Alumno vago, tranquilo: Wuolah cierra pero solo de broma, seguirá vendiendo apuntes

"Hola, 'wuoles', ¿cómo estáis? Nosotros estamos regular, la verdad, ha sido un día duro. Se ha hecho oficial que Wuolah va a cerrar en un par de meses, cuando acaben los exámenes": así comienza un comunicado en vídeo que ha publicado en sus redes sociales esta startup, una plataforma que ha convertido el clásico 'déjame los apuntes' en un negocio. Wuolah es una empresa que surgió de la idea de unos estudiantes sevillanos que buscaban ayudar a los alumnos a pagar una parte de sus estudios con sus propios apuntes, ofreciéndoles una pequeña cantidad por cada descarga de los documentos. Una especie de Rincón del Vago en versión 'premium'.

En el vídeo, continúan, quieren explicar el porqué de su cierre. "Esto es... una broma. Es una pequeña inocentada. Wuolah no va a desaparecer, y de hecho no para de crecer. Seguimos luchando por una educación libre, igualitaria, gratuita y de calidad. Si tú también eres una persona traviesa, síguenos el rollo con el 'hashtag' #WuolahCierra y provoca un par de microinfartos". Y lo han conseguido: lo de los microinfartos quizás no, pero convertirse en 'trending topic' en Twitter sí.

La aplicación nació hace ya cerca de cinco años en Sevilla, y cuenta con unos 15.000 seguidores en Twitter. A los cinco meses de nacer ya contaba con más de 10.000 usuarios registrados, y en la actualidad cuentan con 850.000. "Y parece que fue ayer", señalan desde Wuolah a Teknautas. A pesar de que el día por antonomasia de las bromas (en Internet y en la vida real) es el 28 de diciembre, día de los Santos Inocentes, desde Wuolah han querido adelantarse, aunque prefieren no decir por qué: "Eso es un secreto. Somos unos traviesos".

Lo cierto es que mucha gente parece haber escuchado la llamada de Wuolah, o quizás se hayan creído el cierre de verdad, porque no pocos usuarios de las redes sociales han mostrado su descontento ante un inminente cierre de la plataforma. "Que me salgo de carrera", dice @weasleydeiv; "Dios mío, pero qué ganas de llorar me han dado viendo el vídeo", se suma @Otomelette. Frases como "Me he visto abandonando la carrera" o "Me estaba ya descargando los apuntes de hasta cuarto de carrera" han ido cayendo uno a uno en respuesta al vídeo. "El infarto es real", se suma @Farmaligoteos. Tranquilos, solo ha sido una broma.

¿Cómo funciona Wuolah?

Cada alumno que decide sumarse a subir sus apuntes recibe una compensación que depende de varios factores. En primer lugar, el formato: solo son retribuibles los apuntes que se 'suben' en formato PDF porque es el único al que se le puede insertar publicidad. También depende del número de páginas —obviamente, a mayor número de páginas más saldo, por lo que un documento corto con muchas descargas puede generar menos saldo que uno más largo pero con menos descargas—, y de lo que pague el anunciante: "no todos los anunciantes pagan lo mismo por salir en las páginas de los apuntes", señalan en la propia página.

Para cobrar por los apuntes descargados, no obstante, hay que esperar a tener un mínimo de 20 euros acumulados. Desde Wuolah, además, señalan que tratan de velar por el buen uso de la plataforma, por lo que penalizan a los usuarios que cometan irregularidades, como descargas fraudulentas o falsas —en este caso, se descuenta del saldo acumulado la cantidad ganada mediante estas prácticas—. Una vez que se cuente con este mínimo exigido, el dinero se puede transferir a través de Paypal, o también se puede solicitar una tarqueta regalo de Amazon. Aunque la cosa no se queda ahí: el dinero también se puede donar a las Becas Comedor de la ONG Educo.