Foto: M. Mcloughlin)

Pero 2020 le ha sentado bien al Chromecast. Debe ser a uno de los pocos. Lo han dado una vuelta total. Pero no hay que venirse arriba tampoco, porque directamente no les quedaba otra. Haber lanzado una nueva entrega sin diferencias sustanciales en funciones y modo de operar hubiese sido del género tonto, un lanzar por lanzar.

Ahora, se parece mucho más al dispositivo de Amazon, con la salvedad de que uno funciona con Fire OS y el otro funciona con Android TV empaquetada bajo una nueva interfaz bautizada como Google TV. Tampoco hubiese tenido mucha lógica mantenerlo con un perfil bajo en lo que se refiere a la calidad de imagen. Deja atrás el Full HD y es capaz de reproducir vídeos hasta en 4K a 60 'frames' por segundo y contenido HDR. Es compatible también con Dolby Vision y Dolby Atmos. Aunque a estas alturas de la película debería estar claro, hay una cosa que conviene recordar: aunque el Chromecast maneje calidad UHD, necesitas una pantalla con esa calidad. Si tienes un panel Full HD, lo verás en Full HD. Y si es HD, en HD.

Sobre las tripas, comentar que viene con un procesador de cuatro núcleos que corre a 1,9Ghz y 2GB de RAM, así como 8GB de almacenamiento interno. Se mueve bien y durante las horas que lo he probado no he visto que se atascase en exceso ni que tardase en abrir las 'apps'.

Por primera vez, tendremos un control remoto para utilizarlo. Por tanto, hay que colegir que nuestro móvil no es necesario para hacerlo funcionar. Y es así salvo en la configuración inicial para registrarlo en tu cuenta de Google. Es un proceso relativamente rápido y sencillo. Si además haces uso de 'Smart Lock' en Android, la herramienta para almacenar tus contraseñas, ponerlo a funcionar es aún menos farragoso, que así no tienes que andar metiendo las claves una a una.

El mando es lo que importa

El Chromecast de 2020 ha llegado con importante un lavado de cara. El 'dongle' sigue siendo un 'dongle', aunque ya no es un círculo perfecto y tiene una forma más achatada. Lo cierto es que el diseño de esta pieza importa más bien poco. Lo que importa es lo que hay dentro. Al menos en mi caso. ¿Por qué? Podría ser más feo que la parte de atrás de una nevera que en la gran mayoría de ocasiones queda oculta a la vista. Yo lo tengo debajo del mueble, detrás de una caja externa donde están todos los puertos HDMI y la toma de antena de la televisión con la que lo he probado. Imposible verlo si no te agachas.

placeholder El mando del Chromecast. (Foto: M. Mcloughlin)
El mando del Chromecast. (Foto: M. Mcloughlin)

Solo queda decir que sigue las líneas de diseño que Google ha impuesto en los últimos años en todos sus productos, con tonos pastel y acabados muy suaves. Tres cuartas partes de lo mismo ocurre con el mando, al que solo le saco una pega. Agradecería que fuese ligeramente más largo, porque lo siento pequeño en mi mano.

La parte superior está dominada por los controles para navegar y el de confirmar la accion. En el lateral, tenemos los de volumen. Hay otros ocho botones. Uno para volver, uno para ir al inicio, otro para silenciar la tele, así como el de apagado o el de fuente de la imagen. Hay un botón dedicado a la activación de Assistant. Contamos también con accesos directos a YouTube y Netflix. Sería interesante que al menos uno de estos botones se pudiese personalizar con el servicio que más utilizases.

Para no tener que andar dependiendo de múltiples controles para una misma cosa, te permite sincronizarlo con tu televisión y con tu barra de sonido para que solo necesites el mando del Chromecast. Tienes un enorme listado para seleccionar tu marca, tras lo que te pedirá un par de pasos para comprobar que todo funciona bien. Una vez hecho este trámite, yo no me he encontrado con ningún tipo de problema ni de incompatibilidad.

Un gran concentrador de contenido

El Chromecast ya no es simplemente un espejo del contenido que tienes en tu móvil. Sigue teniendo esta opción y podrás seguir usándolo para ver en la televisión cosas como las pestañas que tengas abiertas en el navegador Chrome o compartir tu pantalla en una reunión de trabajo. Pero su valor no reside en lo que ya sabía hacer, que lo hace muy bien, sino en lo que ahora hace diferente.

Este aparato ahora se convierte en un enorme cajón de contenido. Su interfaz está dividida en tres grandes áreas: la pantalla principal, el apartado de aplicaciones así como otra página 'Colecciones'. Este último apartado básicamente lo que supone es una lista de series y películas pendientes por ver, que también puedes editar desde el teléfono del móvil.

En la de aplicaciones, podrás ver las que ya tienes instaladas y acceder a ellas de forma tradicional. También buscar otras entre las diferentes categorías. Nos encontramos en parte con el mismo problema que ya vimos en los Fire Stick TV.

En la mayor parte de los apartados, toca separar la paja del grano y aun así es probable que no encuentres nada que te llame la atención. Hay muchas 'apps' dedicadas al mercado anglosajón. En la categoría 'Noticias', hay 'apps' del 'Washington Post', de la CBS o de la revista 'The Economist'. Ojo que también pueden tener su público. En otras categorías como 'Herramientas' o 'Productividad', te encuentras una ecléctica selección como gestores de archivos, VPN... a la que muchos no le encontrarán mucho sentido en este caso.

placeholder Vista de la interfaz de Google TV. (Foto: M. Mcloughlin)
Vista de la interfaz de Google TV. (Foto: M. Mcloughlin)

Quizá lo más aprovechable en estas secciones secundarias sean las 'apps' para entrenar en estos tiempos que nos ha tocado vivir, donde más de uno tiene reparo a ir al gimnasio y le ha cogido gusto a lo de hacer deporte en casa.

El panorama cambia radicalmente cuando hablamos de servicios de 'streaming'. En el caso del vídeo, tenemos prácticamente todo lo que podemos pedir en España.Incluye la 'app' de YouTube, Netflix, Prime Video, HBO, DAZN, FlixOlé, Filmin, Movistar +, Vodafone TV, Vimeo, Daily Motion, AtresMedia, MiTele, RTVE, TV3, ETB, Twicht... La única ausencia destacada en este listado va a ser la de Apple TV+, que aún no ha abierto la puerta a Android y curiosamente sí lo ha hecho con los Fire TV. En cambio, Amazon no tiene compatibilidad con HBO. Es probablemente este detalle el que marque en más de una ocasión la decisión de compra. En el apartado de audio, también contamos con 'apps' oficiales de los principales proveedores: Spotify, YouTube Music, Deezer, Tidal... Eso sí, nos vuelve a faltar la de la manzana.

La parte más interesante de este nuevo Chromecast es su pantalla de inicio. Con un aspecto que recuerda los balcones con los que presentan Netflix o Amazon Prime su contenido, nos va mostrando sugerencias de los servicios a los que estamos suscritos y hemos activado. Sin embargo, también hace hueco para otras recomendaciones, como pueden ser películas de pago de Google Play o servicios que todavía ni has activado.

placeholder La puntuación de Rotten Tomatoes sale debajo de cada peli. (Foto: M. Mc.)
La puntuación de Rotten Tomatoes sale debajo de cada peli. (Foto: M. Mc.)

Siempre que nos recomiende una cinta, aparecerá un icono de un tomate en buen estado o uno apachurrado junto a un porcentaje. Es la puntuación que se ha conseguido en Rotten Tomatoes, una web estadounidense donde se recogen las opiniones de los espectadores. Se hubiese agradecido la integración con una web a nivel local, la verdad.

En el aspecto visual, se nos presenta en primer lugar un carrusel con cuatro o cinco novedades destacadas con una gran imagen. Justo a continuación, tenemos una primera hilera de miniaturas con recomendaciones personalizadas. Recomendaciones personalizadas que irán mejorando con el paso del tiempo y cuanto más alimentes el algoritmo que mueve este agregador.

Su pantalla principal aglutina recomendaciones de varios servicios a los que estés suscrito

Si seguimos bajando, nos encontramos los accesos directos a nuestras 'apps', el balcón de novedades y otro dedicado a vídeos de YouTube (uno no es consciente de toda la porquería que ve en la plataforma hasta que se encuentra en esta sección). Para cerrar, un nuevo balcón con series y películas de éxito y uno más con películas populares. Por último, disponemos de una ventana de configuración rápida donde podemos decidir qué servicios se monitorizan para mejorar la recomendación. En mi caso, Netflix, Disney + y Amazon Prime Video.

No solo vive del 'streaming'. Tenemos una curiosa pero muy reducida selección de juegos adaptados a este formato. Nos encontramos el 'Crossy Road', 'Asphalt 8', 'Badland' o 'Farming Simulator 14'. No es excesivamente amplia, pero tienes algunos titulos que te pueden dar para un rato de diversión en algún momento. La pega es que necesitas conectar un mando externo para jugar y si lo tienes es probable que tengas otra consola y estos te parezcan un poco peñazo. En este caso, no nos sirve el propio del Chromecast como sí permite el mando de Apple TV o el del Fire Stick.

placeholder Si quieres jugar a un juego, te pide conectar un mando de consola. (Foto: M. Mcloughlin)
Si quieres jugar a un juego, te pide conectar un mando de consola. (Foto: M. Mcloughlin)

Yo he probado con el mando de Stadia y el de Xbox y ha funcionado sin problema. Insisto en que se podían haber currado un poco más el mando que viene con el 'dongle' para que sirviese también para jugar a títulos 'casual' como los que aquí nos encontramos. Hablando de Stadia, este Chromecast tendrá soporte para el servicio de videojuegos en la nube de Google a partir de 2021 y se espera que la compañía lance un adaptador de corriente que incluya un puerto 'ethernet' para poder disfrutar de internet con este cable y no dejarlo todo en manos del wifi. Este punto va a ser clave, ya que Amazon también está pergeñando su consola 'cloud' Luna, que de momento se estrenará en EEUU.

Foto: Foto: Amazon.


Assistant: buena pareja de baile

Lo último destacable que hay que comentar es la integración con Assistant. Se hace raro apretar el botón del mando y pedir algo con la voz en lugar de entrar a la 'app' y buscarlo.

Hay muchas veces que se gana algo de tiempo, ya que no disponemos de una ventana en la pantalla principal que sea 'Seguir viendo' para retomar el contenido donde lo dejamos. Si dices 'pon la serie tal' o 'la película cual', te lleva al servicio en cuestión de manera bastante precisa. Lo mismo cuando le pides ir a un minuto concreto o que avance tanto tiempo de reproducción. Entiende y maneja bien este tipo de órdenes.

placeholder Assistant tiene una integración bastante buena, aunque tiene que entrenar. (Foto: M. Mcloughlin)
Assistant tiene una integración bastante buena, aunque tiene que entrenar. (Foto: M. Mcloughlin)

Alguna vez, cuando tu pronunciación en inglés no ha sido especialmente buena, te muestra sugerencias que te dejan un tanto descolocado (no hay que olvidar que busca en YouTube), pero de eso tampoco se le puede culpar. Si le pides algo de una plataforma cuya 'app' tienes pero donde no te has logueado, te llevará hasta el contenido pero no podrás reproducirlo.

Hay cosas que tienen que pulir. Un ejemplo, para entenderlo: al pedirle un capítulo de 'Patria', la primera vez me reprodujo el álbum 'Capítulo' de una cantante que no había oído en la vida en Spotify. Al segundo intento, me llevó al 'podcast' que se ha lanzado en esta plataforma. A la tercera vez, cuando puntualicé que quería un capítulo de 'Patria' en HBO, me dijo que no estaba disponible en HBO Max, algo que no llegará hasta el próximo curso. Por lo demás, si eres usuario del asistente inteligente de Google con regularidad, no habrá mucho más misterio, pudiendo controlar bombillas, el robot aspirador o mostrando la imagen de la cámara conectada de la entrada.

¿Me lo compro?

La respuesta es... depende. Es cierto que este gadget como otros de la competencia tarde o temprano acabarán desapareciendo siendo francamente minoritarios cuando haya un gran número de smartTV. Pero a día de hoy para muchos sigue teniendo sentido comprarse un aparato así.

Obviamente, si tienes un televisor que funcione con Android TV, no tiene sentido que lo hagas. En absoluto merece la pena gastar 69,90 euros si estás en esa situación. Si tienes una televisión Samsung de última generación o cualquier tele de alta gama que funcione con su propio sistema operativo y solo quieres el 'streaming', es probable que tengas ya la 'app' oficial de los servicios a que estés suscrito. Otra cosa es que quieras también disfrutar de otras 'apps', de los juegos o de lo que te llame la atención que no tenga tu tele por defecto. O incluso el día de mañana te plantees suscribirte a Stadia, en lugar de comprarte una de las consolas de nueva generación.

Si este giro no llega a existir, el Chromecast se quedaba muy descolgado en el mercado

Otra cosa muy diferente es que optes por comprarte una televisión sin funciones 'smart' tirada de precio. O la que compres sea de unos años atrás y la oferta de 'apps' oficiales se vea muy mermada porque utiliza una versión de Android antigua, actualizando el 'software' de una manera asequible. O directamente quieras darle una segunda vida a esa pantalla vieja que tienes en el cuarto sin gastarte mucho dinero. Obviamente, la compra de un accesorio así es de cajón y este puede ser muy útil. Si el Chromecast llega a repetir el esquema de la anterior generación y solo hubiese mejorado la calidad de la imagen, lo lógico hubiese sido irse a la competencia.

Sin embargo, el giro que le han dado lo ha hecho mucho más competitivo y más útil. Sus puntos a favor son: la compatibilidad con 4K a 60fps así como con Dolby Vision y Atmos, la compatibilidad con prácticamente todas las plataformas de peso, el futuro soporte para Stadia, una buena integración con Assistant y el control remoto. El algoritmo de recomendación y la idea de tener todo el contenido en un mismo lugar es un punto a favor. Pero, obviamente, también tiene sus puntos más flacos: se agradecería que se pudiesen configurar varios perfiles y una memoria más amplia si aumenta el catálogo de juegos y aplicaciones.

Necesita poca o ninguna presentación. El Chromecast es uno de los grandes triunfos de la carrera como fabricante de Google, muy por encima de sus altavoces inteligentes o de sus teléfonos. Hasta ahora, este 'gadget' era un simple apéndice que servía para lanzar contenido desde el punto A (móvil, tableta o portátil) al punto B (televisión, proyecto o cualquier cosa con un puerto HDMI a mano).

Chromecast