Tres años para diseñar el nuevo aspirador de mano: así limpia la casa el Roborock H6

Llevamos casi toda la vida limpiando la casa con aspirador y, la verdad, ha sido un alivio la llegada de los robots inteligentes. No solo porque limpien solos (que también, claro), sino sobre todo porque al fin llega la tecnología a casa más allá del uso meramente laboral o de entretenimiento.

Sin embargo, ¿no ha sido el salto demasiado grande? De la aspiradora de siempre, que tienes que mover tú mismo, que no cabe en cualquier sitio, que no llega a muchos rincones... a un aparatito pequeño que limpia por sí mismo toda la casa. ¿No podía haber algo intermedio? ¿No podríamos tener un aspirador mucho más ligero que nos permita limpiar de manera mucho más eficiente sin necesidad de un robot inteligente?

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Eso es lo que asegura haber conseguido Roborock con el Roborock H6, un aspirador de mano en el que la compañía ha empleado tres años de desarrollo y que se puede usar de forma independiente o complementaria a los aspiradores robots ya existentes. El objetivo de Roborock parece claro: suplir ciertas necesidades aún existentes en el segmento de aspiradores de mano, especialmente el peso y la duración de la batería. Lo hemos probado. Veamos si la empresa ha conseguido lo que se proponía.

Un paso más allá en los aspiradores

De entrada, la cosa pinta bien, ya que cuando echamos el primer vistazo al H6 vemos diferencias positivas y significativas frente a otros aspiradores de mano. Para empezar, se trata de un dispositivo inalámbrico y su batería es suficientemente autónoma: 90 minutos en modo Eco y 10 minutos en modo Máximo. Además, su superficie es muy fina (nada que ver con los aspiradores tradicionales) y el cargador se puede poner en el suelo o enganchar fácilmente a la pared, así que apenas ocupa espacio.

Por otra parte, también lleva muchos más accesorios que un aspirador de los de toda la vida: tiene un cepillo para suelos duros que se puede adquirir aparte, otro para alfombras que también sirve para cualquier superficie, otro para el polvo, un minicepillo motorizado, una herramienta para recovecos y un tubo extensible.

Pero vamos a lo importante. Hay tres tipos de superficies en las que queremos perfeccionar la limpieza: las alfombras, los muebles blandos y los rincones que toda casa acaba teniendo. Vamos a ver qué tal se comporta en esos tres territorios.

Alfombras

Seamos sinceros: muchos robots limpian las alfombras de manera más que eficiente, pero en ocasiones viene bien una ayuda extra. Para ello, cogemos el cepillo especial para alfombras y lo enganchamos al H6. Ayer se nos cayó una bolsa de gusanitos (no estamos aquí para juzgar a nadie, ¿eh?), así que, la verdad, la suciedad está especialmente esparcida.

De entrada, nos sorprende el resultado: el cepillo está consiguiendo absorber todo con bastante eficiencia, algo especialmente complicado si tenemos en cuenta que las cerdas de la alfombra son bastante altas. Hacemos una pasada ligerísima y casi todo se ha recogido, así que solo necesitamos esmerarnos un poco más para llevárnoslo todo. Primer reto, conseguido.

Sofás y sillones

Este tipo de muebles son especialmente delicados, ya que una absorción demasiado fuerte puede dañarlos, así que en este caso vamos a usar dos complementos. En primer lugar, el minicepillo motorizado de rotación rápida, que es especialmente sensible cuando entra en contacto con la superficie de sofás y sillones, así como de los cojines. Por suerte, la suciedad se va sin mayor problema.

Pero este tipo de muebles tiene millones de rincones en los que siempre, como por arte de magia, encuentras nuevos huecos de suciedad. Para ello, recurrimos al segundo utensilio, la herramienta para recovecos, que permite llega a esos sitios inhabitados. Y de regalo, un clásico: limpiando nos hemos encontrado una moneda de un euro entre los cojines del sofá.

Rincones

Todos tenemos algún rincón raro en casa: el que hay al lado de la lámpara del salón, el de al lado del radiador, el que hay junto a la mesita de noche... Todos estos sitios acaban siendo el mayor dolor de cabeza a la hora de limpiar, así que, de nuevo, recurrimos a la herramienta para recovecos.

En este caso, además, nos ayudamos también del tubo extensible, que tiene una gran ventaja: es largo y estrecho, con lo que podemos llegar a los rincones sin tener que jugar al Tetris con la columna vertebral para poder limpiar. Roborock, 1-fisioterapeuta, 0.

420W para dominarlos a todos

El resultado es muy bueno, la verdad. También al limpiar superficies típicas como el suelo. El H6 está apoyado en un motor sin escobillas de 420W y un impulsor multietapa que genera una fuerza de succión máxima de 25.000 pascales (Pa). Esta es suficiente para extraer partículas y ácaros de las alfombras, camas y tapizados de vehículos.

Además, la potencia de succión aumenta de forma inteligente cuando se detecta una alfombra, y un motor de 50 W impulsa unas cerdas antiestáticas de fibra de carbono a cerca de 4.000 rpm para generar una mayor potencia de limpieza.

Buscábamos un paso intermedio entre el aspirador de toda la vida y los robots inteligentes, y eso es precisamente lo que hemos encontrado

La experiencia, en general, es más que satisfactoria. Buscábamos un paso intermedio entre el aspirador de toda la vida y los robots inteligentes, y eso es precisamente lo que hemos encontrado. El Roborock H6 te permite tener un aspirador de mano, pero con una tecnología muy superior a la de los aspiradores a los que todos estábamos acostumbrados. De hecho, puede combinarse con un robot inteligente o actuar por separado, el resultado va a ser igualmente bueno.

Este aspirador está ya a la venta por 399 euros, aunque, como oferta de lanzamiento, puedes encontrarlo en Amazon o Geekbuy por 339 durante un tiempo limitado. En definitiva, si quieres pasar de tu antiguo aspirador de mano, hay alternativas como esta que dan unos resultados muy superiores, más ligeros, sin cables, con una autonomía más que suficiente y permitiéndote llegar a rincones que hasta ahora casi desconocías.